jueves, 4 de junio de 2015

Parece unánime...

La izquierda social, cultural y universitaria, a favor del pacto en el Principado y los ayuntamientos

Un grupo de 27 sindicalistas, profesores y autores consultado por ASTURIAS24 se decanta mayoritariamente por un acuerdo PSOE-Podemos-IU para gobernar Asturias, Oviedo y Gijón

ASTURIAS 24

@ASTURIAS24ES
JUEVES 04 DE JUNIO DE 2015
Las elecciones autonómicas y municipales del 24 de mayo han dejado un mapa político plural y diverso en Asturias en el que no siempre va a resultar fácil reunir mayorías de gobierno. Lo indiscutible es que los votantes giraron a la izquierda y han entregado a PSOE, Podemos e IU más poder e influencia del que las opciones de progreso –entonces solo PSOE e IU— tenían en las instituciones que han agotado su mandato. Las diferencias entre las tres formaciones, sin embargo, pueden impedir que sus representantes lleguen a posiciones de gestión y permitir a la derecha seguir en el poder sin mayorías absolutas. ¿Son deseables los acuerdos tripartitos? ASTURIAS24 ha trasladado la pregunta a representantes de la izquierda social y cultural, que están mayoritariamente por el sí. Estas son sus respuestas.

Gonzalo Olmos, abogado
Al menos deben intentarlo, seria y sinceramente.
En la Junta General parece claro que sólo el PSOE está en condiciones de obtener el apoyo para que su candidato sea Presidente del Principado de Asturias y, aunque nuestro singular sistema de elección lo permita (lo que no sucede en otras Comunidades Autónomas), otras fuerzas deberían ser evitar la representación teatral de su alternativa. El PSOE debería buscar apoyos razonablemente estables para toda la Legislatura, pactando lo que se pueda pactar -al menos un programa legislativo y de Gobierno- con IU y Podemos. Como esto no depende sólo de uno, si Podemos prosigue con la dureza verbal que acostumbra (que ciertamente debería revisar) contra Javier Fernandez, veremos otra Legislatura de geometría variable porque el PSOE se verá abocado a buscar apoyos en otros caladeros parlamentarios.
Pese a que Agustín Iglesias Caunedo ha demostrado, en beneficio de todos, habilidades camaleónicas y el ambiente se ha hecho más respirable, en Oviedo la izquierda no debería dejar pasar la posibilidad de gobernar tras 24 años. Eso sí, no basta simplemente desplazar al PP. Tiene que ser algo más sólido que la mera alternancia y que merezca la pena intentar.
En el Ayuntamiento de Gijón permitir que gobierne Foro sería dar carta de naturaleza a la pérdida del modelo de gestión pública de servicios que a día de hoy otros anhelan. No se entendería que no se respaldase a José María Pérez en la elección de Alcalde, que tiene la legitimidad sobre Xixón si puede e IU en el número de concejales obtenido por el PSOE; creo que, además, está demostrando voluntad de llegar a acuerdos.

Melania Álvarez, politóloga
Sí al acuerdo.
Quiero un acuerdo de la izquierda en Asturias porque quiero que sigamos a la cabeza de España en inversión en políticas públicas: sanidad, educación, servicios sociales… Esta posición no es fruto de la casualidad, ha venido propiciada por la voluntad de acuerdo en el ámbito de la izquierda.
Sería un grave error, tanto que unos renegasen de los logros de los gobiernos de la izquierda plural, como que quienes se dicen recién llegados se quitasen la careta y mostrasen que las únicas motivaciones que tienen para llevarse por delante las ganas de cambio pasan por hacer que Javier Fernández y José María Pérez muerdan el polvo.  
Asturias, Gijón y Oviedo son mucho más que PSOE, Podemos o IU. No nos merecemos los efectos de un cortoplacismo vengador con ganas de revancha. La imprescindible negociación haría posible un gran acuerdo para dar respuesta a las prioridades de la gente, esas que algunos parecen haber metido en la única mochila que acompaña el postureo negociador, la mochila del rencor. La imprescindible negociación requiere seriedad, rigor, voluntad y generosidad. No perdamos de vista que dos no pelean si uno no quiere.

Benito Aláez, catedrático de Derecho Constitucional
Considero deseable un pacto de gobierno entre PSOE-Podemos-IU, tanto en la Junta General como en los Ayuntamientos de Oviedo y Gijón por dos grandes razones.
Una primera es que, sobre todo en la Junta General, una investidura con el apoyo de solo 14 diputados -que es el previsible apoyo que tendrían una candidatura en solitario de PSOE o de un binomio Podemos-IU- sería muy débil para sustentar la gobernabilidad durante toda la legislatura, que es a lo que se debería aspirar en pro del bien común.Dejarlo todo a acuerdos puntuales, cuando la legislatura saliente -en la que el PSOE contaba con 17 escaños- no ha sido un dechado de virtudes en lo que respecta a la estabilidad, solo se entendería por un tacticismo electoral de unos y otros (de cara a su estrategia respecto de las elecciones generales defin de año), que solo redundaría en el interés de cada una de las formacioones políticas pero no en el interés general de los asturianos. Los asturianos requieren cada vez más Política con P mayúscula, lo cual requiere negociación, transacción y pacto en beneficio de sus intereses.
Una segunda razón, es que la voluntad popular expresada en las elecciones del 24M es mayoritariamente de izquierdas y contraria a que gobierne el partido popular y la derecha, pero a un tiempo es plural y requiere la transacción entre los postulados del PSOE y de Podemos con la intermediación de IU, puesto que las tres formaciones defienden posturas que, matizado su maximalismo, pueden ser complementarias en lo que se refiere a una profunda regeneración del sistema democrático, la redistribución más equitativa de la riqueza y una inevitable prudencia y responsabilidad en el equilibrio del gasto público.

Eduardo Bayón, abogado y politólogo
A favor. Estamos ante un nuevo tiempo político en España de Gobiernos y Ayuntamientos progresistas entre los que se deben encontrar, tanto el del Principado de Asturias, como los de las ciudades de Oviedo y Gijón, al haber obtenido la izquierda en los tres, mayoría parlamentaria. En Asturias el PSOE podría gobernar en minoría, sin apoyos estables, pero resulta aconsejable un acuerdo parlamentario amplio, que dote de estabilidad al Gobierno, y que le permita aplicar políticas que vayan en beneficio de la gente. No sería razonable tampoco, que tanto en Oviedo, como en Gijón, no se pusiese fin a gobiernos de la derecha, porque en Oviedo, después de 24 años resulta imprescindible un cambio de rumbo, mientras que Gijón, tras cuatro años de parálisis, no se puede permitir seguir otros cuatro igual. Por lo tanto, no sería defendible, que fuerzas que apuestan por impulsos políticos progresistas, fuesen incapaces de llegar a acuerdos demandados por una amplia mayoría social.

Xandru Fernández, profesor de secundaria y escritor
Vería razonable un acuerdo de gobierno entre PODEMOS e IU. Suman tantos diputados como el PSOE y 20.000 votos más. El PSOE podría así demostrar qué le importa más: rescatar a las víctimas de las políticas de austeridad o mantenerse en el poder. Después de la gestión de los últimos tiempos, es lo mínimo que se les puede pedir; no es de sentido común darles un cheque en blanco, en especial después de que, hoy mismo, hayan votado en el parlamento europeo a favor de los tribunales de arbitraje del TTIP.
No veo razonable un acuerdo global que incluya al Principado, Xixón y Uviéu en un mismo lote, aunque solo sea porque PODEMOS no concurrió a las elecciones locales y las agrupaciones de electores que impulsó en estas ciudades querrán decidir de forma autónoma.

María José Capellín, antropóloga y presidenta del Foro de Política Feminista
Pacto de las izquierdas.
La distinción derecha-izquierda sigue siendo para mí totalmente relevante, sobre todo en una etapa como la actual en la que la desigualdad social crece de modo, hasta el momento, imparable. Creo que la mayor parte del electorado que ha votado en estas elecciones parte de la misma premisa.
Votamos para elegir a representantes de nuestros intereses que desarrollen políticas que respondan a nuestros planteamientos.  Tanto  la mayoría del electorado asturiano como del gijonés, han optado por elegir representantes de las izquierdas.
Es una obligación democrática que las personas elegidas para representar y defender los intereses del electorado de izquierdas lleguen a acuerdos, al margen de sus diferencias,  que nos permitan revertir el proceso de creciente desigualdad y precarización social con políticas en las que un reparto más justo y mayor inclusión social sean posibles.

Xabel Vegas, músico
Mi respuesta es sí, aunque con matices. Creo que es necesario que las fuerzas políticas que representan a la sociedad asturiana progresista, que son mayoría, sean capaces de acordar un programa político común de izquierdas, que aborde la situación de los asturianos y las asturianas que lo están pasando peor, que refuerce los servicios públicos y que combata la corrupción con medidas de transparencia y de consulta a los ciudadanos. Eso no quiere decir que tengan que hacer necesariamente gobiernos de coalición. Lo importante son las ideas, no repartirse los sillones. Deben consensuar unas propuestas concretas de izquierdas que se puedan defender tanto desde el gobierno como desde la oposición y que den un giro de 180 grados a la realidad política asturiana que hemos tenido hasta ahora.  

Miguel Ángel Presno, catedrático de Derecho Constitucional
Las elecciones del pasado 24 de mayo han generado ayuntamientos y parlamentos autonómicos muy plurales y parece que esa tendencia se mantendrá cuando se celebren elecciones generales. Esta diversidad es reflejo del pluralismo político que caracteriza a la sociedad española y su expresión en sede representativa es, precisamente, para lo que sirve un sistema electoral que, por otra, no es todo lo proporcional que debiera. 
Así las cosas, el proceso de formación de gobiernos municipales y autonómicos demanda que, en la mayoría de los casos, se pongan de acuerdo dos o más opciones políticas. Estos acuerdos, frecuentes en otros países y no del todo extraños en el nuestro, tendrían que articularse a partir, no del reparto de puestos y cargos, sino de un programa compartido de gobierno, en el que, parece obvio, es más fácil que coincidan formaciones de signo similar. En mi opinión, estos procesos tendrían que llevarse a cabo con la máxima transparencia, aunque no es fácil negociar bajo los focos, y, en su caso, ser luego ratificados por la militancia de las respectivas fuerzas políticas; de esta manera se implicaría a los ciudadanos en una decisión de tanta importancia y los acuerdos resultantes gozarían de más legitimidad. 

Miguel Rodríguez Muñoz, abogado y escritor
Creo que son necesarios acuerdos entre PSOE, Podemos e IU tanto en la Comunidad Autónoma como en Uviéu y Xixón.
Es responsabilidad de las tres fuerzas en conjunto –PSOE, Podemos e IU- y de cada una de ellas en particular conseguir que ni en Uviéu ni en Xixón ni en Asturies gobierne un partido de derechas, solo o acompañado. Tanto en Uviéu como en Xixón se precisa la suma de las tres fuerzas para evitar un gobierno conservador. Lo razonable es que haya unos pactos que en Uviéu otorguen la alcaldía a Ana Taboada, candidata de Somos, la lista más votada, y en Xixón a José Mª Pérez, candidato del PSOE, por idéntico motivo. Aunque formalmente Somos y Xixón Sí Puede constituyen agrupaciones electorales distintas, es innegable que tanto por su nacimiento como por su conformación tienen en común su nexo con Podemos y el hecho de responder al plan ideado por esa formación para concurrir a las elecciones municipales. En consecuencia, parece justo que tanto en Uviéu como en Xixón el criterio manejado para dar la alcaldía sea solidario y no dispar. Forzar alternativas diferentes es jugar con fuego. En la Comunidad Autónoma, hay más margen de maniobra para intentar otras combinaciones, como es el caso de una coalición Podemos-IU, aunque sus posibilidades de éxito son escasas y su virtualidad más ideológica que práctica. En los tres ámbitos parecen necesarios acuerdos de intensidad y alcance distintos, con una gradación diversa en los compromisos. Sería conveniente, en todo caso, que a lo largo del proceso –como diría el ensayista César Rendueles- no nos hagan sufrir mucho a los electores de izquierdas.

Laura González, exeurodiputada y expresidenta de la Junta General
Estoy totalmente a favor del pacto. Lo llevo diciendo meses, primero a la vista de las encuestas y luego del resultado de las elecciones, que no ha sido tan diferente. Son imprescindibles el diálogo y el acuerdo para decidir lo que queremos para Asturias y para sus municipios. No se trata de abordar quién apoya a quién y dónde lo hacemos, sino de buscar las coincidencias entre los partidos de la izquierda, porque tiene que haberlas. Así que vamos a sentarnos y a hablar todos. Lo que Asturias no puede permitirse es cuatro años de inestabilidad. Humildemente, creo que la izquierda, si quiere, sí puede dar esa estabilidad. Desde luego, los votantes no van a comprender que siga gobernando la derecha donde es posible desalojarla.

