lunes, 17 de diciembre de 2012

Motivos y más motivos...


REESTRUCTURACIÓN FINANCIERA

¿Por qué el Santander absorbe ahora a Banesto?


Rafael Rubio

primir
La absorción de Banesto por parte del Santander ha sido un rumor recurrente en los últimos años. Y frente a tal posibilidad, los responsables de las entidad han sido han sido muy claros en su argumento: no lo absorbemos porque nos interesa tenerlo mejor como segunda marca.
Lo que ahora se pregunta el mercado cuál es la razón para que se aborde precisamente ahora la absorción cuando concurren una serie de situaciones que justifican, como nunca, el mantenimiento de una segunda marca. La desaparición de las cajas de ahorros es una gran oportunidad para una marca como Banesto, muy implantado en zonas rurales. Es la entidad que podría sacar más provecho a la desaparición paulatina de las cajas de ahorros. Para el Santander sería también una buena oportunidad operar con dos marcas en un momento en el que se ha reducido notablemente el número de jugadores en el sistema financiero español. Sin embargo, desde el Santander se señala que cuando la actividad tiene una caída tan grande, como la que se está produciendo en el sector bancario español, no se puede sacar partido de una segunda marca. De otro lado, consideran que ahora lo importante es tener una buena marca ("Santander" funciona mejor que "Banesto") con el mayor número de oficinas.
Sin embargo, en el aspecto contable podrían existir razones que justifiquen  esta operación de absorción. El valor en Bolsa de Banesto, como el resto de los bancos, está por encima del valor en libros y Santander podría realizar unas importantes plusvalías contables. Sin embargo, en el Santander señalan que el efecto positivo contable es inapreciable teniendo en cuenta que posee ya el 90 por ciento de la entidad y que la operación apenas supondrá 250 millones de euros.
Hay una tercera razón y, probablemente, la más importante: la necesidad de llevar a cabo una profunda reestructuración en ambas entidades para reducir costes. El Santander podría realizará más fácilmente tal reestructuración en medio de la absorción de Banesto. El presidente del Santander, Emilio Botín, se ha manifestado siempre contrario a llevar a cabo una reducción de personal que podría resultar ya inevitable dada la fuerte caída de la actividad bancaria. La reestructuración será, sin duda, más vendible llevarla a cabo con la excusa de la fusión.
De las 700 oficinas que desaparecerán, como consecuencia de esta fusión, una buena parte serán del Santander que no ha querido cuantificar cuanto supondrá eso en número de personal. Sólo se ha sabido que no se recurrirá a ningún ERE, se propondrán bajas incentivadas y traslados de personal, incluso al extranjero. La absorción estará realizada en el mes de mayo próximo, después de que las juntas de ambas entidades lo aprueben en marzo.
Asumido que tras esta operación se producirá la gran reestructuración del Santander, en el sector financiero se volvía a hablar ayer de la sucesión en el Santander. La edad del presidente (Emilio Botín, 78 años) y la del consejero delegado (Alfredo Sáenz, 70 años) sugieren que debería empezar a despejarse quienes serán los responsables de la entidad resultantes tras la reestructuración.

No hay comentarios: