Política de puertas abiertas...

ASTURIAS Varios miembros del partido naranja ya ha llamado a la puerta de Canga 01 feb 2023 . Actualizado a las 05:00 h. Comentar · 7 No dicen nombres ni tampoco cargos o puestos en ayuntamientos o Junta General pero el PP de Asturias ha señalado que ya han hablado con varios miembros de Ciudadanos Asturias para un salto a la formación de centro derecha y que, además, en las últimas horas se ha producido un «efecto cascada» con nuevas llamadas desde el partido naranja para conocer las posibilidades de traspaso al azul de Feijoo. A los rumores sobre la situación del partido naranja en Asturias se han unido los problemas de descomposición del grupo en la capital del estado y también que en Oviedo directamente y forma oficial el alcalde Alfredo Canteli le ofreciera a su teniente de alcaldía Ignacio Cuesta (que es el coordinador, el máximo dirigente, de Ciudadanos en Asturias) que se presentará en sus listas en las próximas elecciones de mayo. Cuesta, que desde hace meses ha contestado con evasivas a acusaciones desde su propio partido de pretender hacer ese cambio volvió a eludir una respuesta directa y habló de procesos que llevan tiempo. Pero la situación se precipita por momentos. Si no hay respuesta desde Madrid al hecho de que el principal dirigente de una organización con cinco escaños en la Junta General del Principado se piense abiertamente saltar de organización se explica en buena medida por la falta de control de sus órganos centrales. La vicealcaldesa de Madrid, Begoña Villacís, también habló de forma directa de incorporarse al PP pero Isabel Díaz Ayuso la vetó para el partido en la comunidad y le instó a que llamara directamente al PP nacional en el timbre de Génova. «Aquí no hay vetos» se indicó desde el PP de Asturias donde se insistió en que tienen las puertas abiertas. Las mismas fuentes indicaron que las personas que han pedido pasarse desde Ciudadanos les solicitaron discreción. Las palabras de Canga Precisamente este mismo lunes, el candidato del PP al Principado, Diego Canga, en un acto celebrado por la Federación de Empresarias y Directivas de Asturias (FEDA), afirmó que «lo único que puedo hacer es dar la bienvenida a estas personas que se quieren incorporar a nuestro proyecto, sea en Oviedo, en el ámbito autonómico o en otros sitios», y ha agregado que está situación se están dando en «toda España, y ojalá Asturias sea pionera y haya más incorporaciones». Canga insistió en una idea que ha repetido en las últimas semanas, que «ya que no tiene ningún sentido presentarse a las elecciones, una vez más, fraccionados», y que consideraba «necesario que el centro-derecha aparezca, por una vez, aglutinado para las elecciones de mayo». El problema del candidato Popular no ha surgido por el lado de Ciudadanos sino por la imposible conciliación de Foro, a quien también lanzó la caña, con su fundador hoy expulsado, Francisco Álvarez-Cascos, que se deja cortejar cuando el PP asturiano le corteja y lo hace de forma intermitente. Pero Cascos ha sido objeto de polémica intensa de forma reciente, con publicaciones sobre prebendas con empresas con las que mantuvo vínculos en su etapa como responsable de Fomento. El otro grupo en liza en el espectro de derechas es Vox, con el que el PP ya comparte gobierno en Castilla y León, también origen de dolores de cabeza para Feijoo en su presentación como candidato moderado con iniciativas como la de mostrar una ecografía y mujeres que quieran abortar. En Asturias los de Vox renuevan candidato en las autonómicas con el paso atrás de Ignacio Blanco para que la lista la lidere la concejala de Tineo Carolina López. En todo caso, Canga apenas se ha referido a pactos con Vox y pero sí a que intentará seducir a sus votantes más «pragmáticos». El pecado original Ciudadanos Asturias llega a esta situación tras una legislatura muy atribulada, cargada de dimisiones y expulsiones, pero también partiendo de un pecado original no muy distinto a su panorama contemporáneo. El núcleo inicial de los naranjas en Asturias partió de un salto simultáneo e instantáneo desde la Unión, Progreso y Democracia (UPyD) que ya tenía un escaño en la Junta General con Ignacio Prendes. Tras una etapa en la política nacional que le llevó a sentarse en la mesa del Congreso de los Diputados, Prendes terminó defenestrado en Asturias por Cuesta tras pactar con Canteli en el Ayuntamiento de Oviedo, y de los órganos nacionales por plantear objeciones a la estrategia de Albert Rivera de pactar sólo con el PP. Pero la peor evolución fue la del grupo parlamentario, que estaba liderado por el exrector de la Universidad de Oviedo, Juan Vázquez y varios independientes procedentes de la academia. Vázquez se fue tras formarse el parlamento y el resto en un goteo tras el veto desde Madrid a un acuerdo presupuestario el primer año de legislatura. Su portavoz Laura Pérez Macho terminó renunciando tras tensos enfrentamientos con la dirección (ya tras denunciar que había un plan para pasarse al PP). El otro diputado opuesto a la dirección regional, Armando Fernández Bartolomé, fue expulsado del grupo parlamentario en una decisión que terminó siendo contraproducente para el bloque de los naranjas y que perdió su ocasión para ser decisivos en una negociación presupuestaria como en los dos años anteriores.