domingo, 7 de marzo de 2021
Selección Lírica....escuchen porfa!!!!
5 minutos que te harán amar a los tenores
Rufus Wainwright, Josh Groban, Andrea Bocelli y otros eligen las voces doradas más apasionadas de la ópera.
3 de marzo de 2021
En el pasado, hemos elegido los cinco minutos más o menos que tocaríamos para hacer que nuestros amigos se enamoran de la música clásica, el piano, la ópera, el violonchelo, Mozart, compositores del siglo XXI, el violín, lamúsica barroca, las sopranos, Beethoven,los cuartetos de flauta y cuerda.
Ahora queremos convencer a esos curiosos amigos para que amen la voz apasionada y sonando tenor. Esperamos que encuentre mucho aquí para descubrir y disfrutar; dejar sus elecciones en los comentarios.
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Rufus Wainwright, compositor y compositor
A mi padre, Loudon, nunca le ha gustado mucho la ópera. Pero cuando tenía 13 años, el error de la ópera me golpeó fuertemente, y estoy bastante seguro de que en un esfuerzo por entender mejor lo que estaba pasando, compró un CD de Luciano Pavarotti. Una de las canciones era una versión emocionante de "Di rigori armato seno" de "Der Rosenkavalier" de Strauss, y me introducí con el aria. La interpretación de Pavarotti también me conecta con una experiencia posterior y magnífica cuando, durante una interpretación de "Rosenkavalier" a la que asistía en la Ópera Metropolitana, Luciano apareció mágicamente - sin facturación - para cantar el cameo del tenor italiano y este aria. El público se volvió completamente loco. Fue la primera y única vez que lo vi en vivo.
Luciano Pavarotti
"Der Rosenkavalier" de Strauss (Decca)
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Lawrence Brownlee, tenor
Sólo se necesita un momento para escuchar el comando y el fervor en la voz del gran Mario Del Monaco. No es necesario hablar italiano para entender quién es Otello: Es autoritario; él es un comandante; ha regresado a Chipre en triunfo. Este breve aria es notoriamente traicionera, pero Del Mónaco la ataca con un abandono intrépido. Cuando cantaba este papel, a menudo recibía aplausos salvajes por sólo estos pocos segundos de música, lo que creo que dice mucho sobre el impacto que incluso una pequeña cantidad de música poderosa puede tener con el intérprete adecuado.
Gracias por leer The Times.
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Mario Del Mónaco
"Otello" de Verdi (Metropolitan Opera)
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Josh Groban, intérprete
Hace muchos años, de gira, me encontré en la pintoresca ciudad de Borlange, Suecia. Mientras exploraba me encontré con un museo dedicado al hombre conocido como el "Caruso sueco": jussi Bjorling de Borlange. Escuchar la pureza, el alcance y la emoción en su voz por primera vez, en ese raro día libre en un lugar hermoso lejos de casa, fue especial y realmente tocó mi alma. ¡Tal vez mis propias raíces escandinavas se estaban despertando! Me han encantado las grabaciones de Bjorling desde entonces - una de mis favoritas es "O Helga Natt", "O Holy Night" en sueco - y a menudo me he preguntado por qué esta joya de un tenor no es más conocida en Estados Unidos.
Jussi Bjorling
"O Helga Natt" (Warner Classics)
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Anthony Tommasini, crítico jefe de música clásica del Times
Cuando tenía unos 13 años, sólo tardaron unos tres minutos y medio — la longitud del aria "E lucevan le stelle" de "Tosca" de Puccini — enamorarse de los tenores. Especialmente Jussi Bjorling, el cantante en una grabación clásica de 1957 de la ópera. La voz de Bjorling combinó la riqueza de fusión con una intensidad palpitante. Su sonido era tan innatamente expresivo que todo lo que cantaba, incluso un aria alegre, tenía un teñido melancólico. Y en este aria, cuando Cavaradossi, frente a la ejecución, redacta una carta final a su amada Tosca, el canto lloroso y doloroso de Bjorling es incomparablemente hermoso.
Jussi Bjorling
"Tosca" de Puccini (RCA Victor)
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Christine Goerke, soprano
Puedo recordar fácilmente el primer aria tenor que escuché. Acababa de decidir estudiar voz, después de haber sido un especial de educación musical y clarinete. Lo último es importante, porque aunque vine a este aria para la impresionante escritura para clarinete en la introducción, me quedé para el cantante. No puedo imaginar una introducción más deliciosa a los tenores que "E lucevan le stelle". En la primera audiencia, me cautivó por completo su drama y belleza. El tenor resultó ser el incomparable Franco Corelli, y siempre he escuchado una gran humanidad en su sonido: riqueza, alegría, tristeza, emoción, emotividad.
Franco Corelli
"Tosca" de Puccini (Metropolitan Opera)
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Andrea Bocelli, tenor
Yo era un niño cuando alguien me dio este disco como regalo. La orquesta introdujo la voz amplia y vibrante de Franco Corelli, que estaba impregnada de sentimiento y se fue directamente al corazón. Su canto se sintió espontáneo: dulce por momentos, rugiendo a los demás, pero siempre al mando. A pesar de mi corta edad, pude comprender hasta qué punto la música podía transmitir las emociones más abrumadoras, mucho más que sólo palabras, llevando al oyente a un estado de bienestar elevado. También sentí, en el timbre de su voz, la fuerza de un encuentro que marcaría mi vida: Muchos años más tarde, Corelli se convertiría en mi maestro.
Franco Corelli
"Andrea Chénier" de Giordano (EMI Classics)
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Corinna da Fonseca-Wollheim, escritora del Times
Las palabras y la melodía se fusionan en una de estas canciones jacobeas de laúd diseñadas para desterrar el insomnio. Digo canción, pero en realidad es un encantamiento: invocando el sueño para aliviar el dolor de un amigo, el cantante cae bajo su hechizo calmante él mismo, hasta que ya no está claro quién hace cuya oferta. El compositor y lutenista Robert Johnson (1583-1633) debió aprovechar el poema de John Fletcher porque su lenguaje ya traza contornos melódicos, "fáciles, dulces y como una corriente de purga". Para el cantante, el texto es una invitación a aligerar y suavizar la voz hasta que flote, rizos y caricias como el "viento murmurante hueco".
John Potter
"Sueño encantador" de Robert Johnson (ECM)
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Joshua Barone, editor del Times
Las cuerdas brillan en un registro celestial cuando el personaje principal de "Lohengrin" de Wagner comienza a contar su historia. En una tierra lejana, canta suavemente, hay un castillo llamado Montsalvat, donde los hombres más puros velan por una reliquia sagrada: "Se llama el Grial". Con esas palabras, la música se hincha para forjar como un destello de luz: los cielos se abren en revelación, la voz de Lohengrin es un recipiente clarion para el poder del Santo Grial. Con el tenor adecuado, como Jonas Kaufmann aquí, esta transición de la sobriedad silenciosa a la luminosidad heroica puede ser tan impresionante como el tesoro que describe.
Jonas Kaufmann
"Lohengrin" de Wagner (Ópera Estatal de Baviera)
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Zachary Woolfe, editor de música clásica del Times
Una joven llama a la puerta de su vecino, buscando una luz para su vela; el vecino se presenta como poeta y coquetea un poco. No podría ser más simple, pero en la música de Puccini y la voz dorada de Pavarotti, elevarse al éxtasis con facilidad constante, es sublime.
Luciano Pavarotti
"La Bohème" de Puccini (Decca)
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Micaela Baranello, musicóloga
Después de meses de apenas salir de mi casa, me ha atraído una canción de la opereta de Emmerich Kalman "Conde Mariza" en la que el empobrecido conde Tassilo se sienta en algún lugar de Hungría recordando sus días de gloria en la sociedad vienesa. Es un vals lento, un recuerdo de valses más rápidos y una imagen sonora nostálgica de la Austria anterior a la Primera Guerra Mundial. (La opereta se estrenó en 1924.) A medida que Tassilo es transportado brevemente a "mi Viena", el verso menor se mueve a un estribillo más brillante y una sucesión de notas altas. Me encanta la riqueza y simplicidad de esta grabación de Fritz Wunderlich; su trágica vida corta lo hace aún más agridulce.
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Fritz Wunderlich
"Condesa Mariza" de Emmerich Kalman (SWR Classic)
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Jonas Kaufmann, tenor
La grabación de Fritz Wunderlich de "Granada" es uno de mis discos de la isla desértica. Su canto es increíble, absolutamente lleno de energía. Cantó todo con tanto amor y esperanza, tanta pasión y fuego, que te hizo pensar que era la última actuación que iba a dar. Cada vez que cantaba, no sólo era 100 por ciento un artista, sino también 100 por ciento un ser humano; siempre hubo un vínculo directo entre sus sentimientos y los de sus oyentes. Con él, incluso la música superficial y las letras slushy sonaban como lo más hermoso del mundo.
