A sus puestos, yá!

Hay que aprovechar el canalillo, apuren y háganlo bién.


Las CCAA se valdrán del ultimátum de Bruselas a las cajas para forzar fusiones políticas

@Eduardo Segovia - 29/01/2010 06:00h

El Gobernador del Banco de España, M. A. Fernández Ordóñez La politización de las cajas de ahorros puede incrementarse todavía más con la decisión anunciada ayer por la Comisión Europea de limitar el plazo en el que puede operar el FROB (Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria) hasta junio. En contra de la interpretación general de que esto es un arma para que el Banco de España acelere las fusiones, distintas fuentes del sector aseguran que los beneficiados son los Gobiernos autonómicos, que incrementarán la presión para conseguir las fusiones que ellos quieren y no las que persigue el supervisor.

Según estas fuentes, la decisión de Bruselas ha sembrado el temor entre los gestores de las cajas que están buscando fusiones más por criterios técnicos que políticos. Creen que los políticos tendrán ahora muchas más alas y el terreno despejado para defender sus proyectos de fusión intrarregionales: “Hay que fusionarse ya, sin tiempo que perder, el Banco de España lo dice y sólo tenemos hasta junio", será el argumento que utilicen los Ejecutivos autonómicos.

"Las cajas estaban jugando a ganar tiempo para no entrar en fusiones políticas, pero ahora se han quedado sin ese tiempo y las van a obligar a entrar en esos movimientos, que es justo lo contrario de lo que quiere Fernández Ordóñez", añade otra fuente.

Sin tiempo para ver cómo va 2010

Muchas entidades estaban esperando a ver cómo les iba en los primeros trimestres de 2010, que todo el mundo considera que va a ser el año más duro de la crisis, para decidir si entraban o no en una fusión y si necesitaban la ayuda del FROB. Ahora ya no tienen ese margen, sino que deben tomar la decisión rápidamente y son mucho más vulnerables a las presiones políticas porque no cuentan con la posible defensa de un par de trimestres buenos en sus cuentas.

El ejemplo más candente es el de las cajas gallegas, con el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, empeñado en fusionar a Caixa Galicia con Caixanova, mientras que el Banco de España prefiere que ambas participen en fusiones interregionales y la caixa viguesa se resiste como gato panza arriba a ser absorbida por su vecina. Con la decisión de Bruselas, la presión de la Xunta se incrementará notablemente ante la falta de margen de maniobra de las dos entidades.

Una cuestión crucial es si el Gobierno, la CECA y el propio MAFO darán su brazo a tocer frente a los barones autonómicos en proyectos que normalmente sólo se justifican por criterios políticos y por el acceso a las ayudas públicas para tapar agujeros. "Habrá que ver hasta dónde es capaz de llegar el Banco de España; si hasta ahora no ha podido hacer nada es porque, cada vez que da un paso, las autonomías ponen el grito en el cielo, le exigen que las informe, que ellas lo autoricen, etc.", asegura otra fuente conocedora de la situación. "Por ejemplo, si MAFO dice que hay que relevar a los gestores, éstos se van a ver al consejero correspondiente y para su salida", añade.

Sin prórroga para devolver las ayudas

Otro de los elementos de la resolución de Bruselas es la prohibición de que se prolongue el plazo para devolver las ayudas del FROB más allá de los cinco años iniciales, una posibilidad que preveía el Real Decreto con el que se creó este fondo. Según una de las fuentes consultadas, esta prohibición se debe a que el BCE considera que estas ayudas distorsionan la base monetaria de la zona euro, ya que no irán a parar a manos del público en forma de crédito, sino a fortalecer la solvencia de las entidades.

"Muchas cajas están preocupadas porque saben que no van a poder devolver el dinero en cinco años y contaban con ese aplazamiento", asegura esta fuente. En caso de no poder devolverlo en plazo, estas ayudas se convertirán en cuotas participativas con derechos políticos, con lo que el FROB entrará en el consejo. A eso hay que sumar que estos préstamos -que se harán mediante participaciones preferentes- son muy caros, con un tipo de interés que estará entre el 7% y el 10% anual en función del rating de las entidades que se fusionen. De hecho, la CECA ha recomendado a las cajas que sólo acudan al FROB si no tienen otra alternativa.

No obstante, otras fuentes consideran que "es un brindis al sol, porque cuando llegue el momento el Gobierno negociará con Bruselas y prorrogarán este plazo".

A pesar de estas limitaciones, la aprobación del FROB es una excelente noticia para las tres fusiones de cajas que ya habían solicitado ayudas y que habían tenido que paralizar el proceso ante la falta de diligencia del Gobierno para poner en marcha el fondo. Se trata de CaixaCatalunya-Manresa-Tarragona, Caixa Sabadell-Terrassa-Girona-Manlleu y Caja Duero-España.