Algunas, como Torrenova, sicav ligada a la familia March, han confiado su futuro a la renta fija nacional, con la deuda española como clara apuesta, lo que les ha permitido concluir 2013 con un espectacular patrimonio de 744,54 millones y una rentabilidad del 6,17%, cifra importante, pero muy inferior al 32,56% conseguido por Soixa, donde participan los Hernández-Calleja, cuya apuesta ha sido diametralmente distina, al haber confiado el 77,4% de su cartera a renta variable extranjera.
Esta dispar filosofía hace que cuando se mira el detalle de las tres principales posiciones de cada uno de estos vehículos se compruebe cómo Torrenova tiene dos bonos de deuda española y un repo de Banca March; frente a las acciones de BMW y Wolters Kluwer que componen dos de las tres principales posiciones de Soixa que, no obstante, tiene como su principal inversión individual un repo del Gobierno de España.
Y es que, dentro de los puntos que tienen en común las carteras de las 15 mayores Sicavs españolas, destaca por encima de todas las cosas, la hasta hace poco denostada deuda española.
De hecho, salvo excepciones como Morinvest (Alicia Koplowitz), Soandres(Sandra Ortega), Elitia (familia Gallardo), Allocation y Chart (familia Del Pino), todos los grandes patrimonios del país tienen a la deuda pública entre sus tres principales inversiones, ya sea con un bono, unas letras, un repo o con opciones más exóticas como el fondo del déficit del sistema eléctrico o el de reestructuración bancaria.
El caso de Cartera Mobiliaria, la sicav controlada por Banco Santander, es especialmente significativo, ya que sus principales apuestas son todo un ejercicio de inversión patria.
La entidad presidida por Emilio Botín ha elegido un repo del Gobierno de España, unas letras del Tesoro y la siempre íbera Telefónica como sus tres principales posiciones, hasta el punto de que representan una tercera parte de su cartera. Una apuesta de éxito, ya que este vehículo ha conseguido una revalorización del 14,68%.
También son bastante patrióticas las tres principales posiciones de PBP Cartera Premium, que ha confiado a unos bonos de Ibercaja, un depósito de su dueño, Banco Popular, y unos bonos del FROB más del 40% de los 150 millones de patrimonio que tiene el vehículo.
Frente a este perfil conservador, está el más agresivo del dueño de Pronovias, Antonio Palatchi, quien ha dejado clara su preferencia por la renta variable, sobre todo extranjera, frente a cualquier otro activo, en las dos sicavs que controla, Herprisa y Gesprisa, que juntas suman 335 millones de euros.
De hecho, estos dos vehículos son los únicos entre los grandes que al cierre del pasado ejecicio no tenían invertido ni un sólo euro en depósitos, fondos u otro tipo de institución de inversión colectiva.
La otra cara de la moneda es Ram Bhavnani, el enigmático inversor indio, que ha logrado una rentabilidad del 8,09% en su sicav Kalyani, con una cartera donde donde el 45% está invertido en renta fija extranjera, y cuyas principales posiciones son los siempre conservadores depósitos.
Sandra Ortega, heredera de la fallecida Rosalía Mera, destaca por su confianza en los productos de JP Morgan, entidad que tiene encomendada su sicav Soandres, del mismo modo que los dos productos gestionados por March (Torrenova y Cartera Bellver) tienen como principal posición un repo de la entidad mallorquina.
En el caso de Alicia Koplowitz, la empresaria subraya su apuesta por Acerinox, donde es una de las accionistas de referencia, ya que la siderúrgica es la principal apuesta de Morinvest y constituye, junto a Telefónica, la única presencia de la sicav en renta variable nacional. 
No obstante, la segunda mayor entidad de España continúa demostrando su apetito por los fondos extranjeros, una estrategia que comparte con Elitia (la antigua Agrippa sicav, tradicionalmente relacionada con la familia Gallardo) y con varias de las entidades ligadas a los hermanos Del Pino, como Allocation.