Clarísimo,el Bonus y la trampona, todo junto.
González-Páramo advierte: el contribuyente puede acabar pagando un bonus mal diseñado
Publicado el 08-09-09 , por D. Badía Fráncfort
Los líderes económicos del G-20, que se reunieron este fin de semana en Londres, se mostraron de acuerdo en crear una estructura global que limite el pago de los bonus a los banqueros, aunque no anunciaron medidas concretas.
José Manuel González-Páramo, también comparte esta opinión, aunque reconoce que el modus operandi "está muy abierto todavía". "Hay formas muy diversas, por ejemplo, que los supervisores puedan exigir cargas de capital adicionales a aquellas firmas que tengan una estructura de bonus más liberal".
El miembro del comité ejecutivo del BCE cree que "cuando un bonus se diseña de una manera muy cortoplacista, o incluso sin relación al beneficio, se podría incentivar al empleado a que realice muchas operaciones y a asumir unos riesgos que, en algunos casos, no son deseables ni desde el punto de vista del banco ni de la sociedad". Páramo recuerda que, incluso, hay entidades que obteniendo dinero público muy abundante "han concedido bonus cuantiosísimos a directivos, que se basan en un beneficio que en realidad no existe". "Un bonus mal diseñado tiene un impacto social. La asunción de riesgos podría recaer en última instancia sobre las cuentas públicas y sobre el bolsillo de los cuidadanos".
En lo que respecta a la batería de medidas que ha tomado la institución para dotar de liquidez a la banca, Páramo descarta que se vaya a presionar a la banca para que reactive el crédito, aunque no se muestra muy pesimista sobre su evolución. "El crédito está creciendo a ritmos muy reducidos en el conjunto del año, pero las medidas adoptadas han impedido que se desplome. Es más, vemos que el crédito a plazos de menos de un año se está reduciendo, pero, en cambio, a plazos superiores está creciendo a cifras netamente positivas".
Achaca en parte el parón del crédito a una caída de la demanda. "El crédito bancario responde con un cierto retraso a la mejora de los datos de crecimiento económico y de actividad, lo cual tiene su lógica, porque sólo hasta que las empresas empiezan a ver una mejora en sus cuentas de resultados se deciden a pedir créditos de nuevo". "En la medida en la que la demanda crediticia mejore, ésta encontrará una respuesta".
Reactivación del crédito
No se atreve a dar una fecha concreta. "La expectativa es que, aunque en los próximos meses el crédito seguirá débil en el conjunto del área euro, éste debe repuntar después de que se asiente el crecimiento". Y lanza un aviso a la banca: "Si las entidades olvidan que su función social es la de proporcionar crédito, tras terminar un proceso de reconstitución de los balances, estarán actuando en contra de su propio modelo de negocio", añade.
"En cuanto se reactive la demanda crediticia, ésta encontrará una respuesta"
La facilidad de depósito, una especie de cuenta remunerada que el BCE pone a disposición de la banca para que guarde su excedente de liquidez a un día, muestra la desconfianza que permanece en el sistema. Pero Páramo quiso dejar claro que "las entidades que captan liquidez en nuestras subastas no son las mismas que las que dejan su dinero en la facilidad de depósito".
Por lo tanto, se trata de "entidades en su mayoría sanas, que no tienen problemas de liquidez, pero prefieren, por el riesgo percibido de contrapartida, depositarlo al 0,25% en el BCE que no obtener 33 ó 35 puntos básicos por prestarlo a otros bancos". Páramo aclara que "no es nuestro objetivo primordial que esa facilidad de depósito baje mucho". "Me puedo imaginar una situación en la que ésta se mantenga alta y, no obstante, el crédito vuelva a fluir",
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