Ana Isabel Ruiz Gutiérrez, presidenta de la Asociación de Mujeres Separadas y Divorciadas
Estoy a favor. Ya va siendo hora de que la izquierda, en este país, se reuna, pacte y se alíe. Si la ciudadanía votó izquierda, la izquierda debe responder a esta exigencia. En caso contrario se pagará caro en el mes de Noviembre.
Tanto en la Comunidad Autónoma, como en Oviedo y en Gijón, se debe pactar, alcanzar acuerdos, y que se elija como representante del pueblo, en la CCAA y en las alcaldías, al cabeza de lista que más votos haya conseguido.

Araceli Iravedra, profesora universitaria
Sí, estoy a favor.
Porque no creo que la dialéctica entre izquierda y derecha esté superada, por mucho que alguna de estas formaciones así lo sugiera. Más allá de nombres o etiquetas, una parte importante de la sociedad, de la que se nutren precisamente estas tres formaciones políticas, sigue considerando necesario preservar un espacio para  lo público frente a lo privado, para la cooperación frente a la competencia, para la redistribución y la solidaridad frente al reparto de la renta y la riqueza determinado exclusivamente por la herencia o el mercado. El respeto a los votantes y a los principios obliga en consecuencia al entendimiento.

Antón García, escritor
Estoy totalmente a favor de que los partidos y agrupaciones de electores de izquierda se pongan de acuerdo y consigan que la lista más votada logre la alcaldía. Creo interpretar que ese es el sentido del voto de la gente de Asturias que vota a la izquierda, que prefiere pactos antes que gobiernos de la derecha. No veo necesario que se gobierne en coalición, sino con acuerdos puntuales, de investidura y presupuestos principalmente, que marcan las líneas de actuación. Digo lo mismo para la Junta General. Estoy seguro de que los votantes de izquierdas no perdonarían que la falta de ese acuerdo permita formar gobiernos a la derecha donde es minoritaria.

Alejandro Viciosa, sindicalista
Estoy de acuerdo en que se llegue a pactos para la investidura de alcalde/alcaldesa o presidente de la junta y pactos puntuales sobre temas concretos, pero no para conformar gobierno tripartito, tres siempre fueron multitud.

Francisco Carantoña Álvarez, historiador
A pesar de las diferencias que existen entre el PSOE, Podemos e IU, el voto que han recibido es claramente contrario al PP y a la derecha conservadora, incluido Foro. Creo que lo que mejor entenderían los asturianos es un pacto que permitiese gobernar a la fuerza de izquierda más votada, que podría incluir un acuerdo programático de mínimos sobre la lucha contra la corrupción y la política social e incluso, en el caso de la Junta, el compromiso de reformar la ley electoral, aunque no se constituyesen, al menos por ahora, verdaderas coaliciones.
Establecer gobiernos de coalición antes de las elecciones generales es difícil y no beneficiaría a ningún partido, pero resultará más sencillo llegar a acuerdos sobre los presupuestos o para sacar adelante medidas concretas. Lo que sería imposible de explicar para cualquiera de los tres es que, con una mayoría claramente de izquierda, facilitase un gobierno del PP, menos aún que pactase abiertamente con él. Si lo hiciese el PSOE, les estaría regalando a Podemos e IU el argumento de que, efectivamente, forma parte de “la casta”. Si la llegada del PP al poder se debiese al maximalismo de Podemos o de IU, el PSOE podría presentarse fácilmente como la única alternativa fiable a la derecha. No se trata de crear un cordón sanitario o aislar a ningún partido, solo de respetar la voluntad de la mayoría y no olvidar que han pasado demasiadas cosas en estos cuatro años. No se comprendería que quien criticó duramente la gestión del Partido Popular le permitiese hacerse con el gobierno en el Principado o en los concejos, sobre todo cuando es evidente que no ha sabido o no ha querido atajar la corrupción que lo gangrena a él y a las instituciones.

