Menéndez dejará la presidencia de Liberbank en 2014 y continuará como primer ejecutivo
El juez aclara que la anulación del pacto laboral con CC OO y UGT no invalida el ajuste unilateral decidido por el banco
30.11.2013 | 04:27
Oviedo, Javier CUARTAS Manuel Menéndez, presidente y consejero delegado de Liberbank, deberá optar por uno de ambos cargos, al igual que el resto de los primeros directivos de la banca española que compatibilicen ambas responsabilidades, según un anteproyecto de ley que ayer anunció el ministro de Economía, Luis de Guindos, y que el Gobierno pretende que entre en vigor en marzo.
Con los antecedentes que se conocen en la corta vida del Liberbank (resultante de la fusión de los negocios financieros de Cajastur, Caja Extremadura y Caja Cantabria), Menéndez abandonará la presidencia del consejo de administración de Liberbank el año próximo y continuará como consejero delegado (primer ejecutivo) del banco.
Este es el criterio que Menéndez adoptó en las dos fusiones malogradas de Cajastur. En el llamado Banco Base (la frustrada fusión de los actuales socios de Liberbank con la caja alicantina CAM) la presidencia era para Modesto Crespo, presidente de CAM, y el puesto de máximo ejecutivo para Menéndez. Y en la también abortada integración de Liberbank con Ibercaja y Caja 3, la presidencia iba a ser para Amado Franco, presidente de Ibercaja, y Menéndez asumía el puesto de consejero delegado. El pasado 15 de febrero, Manuel Menéndez dimitió como presidente del Banco CCM (filial en el 75% de Liberbank) y el puesto fue ocupado por el directivo asturiano Orlando Sánchez Jardón.
Esta norma se suma a la ley de cajas de ahorros y fundaciones bancarias (ahora en trámite parlamentario) que obligará a Menéndez a optar, en julio de 2016, entre el consejo del banco y el patronato de la futura fundación bancaria Cajastur. Menéndez continuará en el banco.
El fallo de la Audiencia Nacional que tumbó el pacto de ajuste laboral pactado por Liberbank, CC OO y UGT el 25 de junio no ha invalidado el ERTE que el banco había empezado a aplicar de modo unilateral una semana antes tras no haber llegado a acuerdo alguno con los sindicatos y que incorporaba medidas más severas que el pacto anulado.
El tribunal desestima una petición del sindicato CSI y, en un auto aclaratorio, dispone que «la reposición material en las condiciones anteriores compete únicamente a la empresa» y que en la sentencia no cabe -afirma en referencia al ERTE unilateral- «pronunciamiento alguno sobre las medidas precedentes» al pacto anulado. Liberbank, que recurrió la anulación del pacto con CC OO y UGT, ha ofrecido a los sindicatos negociar un nuevo ERTE, si bien ahora se sabe que el anterior, aunque recurrido por varios sindicatos, aún puede ser aplicado.
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