Asturias, más que Oviedo y Gijón....

La resaca de los ayuntamientos endurece la negociación en la Junta

La política asturiana entra en tres negociaciones simultáneas: el equipo de gobierno de Oviedo, la Mesa del Parlamento y la investidura del presidente del Principado

RAÚL ÁLVAREZ

@RALLVAREZ

LUNES 15 DE JUNIO DE 2015

Javier Fernández y Emilio León.

Tres negociaciones simultáneas encauzan este lunes la actividad política en Asturias. La primera debe empezar y acabar de inmediato, puesto que afecta a la composición de la mesa de la nueva Junta General del Principado, que quedará constituida el martes en el pleno inaugural de la décima legislatura autonómica. Las otras dos son de más largo aliento y pueden tener hasta un mes de plazo, porque los partidos disponen de todo ese tiempo para reorganizar el funcionamiento del Ayuntamiento de Oviedo después del vuelco político del pasado sábado y para decidir la investidura del próximo presidente de Asturias. Son procesos distintos, pero es difícil escapar a la sensación de que están relacionados y de que la hostilidad cada vez más evidente entre el PSOE y Podemos contribuye a complicar más una situación ya endiablada de por sí con el reparto de concejales y diputados que decidieron los electores.

Lo ocurrido en Gijón, donde las tres semanas transcurridas entre las elecciones y la constitución del ayuntamiento no sirvieron para acercar ni un milímetro a los socialistas locales y a la candidatura Xixón Sí Puede, apoyada por Podemos, y en Oviedo, donde por sorpresa los concejales de Somos auparon a la alcaldía a Wenceslao López merece un análisis detenido. Pero los acontecimientos en las dos principales poblaciones asturianas no deberían hacer olvidar que el sábado se invistió a los alcaldes de otros 75 concejos (el pleno de Gozón, el último pendiente, tendrá lugar el miércoles) y que en esos plenos hubo movimientos sorprendentes en todas las direcciones.

IU y Somos se aliaron contra candidatos socialistas en Langreo, donde tuvieron éxito, y San Martín del Rey Aurelio, donde fracasaron. Somos también dio una alcaldía al PP. Sucedió en Cabrales. En otros lugares se vieron alianzas de todos contra el que gobernaba hasta ahora. Así fueron desplazados el PP de Villaviciosa, donde ahora gobernará el PSOE (gracias a los votos de Somos y Foro), y los socialistas de Llanes, donde se ha formado un tripartido encabezado por la lista independiente de Vecinos y apuntalado por Foro Asturias y PP. En Ibias, Foro ha apoyado al PSOE para cerrar el paso a Somos en el único municipio donde la marca local de Podemos había sido la lista más votada. En Cangas del Narcea, el PSOE e IU, reconciliados tras largos años de guerras en la izquierda, desplazaron al PP, pero no lo hubieran conseguido sin la ayuda de Foro.

De toda esa lista de agravios cruzados, sin embargo, no parece que vayan a surgir enconos con fuerza suficiente para influir en el escenario regional. De Oviedo y Gijón, sí. El pacto fallido en la segunda ciudad y la sorprendente maniobra relámpago que ha acabado con el PSOE en la alcaldía de la primera han llevado las relaciones entre los socialistas y Podemos a temperaturas bajo cero. La cúpula de la FSA, que el viernes vetó el acuerdo por el que sus concejales apoyaban a Ana Taboada como alcaldesa, se preparaba para un escenario de guerra abierta contra la derecha gobernante en los dos principales municipios y contra el partido de los círculos, al que consideraba responsable de ese resultado, por haberlo permitido. Los socialistas asturianos se ven ahora en la necesidad de modular ese discurso, pero se aprecian reticencias en su actitud.

Podemos tampoco está por un enfriamiento de las hostilidades. El PSOE y, a título personal, Javier Fernández vía Twitter felicitaron a Somos el sábado por la noche, pero el gesto no ha apaciguado los ánimos. Taboada ha rechazado ya en público unos parabienes “cínicos y huecos” y la dirección regional de Podemos, en un comunicado, también acusaba a los socialistas de convertir su lema de campaña (La Asturias del sí) en un sí a las políticas de Mariano Rajoy y Agustín Iglesisas Caunedo. Sobre Gijón, arropada a Xixón Sí Puede y culpaba del fracaso del pacto a la actitud del socialista José María Pérez. Como ya ha expresado en las últimas semanas, para Podemos el PSOE se muestra tibio en las medidas contra la corrupción.

Somos, sin embargo, ha diferenciado entre la actitud de López en Oviedo –se manifestó dispuesto a romper con su partido antes que a impedir el final de los 24 años de alcaldes populares en la ciudad— y la de la FSA. El nuevo alcalde, además, en sus primeras declaraciones, ha abierto la puerta a un tripartido con Taboada y con IU. Entre las tres formaciones hay acuerdo sobre las prioridades para el mandato (revisar la operación urbanística de los palacios de El Vasco y Buenavista, sobre la que existen sospechas de corrupción; deshacer las privatizaciones de servicios municipales; y poner en marcha planes de empleo y para hacer frente a las situaciones de emergencia social) y lo que queda por debatir es cómo reorganizar el organigrama municipal y en qué manos poner cada área. La primera reunión tendrá lugar este mismo lunes.

Sobre la mesa de la Junta, no hay nada decidido a apenas 24 horas del pleno. Los seis grupos están de acuerdo en que la composición de la Mesa, el órgano que regula la vida del Parlamento y de cuyas decisiones depende la velocidad a la que los diferentes asuntos circulan por la cámara, debe ser tan plural como sea posible. Pero, más allá de esa declaración de principios, no se ha cerrado aún ningún acuerdo. Al menos un grupo está condenado a quedarse fuera: la Mesa tiene cinco puestos (la presidencia, dos vicepresidencias y dos secretarías) y en el nuevo Parlamento se sentarán seis fuerzas políticas.

Aunque se ha hablado de interpretar el reglamento con flexibilidad para que quien no acceda a ninguno de esos cargos pueda al menos asistir como oyente, con voz pero sin voto, a sus reuniones, lo cierto es que al menos un partido empezará la legislatura con el enfado de verse excluido. No hay encuentros anunciados de manera oficial para hoy, pero lo probable es que el día rebose de contactos entre los partidos. La propuesta de Podemos de una reunión a seis bandas y retransmitida en streaming a través de internet ha decaído por falta de interés de otros grupos.

Una vez constituida la cámara, Javier Fernández reanudará los contactos para intentar cerrar su investidura. No le quedan muchas opciones. Con el PP, que votará a su propia cabeza de filas, Mercedes Fernández, y con Foro, los tanteos no han llegado más allá de meras reuniones de cortesía tras las elecciones. Ciudadanos vacila entre la abstención y el apoyo a uno de los dos candidatos, sin aclarar cuál. Las relaciones con Podemos no parecen aventurar un final feliz. Izquierda Unida, por último, es el único aliado receptivo, pero hasta ahora Gaspar Llamazares ha insistido en que no está interesado en un pacto a dos. Quiere incluir a Podemos para que el nuevo gobierno tenga a su disposición una mayoría absoluta, pero quedan demasiados cabos sin atar en esa solución.