viernes, 26 de febrero de 2010

Los Gabachos lo tienen clarísimo.

Nosotros y en esto, en 2ª B.

Orgullosa de su modelo de gestión cultural

"La Cultura en Francia es un dogma que funciona"

MADRID, 26 Feb. (EUROPA PRESS)

Antonin Baudry, consejero de Cooperación y Acción Cultural de la Embajada de Francia en España, afirmó este viernes que el Gobierno francés defiende su cultura y a sus artistas porque el Estado tiene una "concepción casi religiosa" de la cultura. "La Cultura en Francia es un dogma que funciona", dijo, orgulloso del denominado 'modelo francés' de gestión cultural, que se ha puesto como ejemplo, en muchas ocasiones, por el sector de la Cultura en España.

Precisamente, la "prioridad" y el "discurso" de la ministra de Cultura, Ángeles González-Sinde, en cuanto al "acceso de todos" a la cultura, ante la era de la digitalización, coincide con el de su homólogo francés, Frédéric Miterrand, que se fundamenta en un modelo de gestión cultural, que se asienta en cuatro principios: "la conservación de los productos culturales, la protección de los derechos de autor, la democratización y el acceso de la cultura a todos, además del apoyo económico a los artistas".

Así lo explicó Baudry, quien remarcó que la prioridad del Gobierno francés es aplicar estos cuatro objetivos al proceso de digitalización ante la "crisis enorme contra un enemigo invisible" al que se enfrenta, en su caso, el Ministerio de Cultura y Comunicación francés.

Baudry, que participó en la presentación en Madrid de los 'Encuentros profesionales. Sistemas públicos de gestión cultural. Modelo de gestión de Francia', en la que también intervino Jean-Luc Blouët, agregado cultural de la Embajada de Francia, recordó que el Gobierno francés defiende su cultura y a los artistas porque el Estado tiene una "concepción casi religiosa" de la cultura. "La cultura en Francia es un dogma que funciona", apuntó.

LA IDENTIDAD DE UN PAÍS

"Estamos en una lucha por la crisis", aseveró Baudry, recordando que el 'modelo francés' apuesta por apoyar a los creadores y a los intelectuales. "Sin los intelectuales y los artistas un país está desnudo, porque tienen la identidad del país", subrayó, justificando la acción proteccionista del Estado francés para con sus productos culturales.

Baudry enumeró los principios en los que se basa este modelo de protección de la Cultura en el país vecino, y que han ejercido los ministros de Cultura "de todos los Gobiernos". Así, echó la vista atrás y recordó cómo esta lucha por la defensa del arte se remonta a la Revolución Francesa. Como explicó, gracias a un Decreto de 1773,se acordó que el papel del Estado es el de "conservar" la cultura.

La "protección de los autores" es otro mecanismo del Estado francés desde el siglo XIX, cuando se consiguió un Estatuto para los artistas y los autores, y que se mantiene y aplica en la actualidad, ante la "polémica" de las descargas en Internet. "El Estado debe proteger a los autores y a los artistas contra las descargas ilegales", afirmó.

'SISTEMA DE INTERMITENCIAS'

Que la cultura debe estar accesible para todos, es otro principio en Francia desde los años 30. "La cultura unifica a un pueblo", dijo Baudry, quien se refirió a un cuarto aspecto clave, que se debatió en 1936 y cuyo acuerdo renovaron sindicatos de creadores y sindicatos de trabajadores en el año 2000: el "sistema de intermitencias", que permite a los artistas intermitentes cobrar un seguro cuando están en el paro.

Estas 'intermitencias' permiten que "cada ciudadano pueda desarrollarse como artista" y cobrar una cantidad de dinero, si se ha trabajado en un año más de 560 horas. Es un "apoyo económico" para aquellos artistas que no tienen todavía un público pero quieren intentar adentrarse en el mundo del arte.

LA IMPORTANCIA DE LAS SUBVENCIONES

En Francia se dedica a la acción cultural un total de 3.000 millones de euros. El gasto total en Cultura alcanza los 9.000 millones. Y en este sistema, "las subvenciones del Estado son lo más importante", según aseveró Baudry, quien agregó que también hay inversión privada y mecenazgo. Pese a depender de las ayudas del Estado, éste "garantiza que el arte no sea político".

La "excepción cultural" es otro pilar del Estado francés en materia cultural, visto como "la cultura como excepción". "En Francia hay una fascinación de los artistas hacia el poder del Estado", prosiguió, recordando que, que el Estado reconozca la labor de artistas e intelectuales, es "prioritario".

Además de las ayudas del Estado, se da "una verdadera solidaridad interprofesional", como detalló Blouët, ya que, en el caso del sistema de intermitencias, "cada trabajador paga de su sueldo todos los meses una parte que va a este seguro".

SOCIEDADES DE GESTIÓN

También es "muy importante" en Francia, cuyo Ministerio de Cultura cuenta con tres grandes direcciones culturales (Patrimonio, Creación e Industrias Culturales), el papel de las sociedades de gestión de derechos de autor.

En el caso concreto del cine, además de las subvenciones que el Centro Nacional del Cine concede a los creadores a través de un Fondo, están las ayudas directas como el canon que se cobra en las entradas de cine y que "va directamente al sector".

No hay comentarios: