Al menos ocho empresas vinculadas con Asturias aparecen en los papeles de Panamá
Compañías y accionistas aportaron una dirección postal al bufete Mossack Fonseca como lugar de contacto en Oviedo, Gijón, Lugones, Salinas, Ribadesella y Posada de Llanes
Miércoles 11 de mayo de 2016
Los papeles de Panamá vuelven a salpicar a empresas y particulares vinculados con Asturias. El Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ) ha liberado 200.000 fichas de sociedades off shore relacionadas con el despacho Mossack Fonseca y al menos ocho de ellas están relacionadas con el Principado. Se trata de compañías y accionistas que han facilitado domicilios de la región como lugar de contacto en Oviedo, Gijón, Lugones, Salinas, Ribadesella, Piloña, Castrillón y Posada de Llanes.
La primera de ellas es la compañía Indorama Investments Pte. Ltd., accionista de Indorama Investments Limited, con jurisdicción en Bahamas. Esta sociedad aporta al despacho panameño una dirección de la calle Bimenes, en Oviedo. Aparece también Kundan Ratilal Pat El, con domicilio en la calle León y Escosura de Infiesto, Piloña. Carlos Termistocles Cortez es uno de los accionistas de la sociedad Neptune Commercial Enterprises S.A y apunta como domicilio la calle Gloria Fuertes de Gijón.
Además, sale reflejado en esos documentos A2 Telecommunications Int'L Holding, en la calle la Estación de Posada de Llanes. Junto a ellos, aparece Jon Gobiet & Dolores B Villareal, con domicilio en la calle Monte Naranco de Lugones, Siero. Otro de los accionistas mencionado es Jorge Alfonso Zarubin, vinculado a Fillow Group Limited, con dirección en la Avenida de la Constitución de Gijón. Gary Dale Cearley refleja su domicilio en la calle Luis Hauzeur, en Salinas, Castrillón. Por último, la sociedad Cramer-Salamian tiene su dirección a efectos de comunicación en la calle Manuel Fernández de Ribadesella.
El Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ) recuerda que aparecer en el listado no implica la comisión de ningún acto delictivo. Aunque no suponga ninguna acción ilegal, la mera mención en esos documentos genera ciertas sospechas y todas las personas públicas a las que se les ha relacionado con los papeles de Panamá han salido a defenderse.
Asturianos salpicados por el escándalo
Hasta la última liberación de documentación por parte del bufete de abogados, los dos asturianos salpicados por el escándalo de los papeles de Panamá eran el empresario Lalo Azcona y Rodrigo Rato. El presidente del Consejo Social de la Universidad participó en una sociedad panameña vinculada a una cuenta en Suiza, según publicó La Sexta, desde 1982 hasta 2001. Durante ese periodo, Azcona fue apoderado de una empresa offshore con una cuenta asociada en Suiza en el banco Crédit Suisse. El que fuera presentador de los informativos de TVE durante la transición era a su vez socio de Rafael Naranjo Anegón, un empresario que está imputado en la trama corrupta Gürtel y al que se le investiga por el origen de 12 millones de euros en una de sus cuentas en Suiza y Luxemburgo.
Por su parte, Rodrigo Rato utilizó el bufete Mossack Fonseca para cerrar dos empresas opacas con 3,6 millones. Con esta maniobra, el exministro asturiano pretendía evitar que las empresas offshore fueran localizadas. La información, publicada por el diario El Confidencial, señala que el bufete gibraltareño Finsbury Trust & Corporate Services Limited, que gestionaba las sociedades de Rato en el extranjero, contrató a Mossack Fonseca para liquidar Westcastle Corporation y Red Rose Financial Enterprises una vez que fueron vaciadas de dinero.
La primera de ellas es la compañía Indorama Investments Pte. Ltd., accionista de Indorama Investments Limited, con jurisdicción en Bahamas. Esta sociedad aporta al despacho panameño una dirección de la calle Bimenes, en Oviedo. Aparece también Kundan Ratilal Pat El, con domicilio en la calle León y Escosura de Infiesto, Piloña. Carlos Termistocles Cortez es uno de los accionistas de la sociedad Neptune Commercial Enterprises S.A y apunta como domicilio la calle Gloria Fuertes de Gijón.
Además, sale reflejado en esos documentos A2 Telecommunications Int'L Holding, en la calle la Estación de Posada de Llanes. Junto a ellos, aparece Jon Gobiet & Dolores B Villareal, con domicilio en la calle Monte Naranco de Lugones, Siero. Otro de los accionistas mencionado es Jorge Alfonso Zarubin, vinculado a Fillow Group Limited, con dirección en la Avenida de la Constitución de Gijón. Gary Dale Cearley refleja su domicilio en la calle Luis Hauzeur, en Salinas, Castrillón. Por último, la sociedad Cramer-Salamian tiene su dirección a efectos de comunicación en la calle Manuel Fernández de Ribadesella.
El Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ) recuerda que aparecer en el listado no implica la comisión de ningún acto delictivo. Aunque no suponga ninguna acción ilegal, la mera mención en esos documentos genera ciertas sospechas y todas las personas públicas a las que se les ha relacionado con los papeles de Panamá han salido a defenderse.
Asturianos salpicados por el escándalo
Hasta la última liberación de documentación por parte del bufete de abogados, los dos asturianos salpicados por el escándalo de los papeles de Panamá eran el empresario Lalo Azcona y Rodrigo Rato. El presidente del Consejo Social de la Universidad participó en una sociedad panameña vinculada a una cuenta en Suiza, según publicó La Sexta, desde 1982 hasta 2001. Durante ese periodo, Azcona fue apoderado de una empresa offshore con una cuenta asociada en Suiza en el banco Crédit Suisse. El que fuera presentador de los informativos de TVE durante la transición era a su vez socio de Rafael Naranjo Anegón, un empresario que está imputado en la trama corrupta Gürtel y al que se le investiga por el origen de 12 millones de euros en una de sus cuentas en Suiza y Luxemburgo.
Por su parte, Rodrigo Rato utilizó el bufete Mossack Fonseca para cerrar dos empresas opacas con 3,6 millones. Con esta maniobra, el exministro asturiano pretendía evitar que las empresas offshore fueran localizadas. La información, publicada por el diario El Confidencial, señala que el bufete gibraltareño Finsbury Trust & Corporate Services Limited, que gestionaba las sociedades de Rato en el extranjero, contrató a Mossack Fonseca para liquidar Westcastle Corporation y Red Rose Financial Enterprises una vez que fueron vaciadas de dinero.
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