Serán capaces de desenmarañar la tupida red creada por los bancos para tapar sus vergüenzas?
@María Igartua - 27/01/2010 06:00h
Un año más la ciudad Suiza de Davos alberga la cita político-económica más importante del año. Hoy arranca el Foro Económico Mundial en el que, durante una semana, los presidentes y consejeros delegados de las mayores empresas del planeta se encuentran con los principales jefes de estado y de gobierno para tratar los temas más relevantes del sistema económico mundial.
Si la edición del año pasado cobró especial relevancia, dada la profunda crisis en la que se encontraba sumido el mundo entero, en la de 2010 ha llegado el momento de hacer balance de las medidas adoptadas entonces y el camino hacia el que toca ahora dirigirse.
Sin embargo, si algo va a tener en común este encuentro con el de 2009 es que los bancos van a ser protagonistas durante el desarrollo del Foro. Hace un año exactamente, con las orejas gachas, eran los grandes culpables del colapso del sistema financiero que había llevado a la peor crisis desde la Gran Depresión.
Una vez superada la tormenta y con el dinero de los diferentes rescates devuelto, van a intentar sacar pecho para defender sus intereses. De hecho, el encuentro se produce justo una semana después de que el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, anunciara su intención de poner en marcha medidas encaminadas a limitar el volumen de los bancos, así como sus operaciones con el fin de aliviar su exposición al riesgo.
La iniciativa de la administración norteamericana ha sido recibida con buenos ojos por el resto de países desarrollados y los bancos, los grandes perjudicados de esta situación, van a aprovechar Davos, desde su recuperada posición de fuerza, para hacer lobby con el fin de evitar que los Gobiernos les corten las alas. Este va a ser, probablemente, uno de los debates más polémicos que va a albergar el Foro Económico Mundial.
Pero no va a ser el único. Los países emergentes han salido reforzados de la crisis y, en concreto, China, ha cobrado gran importancia como líder de la recuperación económica. No obstante, con crecimientos superiores al 8%, mientras que los desarrollados vivían una de las peores recesiones desde la II Guerra Mundial, nadie se paró a hurgan en el motor económico del gigante asiático.
Ahora, la burbuja inmobiliaria creada en China preocupa y mucho. Su estallido podría suponer una debacle diez veces superior a la quiebra de Dubai, otro de los temas que seguro saldrá a colación en el encuentro, y salpicaría al mundo entero.
De esta manera, en el trasfondo de Davos lo que realmente estará presente es la globalización. No sólo sus oportunidades, las cuales llevan mucho tiempo siendo vendidas, sino que esta crisis ha puesto de manifiesto también los problemas del proceso que se inició hace ya algunos años y que no tiene marcha atrás.
No hay comentarios:
Publicar un comentario