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Los jefes de UGT y CEOE en Madrid también quieren ser consejeros de Caja Madrid
@Carlos Sánchez - 24/11/2009
José Ricardo Martínez (i) y Arturo Fernández. El consejo de administración de Caja Madrid continúa recogiendo adhesiones inquebrantables. Ahora son los máximos responsables de UGT y de Ceim, la patronal madrileña, quienes han hecho llegar a sus organizaciones su interés en formar parte de consejo de la cuarta entidad financiera del país. El proceso electoral, como se sabe, está paralizado de manera cautelar hasta el próximo 2 de diciembre. A partir de ese día, y tras una vista oral, la jueza de instrucción Inmaculada Vacas, deberá decidir si levanta la suspensión del trámite electoral.
Según fuentes de tota solvencia, el presidente de la patronal madrileña, Arturo Fernández, sustituirá al jefe de los empresarios, Gerardo Díaz-Ferrán, anterior presidente de la Confederación de Empresarios Independientes de Madrid (CEIM). Díaz-Ferrán debería haber dimitido del cargo hace casi dos años después de que fuera nombrado responsable de la CEOE, pero para que los empresarios no perdieran un puesto en el consejo de administración de la entidad, ha continuado formalmente en el cargo. El restaurador Arturo Fernández, sin ninguna experiencia en el sistema financiero, será nombrado dentro del grupo de entidades representativas de la Comunidad de Madrid.
El aumento de la politización de las cajas de ahorros no acaba ahí. Y no sólo porque el futuro presidente de la entidad se llame Rodrigo Rato. Fuentes dignas de crédito dan por seguro que José Ricardo Martínez, secretario general de UGT-Madrid, se sentará en el consejo de administración de la caja. Martínez, un sindicalista que tampoco tiene experiencia alguna en una entidad financiera, saltó a la primera página de la actualidad hace poco más de un mes, cuando en el transcurso de un mitin aconsejó al gobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, que se fuera a su ‘puta casa’. Ayer no fue posible conocer la posición oficial de UGT-Madrid.
La entrada de José Ricardo Martínez en el consejo de administración de Caja Madrid –ahora UGT tiene un representante- formaría parte del acuerdo global alcanzado en el verano por el Partido Popular con los partidos y formaciones de izquierda, que de esta manera se garantizarían una representación suficiente en el consejo de la cuarta entidad financiera del país.
Políticos y ex políticos
La caja está hoy gobernado por políticos, ex políticos y/o compañeros de viaje de todas las tendencias, aunque con una infrarreresentación del PSOE y de UGT, que no se sumaron en su día a la mayoría que reeligió a Miguel Blesa. En esta ocasión, sin embargo, ambas organizaciones cuentan con ampliar su representación, lo que obligaría a Rato a aumentar el número de miembros de consejo de administración (ahora son 21), lo cual no estaría bien visto por el Banco de España.
En este sentido, y según fuentes solventes, el Partido Socialista de Madrid ya se habría garantizado que uno de sus dirigentes, Jorge Gómez (antiguo jefe de gabinete de Txiki Benegas), accediera a una de las vicepresidencias. En este caso, Rato tendría que aumentar el número de vicepresidentes. Uno de ellos, Estanislao Rodríguez-Ponga, forma parte de la mayoría popular, mientras que el segundo, el economista José Antonio Moral Santín, es cuestionado por algunos de sus correligionarios.
Así las cosas, el ex vicepresidente Rato está intentando hacer su particular sudoku en Caja Madrid, toda vez que algunas organizaciones quieren elevar o al menos mantener su representación. Algo que hoy por hoy sólo se puede conseguir aumentando el número de vocales del consejo de administración. Los contactos en estos días están abiertos, pero como dicen fuentes conocedoras del proceso de negociación, el margen de maniobra de Rato es muy estrecho.Dar un consejero más a una de las partes significa quitárselo a otra, y eso puede reabrir las negociaciones.
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