Vaya trio.

Los fenómenos del gol vienen de áfrica.

Los '9' de Europa: 'Made in África'

Drogba, Adebayor, Eto'o, Chelsea, Barcelona, Arsenal, Fútbol

Nacieron en el tercer continente del mundo por tamaño. Provienen del África Latina, en donde el francés es una de las lenguas en común y la escasez de recursos es un sello distintivo. Son Drogba, Adebayor y Eto’o, los mejores nueves de Europa, son actores que representan el gol en cualquier puesta en escena, son tres futbolistas que todo club grande desea tener, porque garantizan puntos, porque ganan partidos y generan ilusiones. Chelsea, Arsenal y Barcelona están en semifinales de la Champions en parte gracias al gol de Drogba frente al Liverpool, al de Adebayor frente al Villarreal y al de Eto'o frente al Bayern. Estos tres hombres, que nacieron sin nada, rodeados de pobreza, pero con un sueño por cumplir: conquistar Europa a través de su fútbol. Misión cumplida.

Drogba, el tigre marfileño

Didier Drogba: marfileño, 31 años, 1.89 de altura, 89 kilos de peso, delantero centro del Chelsea. Veloz, potente por naturaleza, intuitivo, con una complexión física inmejorable, más parecido a la de un tigre que a la de un leopardo, sobre todo por su corpulencia. Protege el balón como pocos futbolistas. Tiene una flexibilidad que le permite disparar de cualquier parte del campo sin importar las adversidades. Comenzó a sorprender al mundo con sus primeros pasos en el Le Mans, el Guingamp y en el Olympique de Marsella, hasta que Mourinho le puso el ojo y se lo llevó a la Premier League por 37,5 millones de euros. No tardó en conquistar las almas que frecuentan Stamford Brigde. En su primera temporada como jugador ‘Blue’ (2004) marcó 15 goles en total, en la siguiente 13, en la tercera explotó, anotó 20 en la Premier, convirtiéndose en el máximo goleador, y otros 12 entre Copa y Champions. En la cuarta bajó el listón a nueve y en la presente campaña lleva cuatro en Liga y cinco en otras competiciones. Había desaparecido con Scolari, pero Hiddink le recuperó. Ahora es una amenaza latente, ha recuperado su mejor versión y el Barça lo está mirando con lupa antes de que se le haga de noche.

Adebayor, el león del Serengueti togolés

Con un estilo diferente al de Drogba, un físico más alargado y menos ostentoso, más estilizado y menos potente, pero más técnico y con más recursos, Adebayor es un diamante en bruto que se exhibe en los escaparates más exclusivos de Europa. Nació en la República de Togo, en donde la esperanza de vida es de 57 años. Dio sus primeros pasos como futbolista profesional en un campo de entrenamiento de Lomé, pero no tardó en despuntar. Ficho por el club francés FC Metz, le quedó pequeño y se fue al Mónaco; triunfó en el Mónaco, y se fue al Arsenal, donde saltó al estrellato. 4 de febrero de 2006, Arsenal-Birmingham, Adebayor debuta como jugador ‘Gunner’. 21 minutos después, “Baby Kanu” marca su primer gol en la Premier. La gente se emociona, ven en Adebayor un nueve con futuro. En su primera temporada marcó cuatro goles en 13 partidos, en la segunda 12 en 44, en la tercera 30 en 48 encuentros y en la presente campaña lleva 15 tantos en total. Posee una técnica privilegiada, un disparo delicado y muy sofisticado. Le gusta moverse en el área, cuando se encuentra en él, no perdona, mata. Conocido por su melena, parecida al de un león del Parque Nacional del Serengueti, los seguidores del Arsenal celebran sus goles cantando “Ade-bay-o, Ade-bahía-o” al ritmo de las campanadas de Westminster.

Eto’o, el guepardo indomable

Samuel Eto’o no necesita presentación. Su identificación son los goles de zurda, de derecha, de chilena, por arriba, por abajo, de vaselina, de cabeza, de volea. El camerunés es como un guepardo, alcanza una velocidad suprema en espacios cortos pero sólo puede mantenerla unos segundos, por lo que si no alcanza su objetivo en 400 metros, abandona la persecución. Así es Eto’o, un jugador tan habilidoso como un mago, que cambia de ritmo como de zapatos, que de cada diez oportunidades de cara a portería termina cinco. Su carácter lo hace diferente. Si se enfada puede perder los papeles, pero si no se enfada no marca. Con el tiempo se ha salido de la polémica, pero cada vez regresa mete a su equipo en el ojo del huracán. Comenzó en el Leganés, pasó al Mallorca, club de sus amores, y conquistó al Barça con su letal disparo. Hoy ocupa el puesto 13 en la clasificación de los máximos goleadores en la historia de la Liga. Su aval son 155 goles en 266 partidos. Es el león indomable del Camp Nou, el FIFA World Player de 2005, el ‘Pichichi’ de la Liga en 2005-06, máximo goleador de la selección de Camerún (54 goles), máximo goleador de la historia del Mallorca (54), máximo goleador de la historia de la Copa de África (16), nombrado futbolista del año en 2003, 2004 y 2005. Eto’o no es un jugador común, es único, bajo presión funciona mejor, quizás ahí la diferencia.

África, un continente anestesiado por el dolor de la pobreza, se ha entregado a la tarea de generar excepcionales delanteros centro, quizás para no perder todas sus ilusiones, quizás porque África estaba dormida y ha despertado, quizás porque con el tiempo su naturaleza humana les ha premiado, quizás simplemente porque los milagros no llegan, se construyen. Droga, Adebayor y Eto’o, tres nueves perfectos con característica diferentes.