Informe Compass de Barclays Wealth
La hora de la verdad para Europa: cuatro salidas para la crisis de deuda soberana
La fórmula para resolver el problema pasa por una verdadera integración fiscal de los miembros de la eurozona
25/10/2011 - 07:55
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Los expertos de Barclays descartan un futuro del euro catastrófico con una debacle financiera o miembros de la euro zona de la divisa común. “Nuestro análisis nos lleva a pensar que Europa saldrá adelante a trancas y barrancas”, afirma Aaron Gurwitz, director de Inversión de Barclays Wealth.
Con la vista puesta en la cumbre del próximo miércoles, Barclays Wealth plantea cuatro escenarios posibles para la crisis de deuda soberana en Europa desde el total respaldo al pasivo financiero de los países hasta el impago desordenado de Grecia. Lo más probable para Gurwitz, autor del informe ‘¿Sobrevivirá el euro?’, es que se alcancen medidas de urgencia para que cada vez que “la situación amenace con arrastrar a la quiebra a un amplio número de bancos, los responsables políticos se las arreglarán para encontrar la forma de aliviar la presión temporalmente, y de ese modo, paso a paso, la zona euro se irá acercando hacia una unión fiscal más perfecta”.
En este escenario, Grecia, Portugal e Irlanda seguirán reduciendo el déficit pero en menor medida que lo exigido por la Troika, aunque se mantendrán los fondos de rescate. El analista confía en que se tomaran nuevas medidas para evitar el desastre; pero las dudas persistirán por el estancamiento del crecimiento económico. Las autoridades europeas evitarán el contagio a Italia y España con el apoyo del BCE y después con el Fondo Europeo de Estabilidad Financiera (FEEF) cuando asuma el papel de prestamista.
Las consecuencias de este escenario tendrán un ligero impacto negativo en el euro y mayor en los activos con mayor riesgo. En renta fija, la deuda alemana continuará siendo un activo refugio con los tipos en mínimos y la deuda periférica aumentando el diferencial.
El siguiente escenario al que otorgan mayor posibilidades que se produzca varía en que se ponga en marcha el FEEF. La puesta a punto no significa la solución a los problemas. Los países rescatados seguirán sin cumplir las exigencias de déficit pero recibirán la ayuda financiera. “El problema de fondo continúa sin resolverse y la amenaza de un eventual impago por parte de los deudores soberanos de la zona euro mantendrá a los mercados”. El euro saldrá ligeramente reforzado y el BCE volverá subir los tipos.
El mejor escenario posible sería la resolución definitiva del problema que pasa por una verdadera unidad fiscal en Europa pasando por la fórmula de los Eurobonos. Aunque las probabilidades son escasas, un 10% otorga el autor, se produciría un fuertes repunte de riesgo con un buen comportamiento de activos de riesgo.
Menos posibilidades ve Gurwitz, un 5%, en un final desastroso con la caída en impago de Grecia de manera descontrolada. “Los bancos podrían negarse a prestarse dinero entre sí sin garantías y, al no existir suficiente colateral fiable en el mundo con el que respaldar el crédito interbancario, el sistema financiero internacional podría paralizarse” describe. La economía mundial caería en una segunda gran depresión con abultadas pérdidas en todas las inversiones a excepción del oro y la deuda pública de máxima calidad.
De todas formas, el analista apuesta por el escenario central. “Esperamos que no haya un desenlace a corto plazo”. El crecimiento económico será la clave para un final feliz del euro, así como, la evolución de los países hacia una integración fiscal más sólida.
En este escenario, Grecia, Portugal e Irlanda seguirán reduciendo el déficit pero en menor medida que lo exigido por la Troika, aunque se mantendrán los fondos de rescate. El analista confía en que se tomaran nuevas medidas para evitar el desastre; pero las dudas persistirán por el estancamiento del crecimiento económico. Las autoridades europeas evitarán el contagio a Italia y España con el apoyo del BCE y después con el Fondo Europeo de Estabilidad Financiera (FEEF) cuando asuma el papel de prestamista.
Las consecuencias de este escenario tendrán un ligero impacto negativo en el euro y mayor en los activos con mayor riesgo. En renta fija, la deuda alemana continuará siendo un activo refugio con los tipos en mínimos y la deuda periférica aumentando el diferencial.
El siguiente escenario al que otorgan mayor posibilidades que se produzca varía en que se ponga en marcha el FEEF. La puesta a punto no significa la solución a los problemas. Los países rescatados seguirán sin cumplir las exigencias de déficit pero recibirán la ayuda financiera. “El problema de fondo continúa sin resolverse y la amenaza de un eventual impago por parte de los deudores soberanos de la zona euro mantendrá a los mercados”. El euro saldrá ligeramente reforzado y el BCE volverá subir los tipos.
El mejor escenario posible sería la resolución definitiva del problema que pasa por una verdadera unidad fiscal en Europa pasando por la fórmula de los Eurobonos. Aunque las probabilidades son escasas, un 10% otorga el autor, se produciría un fuertes repunte de riesgo con un buen comportamiento de activos de riesgo.
Menos posibilidades ve Gurwitz, un 5%, en un final desastroso con la caída en impago de Grecia de manera descontrolada. “Los bancos podrían negarse a prestarse dinero entre sí sin garantías y, al no existir suficiente colateral fiable en el mundo con el que respaldar el crédito interbancario, el sistema financiero internacional podría paralizarse” describe. La economía mundial caería en una segunda gran depresión con abultadas pérdidas en todas las inversiones a excepción del oro y la deuda pública de máxima calidad.
De todas formas, el analista apuesta por el escenario central. “Esperamos que no haya un desenlace a corto plazo”. El crecimiento económico será la clave para un final feliz del euro, así como, la evolución de los países hacia una integración fiscal más sólida.
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