Fritz Wunderlich
"Granada" de Agustín Lara (Decca)
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David Allen, escritor del Times
No hay momento más puramente emocionante en todo Wagner que el final del primer acto de "Die Walküre", ya que Siegmund saca la espada Nothung de un árbol y con ella se gana a sí mismo una novia, Sieglinde - que, siendo Wagner, resulta ser su hermana gemela. Y no ha habido más tenor puramente emocionante en la música de Wagner que Lauritz Melchior, el querido danés de la Met Opera en los años 30 y 40. Sonando a través del micrófono desde Viena en 1935, El Siegmund de Melchior es ardiente, inteligente, nítido, completo en todos los aspectos.
Lauritz Melchoir
"Die Walküre" de Wagner (Prístino)
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Ian Bostridge, tenor
Peter Pears es, extrañamente, probablemente el tenor más importante de la historia musical. Extrañamente, porque no era de ninguna manera un tenor típico. Caruso, Pavarotti, Domingo: Estos son los modelos, y el extraño timbre de Pears no encaja realmente con el suyo. Pero inspiró más música de su pareja, el compositor Benjamin Britten, que cualquier otro cantante del siglo XX: óperas como "Peter Grimes" y un montón de canciones increíbles. Peras también canta Schubert muy bien.
Peras de Pedro
"Nachtviolen" de Schubert
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David T. Little, compositor
En tiempos difíciles, a menudo recurro a "Der Leiermann" de Schubert para mayor comodidad. El movimiento final de su famoso ciclo de canciones "Winterreise", se siente vulnerable y extraño, íntimo y alienígena. Esto es especialmente cierto en grabaciones más recientes, como este lanzamiento de 2009 en el que Paul Lewis se burla de la disonancia evocadora del piano y el tenor Mark Padmore flota arriba, deslizándose. Actúan con una calidad silenciosa que cabría esperar escuchar en una canción pop emocionalmente expuesta, dando a Schubert una sensación de calidez y escalofrío de melancolía, simultáneamente moderna y atemporal.
Mark Padmore
"Winterreise" de Schubert (Harmonia Mundi)
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Seth Colter Walls, escritor del Times
Cuando oigo a alguien decir que la vanguardia del siglo XX era un cementerio para la melodía, siempre pienso en Hans Werner Henze como un contraejemplo principal, particularmente el final de su ópera "Los Bassarids". Al adaptar "The Bacchae" de Euripides, Henze asumió el reto de escribir música con la gama dionisíaca: aterradora en su poder, pero también creíblemente capaz de desviar las almas que buscan placer. Sus cantantes deben clavar la complejidad modernista de la partitura, al tiempo que tiran de sus hilos seductores. Cuando oí al tenor Sean Panikkar cantar Dionisio en la Komische Oper de Berlín en 2019, estaba listo para inscribirme en el ejército del dios del vino.
Sean Panikkar
"Los bassarids" de Hans Werner Henze (Komische Oper Berlin)
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Puentes de J'Nai, mezzosoprano
Cuando cantó "La fleur que tu m'avais jetée" de "Carmen", Jon Vickers fue el primer tenor que me atraía por completo en el momento y lo que se sentía como su corazón. Su interpretación está llena de ternura conmovedora y un poder honesto, moldeado por una miríada de colores vocales y dinámicas. A medida que se eleva a la perfección a la parte superior de su registro, llega desde la profundidad tonificada de su alma hasta las alturas giratorias de la honestidad pura. Nos lleva en un viaje emocional donde, sin tener que mirar una traducción del texto, entendemos completamente su pasión.
Jon Vickers
"Carmen" de Bizet (Deutsche Grammphon)
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Simone Young, directora
Este aria de "Aida" es una de las más queridas y temidas (por los cantantes, al menos) en la ópera. Tiene una introducción heroica, luego cambia rápidamente en la emoción; Frases líricas nos convencen de la sinceridad de la devoción del soldado Radamès a su amor, Aida. Sólo escucha la nota final aquí: un piso B alto, pianissimo cantado. La mayoría de los tenores lo gritan, pero hacerlo suavemente, como verdi quería, es muy difícil. El gran Johan Botha, que murió en 2016, fue uno de los pocos tenores que pudo sacarlo con tanta belleza y convicción.
Johan Botha
"Aida" de Verdi (Arte Nova)
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