Pablo Rivero, escritor y maestro
En mi caso digo no, es una pena que con PSOE e IU no sea suficiente. Lo de Podemos no me engancha, me ha dolido en ocasiones su postura con el PSOE desde el inicio de la formación.

Cecilia Díaz Méndez, profesora universitaria
Si, estoy a favor. La izquierda debe hacer esfuerzos para entenderse. Por suerte, en Asturias estamos acostumbrados a estas dinamicas de pacto.confio en que salga bien.

Marina Lobo, diseñadora
Sí, estoy a favor.
Ese pacto tendría que ser la consecuencia natural de lo que han manifestado los votantes asturianos. Aunque quizá solo IU estaría realmente interesada en que ese pacto se lleve a término. Creo que PSOE y Podemos, como Bartleby el escribiente, preferirían no hacerlo.

Eduardo Méndez Riestra, gastrónomo y escritor
Por supuesto que sí: por encima de cualquier coyuntura, Asturias acaba de demostrar que sigue siendo una Comunidad que se inclina por la izquierda y, en consecuencia, los partidos que representan esa opción no pueden bajo ningún concepto entregar los diversos gobiernos a cualquier tendencia adversaria. Y lo consecuente es que el partido más votado de la izquierda reciba el respaldo de las restantes fuerzas de izquierda allí donde haga falta el refuerzo. El electorado no entendería nada que no fuera en esa línea.

Avelino Sala, artista
A favor. Lo lógico es que se busquen alianzas para gobernar desde la izquierda y darle un giro social a la región, y un mayor protagonismo de la ideología de izquierdas que el PSOE no ha llevado a cabo, me temo, siempre y cuando haya quórum y dialogo,

Jaime Priede, escritor y profesor
Sí, estoy a favor de ese pacto.
Creo que cada caso debe abordarse de forma diferente. Me parece indispensable en los ayuntamientos de Oviedo y de Gijón para liberar ambas ciudades del largo sueño de las mayorías absolutas y dinamizar una política social y cultural que han brillado en ambas por su ausencia en los últimos tiempos. En cuanto a la Junta General, quizá no sea tan necesario. 

Francisco Fresno, artista
Sí, estoy a favor de un pacto, sinónimo de acuerdo, para sumar todo lo coincidente de los tres partidos como escucha a la ciudadanía que los ha votado, incluyendo el correspondiente pulido ético y de regeneración del hacer político que se supone de izquierdas
Las coincidencias y diferencias sobre las que pactar se supone que ya están en sus programas más que en una lucha por el poder, y que, llegado a un acuerdo, deben gobernar quienes más votos hayan obtenido. Lo contrario, en mayor o menor medida, sería ningunear a los votantes en favor de otros intereses partidistas de la vieja política.

Colectivo Laramascoto (Santi Lara y Bea Coto), artistas
Nosotros estaríamos a favor de ese pacto, pero no a cualquier precio: el PSOE debería girar hacia la izquierda en sus políticas y restaurar su ideología. También creemos que debería existir algún mecanismo revocatorio de control ciudadano para no volver a dar carta blanca a un partido que se supone es de izquierdas, pero realiza políticas de derechas. La aprobación del TTIP con el consentimiento del PP y el PSOE en Europa es un claro ejemplo de ello.

María Valvidares, profesora universitaria
Sí, creo que deben llegar a acuerdos. Si no puede ser de legislatura, sí al menos para formar gobierno, en aquellos casos en que hay una mayoría que tiende a la izquierda, siempre y cuando se respeten algunas cuestiones básicas vinculadas con el cambio tanto en la forma de hacer política como en las propias decisiones de fondo, que creo que es una lectura indiscutible de los resultados electorales.

Mario Bango, periodista
Cuánta más pluralidad, mejor. Aunque parezca que sin una mayoría suficiente Asturias se vuelve ingobernable, lo lógico es pactar cada asunto, que no son tantos los que se debaten en el Parlamento regional. Lo único que espero de los partidos es que no condenen a la región sin presupuestos. El resto es más llevadero.

Ramón D'Andrés, escritor
No estoy a favor de que se haga ese tipo de pactos, pero respeto que se hagan.

Concha Quirós, librera
Creo imprescindible y sano pactos entre las fuerzas de la izquierda. Estoy segura de que abriremos un nuevo camino de diálogo.

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