Las CCAA y los Aytos. nos llevarán...

Al huerto del endeudamiento masivo.

El Gobierno apremia a CC AA y Ayuntamientos a equilibrar sus cuentas

Economía debe presentar esta semana a Bruselas un plan de estabilidad para 2012 de reducción del déficit, del que son responsables al 50% territorios y municipios

Ya no se tiene miedo al déficit y es difícil cuadrar cuentas después de años de bonanza, señalan desde las autonomías, que deben cumplir, junto a los municipios, con la parte que les corresponde para no acabar con desajustes desorbitados. Los números de las diferentes administraciones locales y territoriales amenazan con descarrilar las previsiones del Ejecutivo, que puede incurrir en una brecha entre ingresos y gastos desconocida en los últimos 50 años. El Consejo de Política Fiscal y Financiera se encargará de supervisar los diferentes planes de reequilibrio económico que sirvan como hoja de ruta para consolidar las cuentas públicas y reconducir el déficit hasta el 3% en 2010, como exige Bruselas.

EEjecutivos autonómicos y los más de 8.000 municipios deben cumplir con la parte que les corresponde y no acabar con déficit desorbitados". Es decir, que cada palo aguante su vela. Son declaraciones ante los medios de comunicación del secretario de Estado de Hacienda, Carlos Ocaña, sobre los desequilibrios en las cuentas públicas porque, si eso ocurre, la previsión inicial del Gobierno es papel mojado.

Y es que, el déficit público prosigue con su escalada alcista. En septiembre creció hasta el 5,96% del PIB y según confirmó el secretario de Estado, para finales del año se mantiene la previsión del 9,5%. Todo dependerá, insiste, de lo que ajusten el gasto las CCAA y los Ayuntamientos.

Con más claridad se expresaba en una de las sesiones del control al Gobierno, la vicepresidenta económica, Elena Salgo, "austeridad en el gasto y disciplina en las cuentas públicas" deberán ser las medidas que se adopten ante los datos de déficit de las comunidades autónomas referidos a 2008. Ha comentado que las comunidades que superen el déficit establecido por el Consejo de Política Fiscal y Financiera deberán presentar planes económicos de reequilibrio, para ser aprobados por este Consejo y posteriormente por la Comisión Europea.

Diez autonomías infringieron el objetivo de estabilidad en 2008. Los ingresos por impuestos se han derrumbado y Cataluña, País Vasco, Cantabria, La Rioja, Murcia, Comunidad Valenciana, Castilla-La Mancha, Navarra, Extremadura y Baleares han sido incapaces de cumplir el objetivo de déficit pactado con el Gobierno para 2008, 0,75% del PIB. El Consejo de Política Fiscal y Financiera daba un mes a estas autonomías para que presenten sus planes para reconducir el dato.

Desajustes en las cuentas en un año en el que el Gobierno entregó 7.000 millones de euros más a las autonomías de los que finalmente ha recaudado. Liquidación en negativo que, según la ley, deberá ser devuelta ahora de al Estado. "Las autonomías pactaron que con el nuevo modelo de financiación esas devoluciones empiecen a practicarse a partir de 2011 y de forma progresiva hasta cuatro años", explican desde Economía que ya ha descontado, no obstante, de su déficit esos fondos, aunque no comenzará a retirarlos al menos en dos ejercicios.

Se trata de un ajuste contable que, por tanto, lleva a las comunidades a realizar un esfuerzo extraordinario a partir del año que viene. La explicación está en el techo de déficit del 2,5% del PIB acordado para el año próximo por lo que el Ejecutivo les exige que "como poco empiecen a descontar el dinero de las liquidaciones negativas, señalaba tras la reunión del Consejo de Política Fiscal y Financiera la vicepresidenta Salgado.

"Ya no se tiene miedo al déficit. Es difícil cuadrar las cuentas después de años de bonanza", comentaban entre sí algunos de los responsables de economía autonómicos. Cerca del 80% del presupuesto se destina a servicios sociales básicos como sanidad, educación y dependencia, por lo que el margen de recorte es más ajustado.

Más de una comunidad ha explicado que tendrá graves problemas para cumplir el 2,5% de déficit de 2010 hasta tal punto que algunas han pedido ampliarlo. Además lo que van a ingresar por la transferencia de impuestos el año que viene, será de 46.219 millones de euros y esto representa una caída del 22% respecto al año anterior.

Tras fijar el techo de gasto para los Presupuestos Generales del Estado de 2010 que estimaba un déficit para las CCAA en el 2%, el CPFF amplía el límite al 2,5% del PIB.

Las cuentas autonómicas amenazan con hacer descarrilar las previsiones. El Ministerio de Economía cree que el saldo negativo conjunto de todas las Administraciones abrirá una brecha entre gastos e ingresos equivalente al 9,5% del PIB, "un desfase que no se había visto en los últimos 50 años". Y aún así, todo apunta a que se quedará corto. Las comunidades son el flanco débil de esta previsión. El Gobierno considera que en 2010 el déficit será del 2%; en 2011, del 1,7%, y en 2012, del 1,3%.

Margen de déficit

En cuanto a las entidades locales, está previsto un dato del 0,4% en 2010, del 0,3% en 2011 y del 0,2% en 2012, según acordó la subcomisión de Régimen Económico Financiero y Fiscal de la Comisión Nacional de Administraciones Locales, frente al 0 por ciento de déficit que permite a las corporaciones locales la Ley de Estabilidad

Los alcaldes han insistido en la necesidad de que los gobiernos locales tengan la misma consideración respecto a la estabilidad presupuestaria que las comunidades autónomas, al entender que la actual normativa les discrimina.

"La mayoría de los ayuntamientos están ocultando gran parte de la deuda en las empresas públicas, para evitar de esta forma los criterios de control del déficit. De hecho, en junio del 2009 la deuda de las empresas públicas dependientes de las entidades locales alcanzaba los 7.253 millones de euros, que no quedan registrados dentro de los casi 27.000 millones de euros de deuda total de los consistorios" dicen desde el Instituto de Estudios Económicos.

Los municipios españoles han conseguido, no obstante, llamar la atención del Gobierno en dos asuntos concretos que se traducen en dos reclamaciones: el disponer de un margen de déficit y obtener fondos para obras. De esta manera, en 2008, por primera vez, los ayuntamientos tienen el permiso para incurrir en un déficit excepcional y conjunto del 0,2% del PIB. Según el Ministerio de Economía, este porcentaje supone "algo más del 3%" de los ingresos no financieros. Los municipios que tengan una desviación de sus Presupuestos superiores a esta ratio están obligados a presentar un plan económico y financiero. Hasta esa cifra podrán incurrir libremente en déficit. Sin embargo, este techo provisional que baraja el Gobierno se ha quedado corto. De momento, la actualización del Plan de Estabilidad prevé que en 2008 el déficit de las corporaciones locales haya retraído un 0,5% del PIB nacional. Para 2009 el déficit previsto en los ayuntamientos es del 0,4% y sólo se alcanzaría el 0,2% en 2011. Y eso, sin tener en cuenta las estimaciones de otros organismos.

Ana Sánchez Arjona

Ajustar números en dos años, un listón difícil de alcanzar

"La semana que viene el Gobierno va a remitir el Plan de consolidación de nuestras cuentas públicas a la Comisión Europea", anunciaba el pasado miércoles en el Congreso de los Diputados, el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero. En el se detallar el proceso de reducción del déficit que se va a seguir para cumplir con el pacto europeo de estabilidad y crecimiento. El objetivo del Ministerio, a sugerencia de la Comisión Europea, es reducir el déficit hasta el 3% del PIB en 2012, "un listón difícil de cumplir" ha reconocido el secretario de Estado, Carlos Ocaña. Bruselas evitaba la semana pasada responder a la vicepresidenta española, Elena Salgado, cuando solicito una prórroga para sanear el déficit excesivo. El Ejecutivo europeo se ha limitado a explicar que en noviembre examinará las medidas por España y otros 10 países expedientados por incumplir el Pacto y analizará si se puede corregir en el plazo fijado por el Consejo de Ministros de Economía y Finanzas de los 27.

Los principales objetivos por los que este Pacto fue creado son prevenir la aparición de un déficit excesivo en la zona euro, tras constituirse en moneda única, garantizar una gestion sana de la hacienda pública con el fin de evitar que las acciones de un Estado miembro repercutan en los otros y garantizar la convergencia sostenible de cada uno de los países. Uno de los puntos clave, por tanto, es que cada desviación de este objetivo va a suponer una llamada de atención por parte de la Comisión Europea al país infractor. Las recomendaciones de rectificación se convierten en la pertinente sanción en caso de mantener el déficit presupuestario por encima del 3% durante dos años.


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