Todos a una, ni valor estratégico ni sandeces, aquí el que la coge es para él!
Yo también me apunto
Aunque Repsol subió el viernes un 2,28%, y los títulos se situaron en 13,91 euros, la cotización está muy lejos de la horquilla de 27-28 euros que se maneja para la venta a Lukoil. Todos los accionistas quieren subirse al tren ruso.
Todos quieren subirse al tren, pero no hay sitio para todos. La legislación actual, además, no obliga a poner más vagones. Ese es el resumen de la situación de los accionistas Repsol ante la operación de compra que plantea Lukoil. El grupo ruso quiere un 29,9% del capital de la petrolera española (límite que le permite la legislación sin necesidad de tener que lanzar una oferta pública de adquisición).
De ese 29,9%, un 20% será el que tiene Sacyr, y otro 9,9%, previsiblemente, procederá de las acciones que tienen La Caixa y Caixa Catalunya. El precio de la transaccion que se baraja se sitúa en una horquilla de entre 27 y 28 euros, todo un caramelo teniendo en cuenta la cotización actual. Aunque Repsol subió el viernes un 2,28% sus acciones siguen ancladas en zona de mínimos anuales (el viernes cerraron a 13,91 euros). ¿Donde quedan los minoritarios? O incluso otros accionistas que teniendo una participación importante se quedan sin billete del tren ruso.
Poco pueden hacer. La aseguradora Mutua Madrileña, que posee un 2% de Repsol, vendería su parte de capital en la petrolera si lo que finalmente se baraja para la transacción de Lukoil. Otros grandes accionistas posiblemente también (AXA tiene el 4,2%, y Barclays el 3,2%, por ejemplo), sobre todo en un momento de falta de liquidez en los mercados, y de gran volatilidad bursátil, que hace presagiar una larga travesía del desierto hasta que Repsol vuelva a estar en sus mejores niveles (alcanzó 29,25 euros de máximo histórico el 6 de julio de 2007).
Lo único que les queda a los que se quedan sin billete de viaje es el derecho a gritar desde la estación, con la esperanza de que alguien les escuche. El secretario de la Asociación Española de Accionistas Minoritarios de Empresas Cotizadas (Aemec), Javier Cremades, abogó el viernes por que el Gobierno anime a la empresa rusa Lukoil a lanzar una opa sobre Repsol.
“Lo importante es que todos tengan la opción de beneficiarse de la prima de control”, dijo, aunque reconoció que, técnicamente, es irreprochable no lanzar una opa sobre una compañía si no se supera el 29,9%. Quizás el caso de Lukoil y Repsol de paso a la reapertura del debate sobre la reformulación de la ley de opas. O incluso del funcionamiento de la CNMV. El viernes, Criteria, el holding de La Caixa, subió un 8,49%, hasta 2,52 euros. Sacyr subió un 15,35%, hasta 8,49 euros. Mientras a Criteria, y a Repsol, se le suspendió al negociación durante casi dos horas, a Sacyr se le dejó volar.
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