sábado, 18 de abril de 2009

MM dibuja nuevos mapas.

Bancarios y Cajeros.

El presidente de Cajastur vaticina un nuevo mapa financiero con menos bancos y cajas
18.04.09 - C. MURIAS | GIJÓN

Manuel Menéndez critica el apoyo sistemático y con dinero público a entidades crediticias mal gestionadas
Cree que los resultados de algunas entidades «aún pueden empeorar»
Es el momento de hacer un ejercicio de autocrítica, acometer una reforma del sistema financiero y asumir las consencuencias de «una excesiva alegría que no habla en favor de la profesionalidad» del sector. El presidente de Cajastur, Manuel Menéndez, describió ayer un panorama un tanto crítico del presente y el futuro del sistema financiero español, en una conferencia titulada 'Crisis financiera y regulación bancaria en Europa', que impartió ante un selecto grupo de empresarios en Gijón. Menéndez vaticinó que, en los próximos años, «veremos una reordenación del sector financiero» y «un nuevo mapa de entidades de crédito» en el que desaparecerán aquellas que sean menos eficientes. Algo, a su juicio, «lógico». «No entiendo eso de que un banco no pueda quebrar como cualquier otra empresa», analizó en su exposición. Apoyar «con dinero público o privado» a entidades que han hecho una nefasta gestión del riesgo -como ha ocurrido en Europa- sólo perjudica a aquellas que han hecho correctamente sus deberes. «Así daría igual hacerlo bien o mal», concretó el presidente de Cajastur.
Menéndez participó en una jornada titulada 'Tres visiones para afrontar la crisis' organizada por las Cámaras de Comercio y que también contó con la participación del presidente de la empresa de comunicación Bassat Ogilvy, Enric Pujadas, y el catedrático de Derecho del Trabajo de la Universidad de Córdoba Federico Durán.
«El sector financiero tiene asignaturas pendientes que tendrán que pagar los accionistas con una menor rentabilidad», continuó Menéndez en el encuentro que se celebró en el Pabellón del Principado de la Feria de Muestras. Añadió que la supervivencia del sector no será una cuestión de 'tamaño' entre las entidades, sino de «eficacia» en la gestión del riesgo. Algo que también incumbe a los ahorradores.
Responsabilidad
A juicio de Menéndez, el Gobierno debe de ofrecer una seguridad sobre la solvencia del sistema financiero, pero «decir que todos los ahorros están asegurados» supone eliminar de un plumazo la responsabilidad de un cliente a la hora de contratar un depósito y de una entidad a la hora de conceder un interés. «Los bancos podrían dar el interés que quisieran porque el Estado pagaría después los depósitos», ejemplificó Menéndez, que abogó, dentro de esa reordenación financiera, por que el ahorrador asuma el riesgo de perder sus depósitos.
El problema de fondo de las entidades bancarias es ahora mismo de liquidez y solvencia, continuó Menéndez. Inyectar recursos públicos es una medida con efectos positivos pero que no resuelve el largo plazo. A juicio del presidente de la Caja, habría que resolver la cuestión del déficit exterior, fomentar el ahorro y asumir un modelo de crecimiento «más lento», así como optar por un nuevo modelo «eficiente y racional», en el que las entidades sean capaces de reducir costes.
A pesar de todo, el sector financiero español «no ha agravado la economía sino que ha ayudado a paliar los efectos de la crisis» y está en mejores condiciones gracias al «control eficiente» del Banco de España, a un «modelo más sólido y menos apalancado» y a los fondos de provisión que contienen el impacto de la morosidad, describió Menéndez. Esta mejor posición no impide que el presidente de Cajastur considere que «aún no hemos visto lo peor en términos de cuenta de resultados».
El próximo vencimiento de deuda no será en las mejores condiciones y parte de los recursos serán dirigidos a su amortización, lo que podría traducirse en una reducción del crédito. A esto se unen otras circunstancias que ensombrecen aún más el futuro, como el incremento de la morosidad y la reducción de los depósitos a causa de la menor capacidad de ahorro de las familias.
Por último, Menéndez se refirió al mercado europeo. Criticó el exceso burocrático a la hora de tomar decisiones e instó a desarrollar una «unidad de acción» para reforzar la capacidad ejecutiva, así como a homogeneizar el modelo de supervisión financiera. No es lógico, concluyó, que bancos que han tenido apoyo público compitan en igualdad de condiciones con aquellas entidades que no han recibido ayudas y han cuidado su política de riesgo.
Manuel Menéndez subrayó al final de su conferencia que su interlocución se basaba en un «análisis personal y global del sector» y se refirió a los datos positivos que, a pesar de la crisis, muestra Cajastur.

No hay comentarios: