El Ahorro 5 busca su sitio en 2016
Cristina Casillas
Estos productos están atrayendo el ahorro más conservador al ofrecer una rentabilidad por encima de los depósitos, a lo que se suma la exención fiscal.
El ahorro cinco está ganando presencia como alternativa a depósitos y cuentas para el ahorro más conservador. Según los datos de ICEA, a cierre de marzo, estos productos, nacidos en la última reforma fiscal recabaron 1.234 millones de euros. A cierre del trimestre, 432.364 personas habían contratado una de estas pólizas, lo que es indicativo de su creciente protagonismo.
No hay banco o entidad aseguradora que no cuente con uno y es que en la mayoría de los casos ofrecen rentabilidades atractivas si se tiene en cuenta que la rentabilidad media de las imposiciones a plazo fijo, según datos del Banco de España, ronda el 0,30 por ciento. Aunque como recuerda Mar Barrero, analista de Profim, son productos exclusivamente para pequeños ahorradores, ya que podrían ser una alternativa a los depósitos «si no fuera por las limitaciones que le restan mucho atractivo, como es una inversión inmovilizada durante cinco años, que podría hacernos perder oportunidades de inversión, y un saldo también limitado a 5.000 euros».
De igual opinión es Víctor Alvargonzález, director de estrategias de Tressis SV. El experto aconseja estudiar el producto, en qué invierte, y no fijarse en la carcasa que conlleva, puesto «que hay alternativas como la renta fija europea y la renta corporativa europea de alta calidad, que, además, están de enhorabuena con las compras que aplicará el Banco Central Europeo (BCE)»; mientras que Estefanía González, portavoz de finanzas personales de Kelisto, descarta que sea una alternativa por la flexibilidad y la falta de liquidez, aunque reconoce «que su remuneración puede ser mayor que la que ofrece un depósito con tipos de entre el 1 por ciento y el 2 por ciento.
La principal ventaja, explica Mar Barrero, es la exención de impuestos, «aunque queda diluida al tratarse de beneficios pequeños». Por su parte, Víctor Alvargonzález recomienda siempre diversificar en otros productos como pueden ser los fondos de inversión y los planes de pensiones y reconoce que el objetivo de ahorrar para la jubilación va en la línea correcta. Finalmente González lanza una advertencia a quienes contraten estos productos y es que si se rescatan antes de tiempo, además de la penalización en rentabilidad puede conllevar perder los beneficios fiscales.
Ofertas
La Mutualidad de la Abogacía pisa fuerte en este terreno. En 2015 acabó con una rentabilidad media del 4,25 por ciento, que se ha aplicado para este primer año, aunque como señalan desde la compañía este tipo puede sufrir cambios. Más modestas son las remuneraciones de los principales bancos españoles, que buscan captar pasivo a través de estos productos. Así, el SIALP de Banco Popular, una de las entidades que más fuerte han apostado por este producto, es del 0,90 por ciento anual, mientras que la bruta se eleva hasta el 1,90 por ciento. El banco cuenta con 64.800 pólizas en vigor con un saldo acumulado de casi 67 millones de euros. Santander también cuenta entre su portfolio con un SIALP, aunque su rentabilidad fue recortada hasta el 0,50 por ciento hasta el 31 de diciembre de este año.
El sector asegurador mira de cerca a estos productos para captar clientes. Santalucía cuenta con uno que ofrece un interés técnico del 1,50 por ciento anual, mientras que Caser ofrece uno con un interés del 1,05 por ciento y VidaCaixa garantiza un interés del 0,20 por ciento los primeros doce meses. En Mapfre, la rentabilidad varía dependiendo si se contrata prima única o prima periódica, pero abarca una horquilla de entre el 0,50 por ciento hasta el 0,90 por ciento.
Los expertos recomiendan estos productos a los pequeños ahorradores, con un perfil conservador, ya que en el semáforo de riesgo gozan de una clasificación de 1 sobre 6.
No hay banco o entidad aseguradora que no cuente con uno y es que en la mayoría de los casos ofrecen rentabilidades atractivas si se tiene en cuenta que la rentabilidad media de las imposiciones a plazo fijo, según datos del Banco de España, ronda el 0,30 por ciento. Aunque como recuerda Mar Barrero, analista de Profim, son productos exclusivamente para pequeños ahorradores, ya que podrían ser una alternativa a los depósitos «si no fuera por las limitaciones que le restan mucho atractivo, como es una inversión inmovilizada durante cinco años, que podría hacernos perder oportunidades de inversión, y un saldo también limitado a 5.000 euros».
De igual opinión es Víctor Alvargonzález, director de estrategias de Tressis SV. El experto aconseja estudiar el producto, en qué invierte, y no fijarse en la carcasa que conlleva, puesto «que hay alternativas como la renta fija europea y la renta corporativa europea de alta calidad, que, además, están de enhorabuena con las compras que aplicará el Banco Central Europeo (BCE)»; mientras que Estefanía González, portavoz de finanzas personales de Kelisto, descarta que sea una alternativa por la flexibilidad y la falta de liquidez, aunque reconoce «que su remuneración puede ser mayor que la que ofrece un depósito con tipos de entre el 1 por ciento y el 2 por ciento.
La principal ventaja, explica Mar Barrero, es la exención de impuestos, «aunque queda diluida al tratarse de beneficios pequeños». Por su parte, Víctor Alvargonzález recomienda siempre diversificar en otros productos como pueden ser los fondos de inversión y los planes de pensiones y reconoce que el objetivo de ahorrar para la jubilación va en la línea correcta. Finalmente González lanza una advertencia a quienes contraten estos productos y es que si se rescatan antes de tiempo, además de la penalización en rentabilidad puede conllevar perder los beneficios fiscales.
Ofertas
La Mutualidad de la Abogacía pisa fuerte en este terreno. En 2015 acabó con una rentabilidad media del 4,25 por ciento, que se ha aplicado para este primer año, aunque como señalan desde la compañía este tipo puede sufrir cambios. Más modestas son las remuneraciones de los principales bancos españoles, que buscan captar pasivo a través de estos productos. Así, el SIALP de Banco Popular, una de las entidades que más fuerte han apostado por este producto, es del 0,90 por ciento anual, mientras que la bruta se eleva hasta el 1,90 por ciento. El banco cuenta con 64.800 pólizas en vigor con un saldo acumulado de casi 67 millones de euros. Santander también cuenta entre su portfolio con un SIALP, aunque su rentabilidad fue recortada hasta el 0,50 por ciento hasta el 31 de diciembre de este año.
El sector asegurador mira de cerca a estos productos para captar clientes. Santalucía cuenta con uno que ofrece un interés técnico del 1,50 por ciento anual, mientras que Caser ofrece uno con un interés del 1,05 por ciento y VidaCaixa garantiza un interés del 0,20 por ciento los primeros doce meses. En Mapfre, la rentabilidad varía dependiendo si se contrata prima única o prima periódica, pero abarca una horquilla de entre el 0,50 por ciento hasta el 0,90 por ciento.
Los expertos recomiendan estos productos a los pequeños ahorradores, con un perfil conservador, ya que en el semáforo de riesgo gozan de una clasificación de 1 sobre 6.
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