Los cientos de aficionados japoneses presentes este jueves en las gradas del Barcelona Open Banc Sabadell habían comprado las entradas para ver a Kei Nishikori y se encontraron con Yuichi Sugita. Después de caer en la última ronda de la previa, Sugita entró en el cuadro del Godó tras el abandono de su compatriota Kei Nishikori, segundo favorito del evento y campéon en las ediciones de 2014 y 2015.
El nipón, 91 del ranking, ha sabido aprovechar esta segunda oportunidad y estará mañana en la antepenúltima ronda del Open 500 barcelonés tras deshacerse de Pablo Carreño, séptimo cabeza de serie, por un tanteo de 6-3 y 6-3, en 1 hora y 17 minutos.
El pupilo de Samuel López, que empezó esta semana el 10 de la Race 2017, se vio sorprendido por un rival que no perdió nunca el saque. El asturiano no descansará la semana que viene y antes de la disputa del Mutua Madrid Open, segundo Masters 1.000 del calendario en polvo de ladrillo, estará en el Open 250 de Estoril.
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