El Eco.Caídas generalizadas en las bolsas europeas tras la jornada de pánico ayer en Wall Street. Tras empezar la sesión con descensos del 3%, el Ibex 35 intenta que no llegue la sangre al río y suaviza los retrocesos por encima de los 9.800 puntos- Aún así, el índice español pierde soportes con claridad, algo que podría llevar a sus mínimos de agosto.
Los retrocesos de la jornada también llevan al resto de índices del Viejo Continente a ceder niveles clave, como son los 12.600 puntos del Dax alemán o los 5.250 enteros del Cac francés. Los expertos de Ecotrader explican que la pérdida de estos niveles advierten de una probable continuidad de las caídas hacia zonas que destaparían una buena oportunidad para comprar.
Así las cosas, las bolsas europeas sufren la incertidumbre desatada en EEUU, con un Dow Jones que registró su mayor desplome en puntos de la historia y cerró con un descalabro del 4,6%. El S&P 500 y el Nasdaq también se rindieron a la espiral bajista y despidieron la jornada con descensos del 4% y del 3,78%, respectivamente.
¿Cuáles han sido los motivos de los desplomes? Peter Tuchman, director de operaciones en Quattro Securities, explicó a elEconomista que una de las razones pasan por la pérdida de soportes, con el S&P 500 operando por debajo de la media de las últimas 50 sesiones. "No se ha activado ningún cortocircuito ante la venta pero se han activado las ventas automáticas una vez que se han comenzado a perder 500 o 600 puntos", indicó en referencia al Dow Jones. "Cuando vemos un mercado que cae por el precipicio como hemos visto hoy es una venta emocional pero no considero que esto vaya a continuar", aclaró.
Desde un punto de vista más fundamental, los nervios ante hipotética llegada de la inflación más rápido de lo previsto inicialmente por los analistas y, por ende, una subida de los tipos de interés más acelerada por parte de la Reserva Federal de EEUU y de las rentabilidades que ofrecen los bonos, ya empiezan a hacer mella en el mercado.
Asia tampoco ha sido ajena a la incertidumbre mundial. El índice Nikkei de la bolsa de Tokio, que ha llegado a dejarse un 7%, ha cerrado con un desplome del 4,73% con una nueva escalada del yen frente al dólar, un avance que volvió a penalizar a las compañías exportadoras. Sin salir de las fronteras asiáticas, la bolsa de Shanghái ha despedido la jornada con una caída del 3,35%, mientras que el otro mercado de valores de la parte continental de China, la bolsa de Shenzhen, acabó con una pérdida del 4,23%.
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