CARTERAS DE INVERSIÓN PARA COMENZAR EL AÑO
¿Arriesgado, conservador...? Los fondos que Deutsche Bank recomienda para cada perfil
Fondos de inversión para comenzar el año. Cada perfil de cliente es un mundo y los selectores de fondos trabajan a pleno rendimiento para identificar productos que se adapten a las distintas filosofías. Deutsche Bank, dentro de su estrategia de arquitectura abierta, ha desvelado cuáles son los mejores fondos para comenzar el año en cinco categorías distintas en relación con la predisposición al riesgo de los clientes. Estas son: arriesgada, dinámica, moderada, conservadora y muy conservadora.
La cartera arriesgada estrena el año compuesta por siete fondos de cinco gestoras internacionales diferentes. En 2014, esta selección logró en conjunto una rentabilidad del 13%, que se amplía al 61% en los últimos tres años y al 106% desde que se compuso allá por 2004. En ella hay tres fondos de bolsa estadounidense, dos de europea, otros dos de acciones asiáticas y uno global. La volatilidad que imprime al mercado los comicios griegos ha hecho que los gestores rebajen el peso de la renta variable del Viejo Continente. No obstante, se mantiene la apuesta por EEUU y las bolsas asiáticas en un entorno de pocas oportunidades en la renta fija y, concretamente, en los bonos periféricos.
(Cartera arriesgada Deutsche Bank)
En cuanto a la selección para inversores "dinámicos", está formada por doce fondos de inversión de nueve gestoras diferentes. La rentabilidad lograda el pasado año se situó en el 12% y se amplió al 52% a tres años y al 106% desde su lanzamiento en 2002. Dentro de esta selección de productos, se mantienen cuatro fondos de renta fija (dos de ellos invierten en bonos soberanos europeos, otro en deuda global y el último en títulos corporativos. El resto son siete fondos de renta variable con exposición geográfica diversificada (EEUU, Asia y Europa) y un fondo de fondos gestionado por Deutsche Bank.
(Cartera dinámica Deutsche Bank)
La cartera de fondos moderada de Deutsche Bank contempla la inversión en doce productos de ocho gestoras, seis de renta fija (soberana y corporativa) y siete de renta variable de todas las regiones geográficas. Un 46% del patrimonio está invertido en bolsa, un 36% en deuda y un 18% en activos monetarios. La rentabilidad acumulada a lo largo de 2014 se situó en el 8,5%para el conjunto de la cartera, una cifra que se amplía al 36% en los últimos tres años y al 79,5% desde su composición.
(Cartera moderada Deutsche Bank)
Para los inversores conservadores, la entidad germana cuenta con una cartera de siete fondos: tres de renta fija europea a corto plazo, uno de renta fija global, otro de renta fija corporativa, un fondo de fondos y dos de renta variable (europea y americana). Un 54% de las posiciones inversoras están referenciadas a títulos de deuda, un 20% a acciones y un 27% a activos monetarios. El objetivo del fondo es lograr mayor rentabilidad que la de las Letras del Tesoro, por lo que contempla exposición a activos de renta variable. En 2014 la rentabilidad se situó en el 4,5% y se eleva hasta el 24% a tres años y al 54% desde el lanzamiento de la misma.
(Cartera conservadora Deutsche Bank)
El universo inversor también contempla una selección de seis fondos para aquellos inversores con mayor aversión al riesgo. Es la cartera "muy conservadora" de la entidad alemana que cuenta con cinco fondos de renta fija (tres de ellos europea a corto plazo, uno corporativa y otro global) y un fondo de fondos. La exposición a activos de renta variable apenas asciende a un 2% con posición predominante en activos monetarios (65%) y de renta fija (33%). El rendimiento en 2014 alcanzó el 1,7% y se amplía al 8,9% a tres años y al 23% desde su inicio.
(Cartera muy conservadora Deutsche Bank)
Fondos de inversión para comenzar el año. Cada perfil de cliente es un mundo y los selectores de fondos trabajan a pleno rendimiento para identificar productos que se adapten a las distintas filosofías. Deutsche Bank, dentro de su estrategia de arquitectura abierta, ha desvelado cuáles son los mejores fondos para comenzar el año en cinco categorías distintas en relación con la predisposición al riesgo de los clientes. Estas son: arriesgada, dinámica, moderada, conservadora y muy conservadora.
La cartera arriesgada estrena el año compuesta por siete fondos de cinco gestoras internacionales diferentes. En 2014, esta selección logró en conjunto una rentabilidad del 13%, que se amplía al 61% en los últimos tres años y al 106% desde que se compuso allá por 2004. En ella hay tres fondos de bolsa estadounidense, dos de europea, otros dos de acciones asiáticas y uno global. La volatilidad que imprime al mercado los comicios griegos ha hecho que los gestores rebajen el peso de la renta variable del Viejo Continente. No obstante, se mantiene la apuesta por EEUU y las bolsas asiáticas en un entorno de pocas oportunidades en la renta fija y, concretamente, en los bonos periféricos.
(Cartera arriesgada Deutsche Bank)
En cuanto a la selección para inversores "dinámicos", está formada por doce fondos de inversión de nueve gestoras diferentes. La rentabilidad lograda el pasado año se situó en el 12% y se amplió al 52% a tres años y al 106% desde su lanzamiento en 2002. Dentro de esta selección de productos, se mantienen cuatro fondos de renta fija (dos de ellos invierten en bonos soberanos europeos, otro en deuda global y el último en títulos corporativos. El resto son siete fondos de renta variable con exposición geográfica diversificada (EEUU, Asia y Europa) y un fondo de fondos gestionado por Deutsche Bank.
(Cartera dinámica Deutsche Bank)
La cartera de fondos moderada de Deutsche Bank contempla la inversión en doce productos de ocho gestoras, seis de renta fija (soberana y corporativa) y siete de renta variable de todas las regiones geográficas. Un 46% del patrimonio está invertido en bolsa, un 36% en deuda y un 18% en activos monetarios. La rentabilidad acumulada a lo largo de 2014 se situó en el 8,5%para el conjunto de la cartera, una cifra que se amplía al 36% en los últimos tres años y al 79,5% desde su composición.
(Cartera moderada Deutsche Bank)
Para los inversores conservadores, la entidad germana cuenta con una cartera de siete fondos: tres de renta fija europea a corto plazo, uno de renta fija global, otro de renta fija corporativa, un fondo de fondos y dos de renta variable (europea y americana). Un 54% de las posiciones inversoras están referenciadas a títulos de deuda, un 20% a acciones y un 27% a activos monetarios. El objetivo del fondo es lograr mayor rentabilidad que la de las Letras del Tesoro, por lo que contempla exposición a activos de renta variable. En 2014 la rentabilidad se situó en el 4,5% y se eleva hasta el 24% a tres años y al 54% desde el lanzamiento de la misma.
(Cartera conservadora Deutsche Bank)
El universo inversor también contempla una selección de seis fondos para aquellos inversores con mayor aversión al riesgo. Es la cartera "muy conservadora" de la entidad alemana que cuenta con cinco fondos de renta fija (tres de ellos europea a corto plazo, uno corporativa y otro global) y un fondo de fondos. La exposición a activos de renta variable apenas asciende a un 2% con posición predominante en activos monetarios (65%) y de renta fija (33%). El rendimiento en 2014 alcanzó el 1,7% y se amplía al 8,9% a tres años y al 23% desde su inicio.
(Cartera muy conservadora Deutsche Bank)
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