martes, 22 de marzo de 2022
Desbancarización o desmantelamiento?
La banca cierra una de cada tres oficinas en los últimos cinco años
Los bancos cierran 9.700 sucursales desde 2016 hasta contar con 19.300 establecimientos
Ricardo Sobrino
RICARDO SOBRINO
Recorte oficinas bancaPulsar sobre el gráfico para ampliar
INFOGRAFÍA: BELÉN TRINCADO
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Madrid 22 MAR 2022 - 06:33 CET
Las oficinas bancarias se encuentran en pleno proceso de extinción. Hasta no hace mucho España era el país que más sucursales bancarias y bares tenía por habitante. Primero, la crisis financiera de 2008 obligó a reestructurar la red. Luego, la digitalización del negocio y los bajos tipos de interés llevaron a los bancos a bajar la persiana en las sucursales para ahorrar en gastos y durante el último año la crisis sanitaria del Covid-19 se ha llevado por delante aparte de una red cada vez menos extensa. El caso es que en los últimos cinco años la banca española ha cerrado el 33,4% de las sucursales, lo que supone una de cada tres, según los últimos datos del Banco de España.
En concreto, entre 2016 y 2021 los bancos cerraron 9.700 oficinas hasta dejar su red comercial en 19.338 sucursales. El mediterráneo y las provincias al noroeste de la península han sido las zonas geográficas más afectadas. En ese sentido, Cataluña y Castilla y León se vieron especialmente castigadas, con siete provincias en las que el cierre de oficinas ha estado por encima del 40%.
De hecho, en Tarragona el repliegue ha sido más intenso, ya que desde 2016 han echado el cierre más de la mitad de las oficinas (50,1%) hasta quedarse con 224. En Girona han bajado la persiana 209 sucursales (el 45,5%). En Palencia y Barcelona el recorte de oficinas ha sido del 44,1%, mientras que en Zamora del 43,5%, en Salamanca el 41,5% y en León del 40,9%.
Además, en otras 13 provincias el cierre de sucursales se ha situado por encima de la media nacional: Valladolid (38,8%), Alicante (38,5%), Lleida (38,3%), Valencia (37,8%), Castellón (37,5%), Pontevedra (-36,5%), Murcia (36,4%), Madrid (35,9%), Almería (35,6%), A Coruña (35,3%), Islas Baleares (34,8%), La Rioja (34,1%) y Burgos (33,4%)
Por su parte, en las zonas del centro del país el recorte ha sido más suave. En 15 provincias el cierre de sucursales ha estado por debajo de la media (Bizkaia, Ávila, Segovia, Álava, Málaga, Córdoba, Soria, Zaragoza, Toledo, Navarra, Huelva, Ciudad Real, Jaén, Granada y Badajoz). Además, en Huesca el cierre se ha situado por debajo del 20%. En Teruel han cerrado el 14,8% de las sucursales, en Albacete el 12,9% y el Cuenca tan solo el 9,7%.
Etapa de transición
El sector bancario se encuentra en plena transición para pasar de la tradicional atención presencial en las oficinas a la atención online a través de los canales digitales. Sin embargo, en ese proceso de repliegue de oficinas los colectivos de personas mayores y vulnerables, especialmente en zonas rurales, han alzado la voz por considerar que están quedando excluidos.
La estrategia adoptada por la banca en los últimos años se basa en cerrar varias oficinas pequeñas y ubicadas en zonas cercanas entre sí para abrir otra más grande en la que ofrecer asesoramiento personalizado. El objetivo es dirigir a los clientes a que realicen las operaciones más sencillas a través de las plataformas digitales y que acudan a la oficina cuando requieran de la ayuda de un experto para contratar algún producto más complejo o realizar operaciones que en las que necesiten de asesoramiento para elevar
El sector justifica el continuo cierre de oficinas en el mayor peso que tienen los clientes digitales y en la cada vez menor afluencia de clientes en las oficinas, lo que hace que los establecimientos sean poco rentables. Incluso, explican fuentes financieras, parte de la red de oficinas se mantiene abierta a pesar de generar pérdidas para el banco.
Sin embargo, en ese escenario se ha abierto una brecha digital entre las generaciones más jóvenes y las más mayores y acciones tan sencillas como retirar dinero en efectivo o consultar la cuenta bancaria pueden llegar a ser difíciles en la llamada España vaciada.
Para paliar esa brecha, las patronales bancarias AEB, CECA y Unacc firmaron recientemente un protocolo de diez medidas para ayudar a los clientes mayores y vulnerables a salvar los obstáculos que suponen para ellos la digitalización del sector. Así, la banca española ampliará los horarios de atención presencial en las sucursales para que abarquen como mínimo desde las 9.00 horas de la mañana hasta las 14.00 horas para servicios de caja. También ofrecerá asistencia telefónica personalizada y preferente a los mayores y simplificará el lenguaje de los cajeros automáticos.
Los bancos, además, darán formación específica obligatoria al personal de la red comercial en las necesidades de este colectivo mayor de 65 años. Además, se garantizará la adaptabilidad, accesibilidad y sencillez de los canales en función de su uso. El protocolo incluye el ofrecimiento a los clientes de acciones de educación financiera, digital y prevención de fraudes por el canal que resulte más adecuado.
Igualmente, se creará el Observatorio de Inclusión Financiera para hacer un seguimiento de las medidas adoptadas por las entidades para la prestación personalizada de los servicios financieros. En este caso, se actualizarán el número de cajeros, oficinas, y otros servicios de cada entidad, sobre todo los ubicados en zonas vulnerables, con el objetivo de evitar que la población de estas áreas se queden sin una vía para sacar efectivo o realizar servicios básicos.
MÁS DE LA MITAD DE LOS MUNICIPIOS, SIN OFICINA
4.400 pueblos. Según los datos del Banco de España, de los 8.131 municipios que hay en España, 4.400 no tienen oficina, el 54%. En total más de 1,6 millones de personas están sin acceso a una oficina en su municipio. Aunque en términos relativos supone que solo el 3,5% de la población en España carece de acceso a una sucursal, encontrar una oficina en algunas comunidades autónomas puede llegar a ser complicado. Además, se produce la situación de que precisamente en las zonas rurales en las que no hay oficinas bancarias es donde los ciudadanos tienen más necesidad de ellas. Se trata, en general, de zonas agrícolas con escasa población donde buena parte de los habitantes pertenece a un grupo de edad que tiene más difícil el acceso a los canales digitales.
Iniciativas. Para paliar esa ausencia de servicios bancarios presenciales y evitar la exclusión financiera, se han llevado a cabo algunas iniciativas. CaixaBank ha heredado el Ofibus de Bankia, una sucursal móvil, que recorre municipios en riesgo de exclusión financiera. Igualmente, en 2020 Correos anunció un acuerdo con Santander para ofrecer servicios bancarios básicos en toda España a través de los 4.675 puntos de atención al ciudadano del organismo público. Se trata de un acuerdo que, una vez vencido el periodo de exclusividad, prevé extender a otras entidades.
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