martes, 29 de marzo de 2022
Urgencias de Guerra...
El Gobierno mantiene un pulso para que el tope al gas se sitúe por debajo de 50 euros/MWh
Negocia con Bruselas que el precio del 'pool' eléctrico no supere los 100 euros MWh
Carmen Monforte
CARMEN MONFORTE
La vicepresidenta para la Transición Ecológica, Teresa Ribera.
La vicepresidenta para la Transición Ecológica, Teresa Ribera. EUROPA PRESS
Compatir en FacebookCompatir en TwitterCompatir en LinkedinEnviar por correoIr a comentarios
Madrid 29 MAR 2022 - 06:11 CEST
El Consejo de Ministros tiene previsto aprobar hoy el tan esperado paquete de medidas para rebajar o paliar los precios de la electricidad, dentro del plan de respuesta a la guerra, tanto en el mercado mayorista (pool) como minorista. La medida estrella es el mecanismo temporal de ajuste de los precios de las centrales de ciclo combinado que hacen sus ofertas en el pool, y que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el primer ministro portugués, Antonio Costa, lograron arrancar al Consejo Europeo celebrado en Bruselas el pasado viernes, y cuyos detalles deben recibir el visto bueno de la Comisión Europea.
Desde el punto de vista formal, hasta ayer, el Gobierno barajaba si incluirlo en el real decreto ley con el resto de medidas que se aprobará hoy, condicionado, eso sí, a la posterior aprobación de la Comisión. O aprobarlas todas, menos el mecanismo del gas, que se pospondría a un decreto ley posterior, una vez se pronuncien las autoridades comunitarias.
Según fuentes políticas, aunque Bruselas se ha comprometido a ser flexible en la interpretación de la normativa para permitir la que se ha dado en llamar “excepción ibérica”, existen diferencias sobre el precio tope que se fijará al gas: los gobiernos de la Península quieren que el precio sea lo suficientemente bajo (menos de 50 euros/ MWh: a ser posible 35 euros MWh) como para que este se traduzca en un precio de la electricidad de 120 euros/MWh, como máximo, preferiblemente por debajo de 100 euros/MWh. Por su parte, la Comisión no quiere que el diferencial entre el precio mayorista ibérico y el resto de países de la UE sea muy grande, para evitar poner en evidencia el actual sistema marginalista o que haya una avalancha de países que quieran apuntarse al mismo.
MÁS INFORMACIÓN
El Gobierno mantiene un pulso para que el tope al gas se sitúe por debajo de 50 eurosMWh
Los carburantes bajarán de manera generalizada 20 céntimos al respostar en la gasolinera
El Gobierno mantiene un pulso para que el tope al gas se sitúe por debajo de 50 eurosMWh
El Gobierno limita al 2% la subida de los alquileres durante los próximos tres meses
Por el momento, el sistema pactado consiste en hacer dos subastas diarias: una igual a las que se celebran ahora, con el precio real del gas que, por ser el más elevado, marca el precio marginal al resto de energías (nuclear, hidroeléctrica y renovables) y que regiría para las comercializadoras que importen desde Francia. Y una segunda subasta, para uso interno o doméstico, en que se pondría un límite al precio del gas que va al pool y cuya diferencia se prorratearía o distribuiría entre todas las horas y pagaría la demanda.
De esta manera, la generación con gas (que no llega al 20% de la misma) cobrarían el coste real, esto es, no trabajaría a pérdida, pero tampoco marcaría el precio marginal elevado para el resto de energías, que suman el 80% restante. El consumidor pagará el gas a su precio pero no el resto de las tecnologías a precio del gas.
Con el sistema de doble subasta, se respeta el algoritmo de casación europeo y los importadores pagarían el marginal como hasta ahora. En cuanto a la segunda casación, se replican las ofertas con las del gas con un tope o price cap.
Este, según fuentes del sector, debe ser inferior a un neto de 50 euros/MW, porque el precio final de la electricidad es el del gas multiplicado por dos, más el coste del CO2 y los peajes, lo que derivaría en algo más de 100 euros/MWh en el pool. Demasiado caro para las cotizaciones históricas, pero “razonable” para estos tiempos de escalada, que se ha recrudecido tras la invasión rusa de Ucrania.
El Gobierno ha optado por mantener el PVPC, la tarifa regulada de los consumidores domésticos, que está directamente ligada al mercado mayorista, así como el bono social, un sistema de descuentos que, su vez, ligado al PVPC. Eso es una señal, indican fuentes empresariales, de que espera que el acuerdo con Bruselas se traduzca en una bajada importante del mercado mayorista y, por tanto, de la factura de los hogares, en general, y los vulnerables, en particular.
Recorte de cargos
Y es que para hacer bajar la factura el Gobierno ha encontrado otra vía: una actualización extraordinaria de la retributivo específica que recién las instalaciones de renovables del llamado Recore, a la que se han avenido estas empresas tras una larga negociación. De este ajuste se lograrían 1.800 millones de euros este año, según los datos ofrecidos ayer por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que servirán para recortar los cargos que, junto a los peajes, componen la parte fija del recibo. En septiembre, los cargos se recortaron un 96% y ya en enero, el Ministerio para la Transición Ecológica los recuperó en un 30%. Los fondos de las renovables servirán, según Sánchez, para reducir los cargos en un 55%.
A todo ello, se unirá la prórroga hasta el 30 de junio de los recortes del IVA, del 21% al 10%, y del impuesto de la electricidad, del 5,1% al 0,5%. Estos tributos se bajaron en junio del año pasado.
“Con ello vamos a reducir aún más el precio final de la electricidad lo que, sin duda alguna, aliviará el esfuerzo que están realizando la ciudadanía, las empresas y las industrias de nuestro país”, señaló el presidente.
SE EXTIENDE LA MINORACIÓN A LOS CONTRATOS BILATERALES
Entre las medidas energéticas que el Consejo de Ministros incluirá hoy en un decreto ley figura la extensión hasta el 30 de junio del mecanismo para reducir el exceso de los beneficios de las eléctricas por el elevado precio del gas en los mercados internacionales (los llamados beneficios caídos del cielo o windfall profits), aunque “con ciertas modificaciones para reforzar su eficacia y adaptarlo a las directrices europeas”.
Detrás de este comentario está la decisión del Gobierno de aplicar la minoración de los winfall a los contratos bilaterales a plazo y precio fijo que hayan sido suscritos tras la escalada de los precios. En el RDL 17/2021, de septiembre, España se adelantó a la UE al incluir dicha minoración, si bien se vio obligada a dejar fuera a los contratos bilaterales, ya que no recogían los precios del pool, según insistieron las eléctricas.
La comunicación de la Comisión Europea (Toolbox II) de hace varias semanas permite el recorte a los contratos que internalicen el precio del gas tras la fuerte escalada de precios, La CNMC analiza en estos momentos millones de contratos para determinar dicha internalización.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario