domingo, 4 de octubre de 2009

Dos depresiones con....

Demasiadas cosas en común.

El Estados Unidos de la Gran Depresión y el mundo de nuestros días tienen dos cosas en común: la crisis generalizada y la ingenuidad de las masas. En los años ’30, Orson Welles aterrorizó EEUU relatando por radio una invasión extraterrestre. Un nuevo “contacto” con alienígenas recientemente difundido en YouTube ha sido presentado como real por los medios de comunicación más crédulos del panorama internacional.
En el vídeo colgado en la Red, unos marineros de supuesto origen gallego ven interrumpida su faena cuando unos cazas entran en escena persiguiendo a un OVNI. El objeto volante huye sumergiéndose en las aguas ante la incredulidad de los pescadores. Mientras éstos permanecen con la boca abierta, un helicóptero les ordena volver a puerto, donde recibirán “instrucciones”. Las imágenes fueron publicadas en la portada de Terra Noticias y ya han dado la vuelta al mundo.
La narración de ‘La Guerra de los Mundos’ no aportó imágenes, sino unos modestos efectos de sonido comparables al nivel de los de este último fenómeno en Internet. Mientras que los cazas vuelan con un tono sospechosamente similar al de los de cualquier película americana, las hélices del helicóptero no ensordecen a la tripulación.
A pesar de estos errores obvios, la liebre saltó, y multitud de medios se hicieron eco del supuesto contacto entre dos mundos. De esta manera, tanto Ecodiario, como laSexta dedicaron un tiempo al suceso. La cadena televisiva contactó con un experto que desacreditó el vídeo, analizando los fallos de producción en este encuentro en la tercera fase.
A pesar de las sospechas, diversos medios latinoamericanos también se hicieron eco de lo “aparentemente” sucedido al otro lado del charco, tratando el tema con aparente rigor periodístico. Con una seria y detallada descripción del avistamiento, El Gráfico mexicano sólo deja un último párrafo abierto dejando volar la imaginación al decir que no se sabe si el vídeo es falso o no.
Periodismo de investigación
No es la primera ‘invasión’ de Internet. Desde la generalización del uso de la Red, grandes medios de comunicación han acabado ‘picando’ el anzuelo. Supuestas cacerías humanas, bebidas insólitas o falsos fichajes sacaron a relucir las vergüenzas del mundo del periodismo de urgencia, sobre todo del que se limita a publicar sin comprobar primero la veracidad de lo que se publica.
Verano de 2003. Aguien difunde el rumor de una empresa que ofrecía cacerías de mujeres desnudas en Las Vegas. Por supuesto, las mujeres no resultaban heridas (salvo en su orgullo) ya que se trataba de paintball. Fox News fue una de las cadenas que dio el tema como valido, causando las quejas de diversas organizaciones feministas. Mucho ruido, pero pocas nueces, ya que la noticia resultó ser un fake.
Seis años después, los medios de comunicación mundiales fueron “cazados” en otro sonado caso, al no comprobar fuentes. El mal periodismo se paga y el mejor ejemplo de ello fue el caso del “crack serbio” Rajko Purovic.
El agente de Rajko Purovic cerró su traspaso al Middlesbrough por dos millones de libras. Sin embargo, los goles que prometía esta joven perla balcánica acabaron por quedarse en agua de borrajas al demostrarse que su existencia era ficticia. Un blog y una entrada en Wikipedia bastaron para que medios como el Daily Mirror publicasen como noticia lo que no era más que una broma de un joven electricista de 23 años.

Hasta los videojuegos han formado parte de las farsas colocadas a la prensa. De esta manera, un programa de televisión argentino mostró su preocupación por una supuesta bebida alcohólica que hacía estragos entre la juventud: “el grog XD”. Esta bebida tenía ingredientes como tinte rojo nº2, ácido sulfúrico o grasa para ejes, pero no era más que el brebaje imposible de un video-juego de piratas en clave de humor cuya receta está en red.
Esta bomba sólo la podrían aguantar hombres hechos y derechos, como los piratas de The Secret Of The Monkey Island, la popular aventura gráfica que consiguió que su fórmula secreta tuviese su minuto de gloria en televisión. Si Orson Welles levantara la cabeza…

No hay comentarios: