Lo que nos faltaba....OTEA se frota las manos....* Se cobra el derecho de admisión *

Cobrar 1,5 euros por no consumir en un bar: los hosteleros asturianos abordan el debate MARCOS GUTIÉRREZ ASTURIAS ASTURIAS Un camarero monta una mesa en la terraza de un restaurante Un camarero monta una mesa en la terraza de un restaurante Quique Garcia | efe Dueños de pubs y cafeterías creen que en la región no es necesario poner en práctica la política de un hotelero cántabro. «Aquí no tenemos ese problema. La gente entra a consumir», apuntan 27 oct 2022 . Actualizado a las 05:00 h. Comentar · 4 Un hostelero cántabro, Óscar Solana, ha tomado una medida para frenar, en su opinión, el «abuso» en que caen algunos clientes en su taberna de Liaño. Solana decidió empezar a cobrar euro y medio a todos los que visiten su coctelería sin consumir. Esta iniciativa ha creado mucho debate, tanto en las redes sociales como en la calle. Sin embargo, los hosteleros asturianos no creen que sea exportable al Principado. En primer lugar, porque coinciden en que ese problema, es decir, el de los clientes que entran a un pub y no piden ninguna consumición, es residual en la región. También creen que hay mejores y «más elegantes» medidas para evitar que una persona que no consume ocupe un lugar necesario en el establecimiento. Hemos creado para ti una selección de contenidos para que los recibas cómodamente en tu correo electrónico. APÚNTATE Javier Rodríguez Velasco, dueño del bar Cadillac de Oviedo, lo tiene muy claro a este respecto: «Yo nunca lo haría, me parece algo muy soberbio». Prefiere «gastar el tiempo en ver qué hacer con los que sí pagan por tomar algo». Reconoce que «a nadie le interesa una persona que no consume», si bien cree que es mejor transigir y hacerle saber a ese usuario que, «en cuanto haga falta la silla, tendrá que marcharse». «Otra cosa es que en una mesa de ocho haya dos sin tomar algo», aclara, si bien añade que «lo de cobrar por nada me parece entrar en el juego de lo cutre. Eso no es hostelería». Considera que una propuesta más sensata sería establecer «una pequeña entrada con una consumición de refresco incluida, por ejemplo». David Barroso, dueño del bar La Mina de Gijón, es de la misma opinión. «Partiendo de la base de que cada uno en su casa hace lo que quiere, esa es una medida que no pienso llevar a cabo», asevera. Cree que «no es un problema que exista actualmente» en su local, donde el «99% de la gente que se sienta consume». Aclara que, si ese escenario cambiara de manera muy radical, «habría que valorarlo», si bien puntualiza que «en Asturias no tenemos ese problema y la gente que viene a los bares viene a tomar algo». -Un hombre toma un café en el interior de un bar de Gijón-Un hombre toma un café en el interior de un bar de Gijón Juan González En este sentido, indica que «ni siquiera en pandemia se ha valorado algo parecido». «La gente sabe cuánto tiempo tiene que estar en un local o no. No es algo que deba yo marcarles», concluye. Eduardo González, dueño del café Gales de Gijón, dice que, ante situaciones de este tipo, la decisión «depende de cada local y negocio». En bares de «ambiente juvenil es normal, porque te vienen por ejemplo grupos grandes de chavales de 16, 17, 18… a jugar al billar y no quiere consumir nadie». No obstante, la idea de cobrar por no dar un servicio no pasa por su cabeza. «Yo lo que hago en estos casos es exigir una consumición, porque lo de pedir dinero por nada sí que me parece algo muy agresivo». «En Madrid me cobraron diez euros por ir a un sitio, con la consumición aparte. Y de eso no se hace eco nadie», concluye. Fernando Neira, propietario del pub gijonés Morrison, admite que le «cuesta opinar en contra o a favor de otro hostelero, porque cada uno en su casa pone sus reglas». «Yo no lo haría, aunque también creo que depende del local», indica. Cree que no es lo mismo un pub relativamente grande que «un bar con cuatro o cinco mesitas, donde el hecho de que haya una mesa que no consume afecta mucho». No obstante, considera que «antes hay otras formas más elegantes de poder hacer uso de ese sitio». «A mí, por ejemplo, si me entra una mesa de cuatro que no consumen y, al rato, entran cinco personas a una mesa que sí van a consumir lo que hago es decirles ‘chicos, lo siento, pero voy a necesitar esta mesa’», resalta. Este hostelero de Gijón está acostumbrado a ver pasar clientes que «te piden un vaso de agua o ir al baño y no se lo vas a negar». Cree firmemente que «un euro y medio no te va a hacer más rico o más pobre», e insiste en que las denunciadas por el hostelero cántabro «no son situaciones que pasen todos los días, sino casos muy puntuales. No creo que a esta persona se le sienten personas todos los días que no consuman nada». De hecho, el propietario del bar Morrison apunta que «a veces incluso queremos que entre gente para crear ambiente», independientemente del gasto que vaya a hacer. «En mi opinión, el español es muy buen cliente», expone.