jueves, 9 de noviembre de 2017

Los efectos asturianos de la compra del Popular...

Las consecuencias del ERE del Banco Santander en Asturias

La entidad reestructurará los servicios centrales con la salida de 1.585 personas y la recolocación de 575. En el Principado se verá afectada una oficina del Popular con seis empleados

Trabajadores del Banco Popular se manifiestan ante la oficina central en Oviedo.
Trabajadores del Banco Popular se manifiestan ante la oficina central en Oviedo.

REDACCIÓN 
El Banco Santander ha puesto ya cifra al primer ajuste de personal como consecuencia de la absorción del Popular. La entidad ha trasladado a los sindicatos que el ERE en los servicios centrales afectará a más de 2.100 empleados. De ellos, 1.585 tendrán que salir de la entidad, y el resto, 425, podrían ser recolocados en otras filiales. En Asturias la medida afectará a una oficina del Popular en la que trabajan seis empleados.
La sucursal afectada está situada en la calle Quintana esquina con Santa Susana, en Oviedo. Según explica Alejandro Díaz, secretario de UGT en el Popular en Asturias, se trata de una oficina «que no es de atención al público, se dedica a la gestión de inmuebles del banco». El responsable sindical añade que allí trabajan seis personas, que son, en principio, los únicos afectados en la región por la decisión del Santander. Eso no quiere decir que sean despedidos, ya que el ERE plantea bajas voluntarias en función de la edad y ofrece la opción de recolocarse. La plantilla de esa oficina es joven, por lo que, en principio, la mayoría podría preferir la recolocación.
Este ajuste afectará prácticamente en su totalidad a Madrid, donde están los servicios centrales de Santander y Popular, con muchas duplicidades. Por el momento, la red comercial de ambas entidades no se verá afectada en el marco de esta negociación, pues su integración no se prevé hasta el año 2019, una vez culminada la integración tecnológica.
Según explicó Santander el pasado viernes, la reducción de plantilla se efectuará mediante un criterio de meritocracia en el que se aprovechará «el mejor talento» de ambas entidades, con un «esfuerzo especial» para que las salidas que se produzcan se realicen en «buenas condiciones». En cualquier caso, el ajuste se efectuará después de que tanto Santander como Popular aplicaran en 2016 sendos Expedientes de Regulación de Empleo (ERE).
En la actualidad, Santander cuenta con 200.949 empleados, de los que aproximadamente un 6% correspondería a Popular, puesto que al cierre del primer trimestre -la última vez que presentó resultados de forma independiente- esta entidad contaba con 15.020 trabajadores, 13.449 de ellos en España. En conjunto, los servicios centrales de Popular y Santander España engloban a unos 7.000 empleados.

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