Oviedo baraja el cierre parcial del Auditorio
El ayuntamiento detecta importantes deficiencias en caso de incendios y estudia responsabilidades judiciales. Los Reyes tienen previsto acudir a un concerto el día 19 de octubre
El alcalde de Oviedo, Wenceslao López, ha dictado una resolución en la que ordena la elaboración de un plan de protección contra incendios para el Auditorio Príncipe Felipe, ante las «importantes deficiencias» detectadas, y establece la necesidad de proceder al cierre parcial de las partes inseguras del inmueble. El asunto, que está en manos de los técnicos, según ha reconocido el regidor, podría afectar a la próxima actividad del Auditorio, con recitales ya programados a partir de la primera semana de octubre. Hay que recordar que los Reyes asistirán a un concierto el próximo 19 de octubre, un día antes de la entrega de los premios Princesa.
La resolución de la alcaldía, que también plantea la exigencia de responsabilidades a los responsables del proyecto del edificio, se basa en dos informes técnicos que han permitido concluir que es inseguro en caso de incendio y que su uso resulta incompatible con la necesaria protección de los ocupantes si se produce un siniestro.
Por ello, el alcalde expone que «no resulta posible continuar con dicho uso sin que la seguridad en caso de incendio de los usuarios se vea gravemente afectada».
Los dos informes técnicos han detectado «importantes deficiencias» en la protección contra incendios en las puertas, escaleras, accesos o en la propia compartimentación del inmueble.
Además, se ha constatado que la estructura metálica que soporta la cubierta inclinada de chapa «no alcanza la resistencia al fuego requerida», así como «la insuficiencia de la resistencia al fuego de los elementos delimitadores de sectores y locales de riesgo especial», como paredes y forjados de suelo y techo.
Por todo ello, el alcalde encarga «urgentemente» un informe técnico sobre las condiciones de protección contra incendios del auditorio y un «plan de usos máximos» del inmueble «con el objetivo de determinar la posibilidad de utilización parcial de las instalaciones en unas condiciones aceptables de seguridad».
Dicho plan de usos máximos debe establecer el número máximo de usuarios por dependencia y planta, y los posibles usos «imposibles» o «incompatibles».
López también ordena encargar con urgencia el proyecto de las obras a realizar para garantizar la seguridad del auditorio y «planificar en su ejecución la máxima compatibilidad con el uso parcial», procediendo a «la clausura temporal de las partes del edificio no seguras».
De forma paralela, el ayuntamiento elaborará un plan de disponibilidad de espacios alternativos en Palacio de Exposiciones y Congresos o los teatros Filarmónica o Campoamor, entre otros.
Ante la «gravedad de las deficiencias» y sus «posibles consecuencias», el alcalde ordena el inicio de un expediente de exigencia de responsabilidades «a los responsables del proyecto del auditorio, de su construcción, de los incumplimientos realizados en la ejecución del proyecto y de su apertura».
La resolución de la alcaldía, que también plantea la exigencia de responsabilidades a los responsables del proyecto del edificio, se basa en dos informes técnicos que han permitido concluir que es inseguro en caso de incendio y que su uso resulta incompatible con la necesaria protección de los ocupantes si se produce un siniestro.
Por ello, el alcalde expone que «no resulta posible continuar con dicho uso sin que la seguridad en caso de incendio de los usuarios se vea gravemente afectada».
Los dos informes técnicos han detectado «importantes deficiencias» en la protección contra incendios en las puertas, escaleras, accesos o en la propia compartimentación del inmueble.
Además, se ha constatado que la estructura metálica que soporta la cubierta inclinada de chapa «no alcanza la resistencia al fuego requerida», así como «la insuficiencia de la resistencia al fuego de los elementos delimitadores de sectores y locales de riesgo especial», como paredes y forjados de suelo y techo.
Por todo ello, el alcalde encarga «urgentemente» un informe técnico sobre las condiciones de protección contra incendios del auditorio y un «plan de usos máximos» del inmueble «con el objetivo de determinar la posibilidad de utilización parcial de las instalaciones en unas condiciones aceptables de seguridad».
Dicho plan de usos máximos debe establecer el número máximo de usuarios por dependencia y planta, y los posibles usos «imposibles» o «incompatibles».
López también ordena encargar con urgencia el proyecto de las obras a realizar para garantizar la seguridad del auditorio y «planificar en su ejecución la máxima compatibilidad con el uso parcial», procediendo a «la clausura temporal de las partes del edificio no seguras».
De forma paralela, el ayuntamiento elaborará un plan de disponibilidad de espacios alternativos en Palacio de Exposiciones y Congresos o los teatros Filarmónica o Campoamor, entre otros.
Ante la «gravedad de las deficiencias» y sus «posibles consecuencias», el alcalde ordena el inicio de un expediente de exigencia de responsabilidades «a los responsables del proyecto del auditorio, de su construcción, de los incumplimientos realizados en la ejecución del proyecto y de su apertura».
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