sábado, 28 de marzo de 2009

Mal momento para divisiones.

El aclarar el panorama-de las Cajas fundamentalmente-debe ser tema económico prioratario, déjense de chrradas y al grano porfa!


El Banco de España se divide ante el diseño del nuevo mapa financiero

Las discrepancias en torno a la intención de CCM precipitó la salida del subgobernador. Frente a frente. A un lado, los partidarios del gobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez; al otro, los del número dos de la institución, José Viñals, y en medio un mapa financiero asedidado por la crisis. ¿Qué estrategia adoptar? ¿Unir tropas frente al enemigo (Fernández Ordóñez) o lanzar un ataque contundente y acabar con los problemas en las entidades (Viñals)?

Aunque la situación pueda parecer caricaturesca, sería una buena imagen para reflejar la tensión que se ha vivido en los últimos meses en los órganos de gobierno del Banco de España en torno a la postura que debería adoptarse para hacer frente a la crisis financiera. Y esa es una de las razones por la que para algunos la salida de Viñals no ha sido una sorpresa, ya que la profunda división había llegado a enfrentar a Viñals y sus partidarios (los ex miembros del equipo de Jaime Caruana) con los afines de Fernández Ordóñez. Una tensión que habría llevado incluso a reducir el número de inspecciones financieras y la intensidad de las mismas por parte de la institución, aunque este extremo no pudo ser confirmado.

La situación comenzó a cocinarse con el estallido de la crisis financiera. Mientras el subgobernador del Banco de España, José Viñals, comenzó a elaborar un plan de actuación de intervenciones financieras para sanear el sector, el camino elegido por el gobernador de la institución, Miguel Angel Fernández Ordóñez, era diferente.

"Ante una crisis del calado que se avecinaba, Viñals era partidario de tomar decisiones drásticas y contundentes, mientras que Fernández Ordóñez siempre ha mostrado más tibieza a la hora de aplicar soluciones" explican fuentes conocederas del funcionamiento de la institución que achacan, "sin lugar a dudas", a esas discrepancias la "huida" a Washington de Viñals.

Según aseguran las fuentes consultadas por elEconomista, durante una reunión con el cuadro de mando de la institución central, Viñals defendió con serenidad su plan de actuación, que fue respaldado por varios directores generales de la institución central, encabezados por José María Roldán y Pedro Pablo Villasante.

Además, llegó a esgrimir la experiencia del caso Banesto como el paradigma de la intervención en nuestro país, que se realizó recién llegado Viñals al Banco de España. Pero pinchó en hueso. Según esas mismas fuentes, Miguel Ángel Fernández Ordóñez se apoyó en el, entonces, director general de Supervisión, Javier Aríztegui, para defender un modelo de concentración de entidades. El propio Aríztegui, que intervino activamente en el intento de integración de las cajas de Castilla y León, puso de manifiesto el interés de varias entidades en participar en estos procesos concentración para defender la viabilidad del proyecto propuesto por el gobernador.

Consulte la información completa en la edición de fin de semana de diario elEconomista.
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