El banco que preside Josep Oliu se disparó la semana pasada un impresionante 22,44% hasta 1,98 euros, mientras que la entidad dirigida porÁngel Ron escaló el 13,18% hasta 3,93. Más lejos se sitúa Bankia, que el jueves y viernes se sumó a la fiesta con sendas alzas del 7,63% y el 2,14%, y alcanzó los 0,76 euros. Para explicar la escalada de la banca mediana, analistas y medios de comunicación aluden a sus teóricamente buenos resultados del primer semestre y al cambio de percepción que han provocado en el mercado -el sentimiento de que lo peor ha pasado y ahora comienda la recuperación- así como a la probable aprobación por parte de la EBA (Autoridad Bancaria Europea) de la propuesta española para no tener que deducir los activos fiscales diferidos del capital (DTA), como explicó la semana pasada El Confidencial..
Josep Oliu, presidente de Sabadell.  (EFE)Ambos factores son ciertos (si bien el segundo es muy arriesgado, porque, si no se aprueba, Sabadell estaría abocado a una mega-ampliación de capital). Pero las fuentes consultadas aseguran que el principal elemento detrás de ese calentón bursátil es el interés de Slim y otros inversores latinoamericanos por estas entidades. El hombre más rico del mundo tiene una participación simbólica en CaixaBank, aunque su alianza conIsidre Fainé se ha debilitado tras la venta del 10,1% de Inbursa, el banco de Slim en México, por parte de la entidad catalana. En todo caso, Slim mantiene su interés por el negocio bancario en España y, según las fuentes, el momento de tomar una participación relevante sería el actual.
Esto se explica porque, con el derrumbe de las cotizaciones de la banca mediana, se puede tomar una participación de control sin demasiado esfuerzo. Más aún si la entrada se hace mediante canje de acciones, puesto que losgrandes bancos latinoamericanos cotizan a más de 2 veces su valor en libros mientras que Popular y Sabadell apenas superan las 0,6 veces ese valor pese a la escalada (venían de niveles inferiores a 0,5). Y dado el cambio de percepción sobre la banca española, esta entrada debe hacerse sin mucha tardanza, antes de que las cotizaciones se escapen y, en consecuencia, el precio se encarezca. Las recientes vacaciones de Slim en nuestro país le habrían servido para estudiar esta posible operación.
El FROB, encantado
El gran obstáculo para esta entrada sería el habitual en estos casos: laresistencia del consejo actual de los bancos españoles. Pero las fuentes consultadas explican que puede vencerse reservando a sus miembros una minoría mayoritaria en el consejo de la entidad resultante. Respecto a la actitud de las autoridades españolas, algunas de estas fuentes aseguran que es bastante receptiva a este tipo de operaciones: "El Gobierno está deseando que entren inversores internacionales en la banca española para lanzar un mensaje de que la crisis y el saneamiento del sector financiero han terminado. Sabe que no lo va a conseguir en las subastas de las entidades nacionalizadas pero ve con buenos ojos que entren en otras que han sobrevivido a la crisis pero que siguen con bastante debilidad", según una de ellas.
Ángel Ron, presidente de Banco Popular. (EFE)Otra asegura incluso que "el FROB está encantado de que le quiten potenciales problemas de encima, y Popular y Sabadell pueden serlo: el primero porque la escalada de la morosidad y las fuertes provisiones pueden dejar corta la ampliación del año pasado; y el segundo, por si al final no se pueden mantener los DTA, o al menos una parte significativa"
Slim podría tratar de aprovechar la recuperación de la banca española con los dos grandes del sector, Santander y BBVA. Pero sus valoraciones son ya bastante superiores -el banco que preside Francisco González está a punto de alcanzar 1 vez valor en libros- y, además, se espera que los players puramente nacionales se beneficien más de la recuperación en bolsa igual que han sido más castigados durante la crisis. De hecho, el broker BPI rebajó el viernes la calificación de los dos grandes y recomendó a sus clientes cambiarlos por las entidades medianas.