Canteli planteará dos alternativas a Defensa para decidir si el plan del Bulevar afectará a La Vega
Cuesta niega diferencias en el equipo de gobierno acerca del proyecto e insta a seguir trabajado para «dar la mejor solución a Santullano»
El equipo de gobierno cerró filas ayer en torno al proyecto para el acceso a Oviedo por la antigua autopista 'Y'. Tras las declaraciones del primer teniente de alcalde, Nacho Cuesta, en el pasado Pleno, cuando negó rotundamente que uno de los proyectos fuese «una autopista» que atravesaría la nave de Cañones de Ildefonso Sánchez del Río, el alcalde, Alfredo Canteli, aplazó la decisión final acerca del nuevo Bulevar a una futura reunión con el Ministerio de Defensa. Cita a la que el regidor, afirmó, planteará «dos propuestas»: «Una de ella es tocar La Vega, otra es no tocarla», indicó.
Canteli fió para largo la definición del proyecto que viene heredado del mandato anterior y que el actual equipo de gobierno rechazó de plano. Primero se llegó a un acuerdo con los arquitectos de la UTE Bosque y Valle para la rescisión del contrato. Mientras duraban las negociaciones, Infraestructuras contrató unas infografías preliminares para estudiar alternativas al diseño del Bulevar y, en último término, para no perder parte de la financiación europea, se encargó a los técnicos de la casa que proyectaran dos tramos. Uno de ellos afectará a la rotonda de la Cruz Roja; el otro es el acceso más al norte. Quedaría, por razones de propiedad, resolver el tramo intermedio, el que afecta a la factoría.
«Es una idea en la que tenemos que trabajar mucho antes de ir al ministerio», avanzó el alcalde. «No hay prisa, tan pronto como podamos iremos por allí con las propuestas, a ver qué dice el ministerio, que son los propietarios», agregó.
Junto al regidor, el primer teniente de alcalde, Nacho Cuesta, reiteró que «evidentemente no es intención atravesar La Vega con una autopista», sostuvo en alusión a la polémica suscitada en el pasado Pleno, cuando defendió la idea «disruptiva» de aprovechar el taller de Cañones como puerta de entrada. Ayer, el concejal de Urbanismo e Infraestructuras limitó la actuación a «un ámbito concreto» y «perimetral» de la factoría sin citar la nave de Sánchez del Río. Preguntados por si existen disensos en el seno del equipo de gobierno acerca del proyecto, Cuesta lo negó de manera rotunda. «No hay disensos, vamos a trabajar de manera conjunta para dar la mejor solución a San Julián de los Prados y en eso vamos a seguir», sostuvo el portavoz.
De doce a cien
Los planes municipales para no perder los 10 millones de euros de fondos europeos pasan por ir encajando lo que antes era una actuación unitaria en varios proyectos. Infraestructuras apuesta por iniciar los trabajos con la remodelación de la glorieta de la Cruz Roja, que dejará de ser una rotonda circular para convertirse en un vial perimetral para el conjunto edificatorio desde Amparo Pedregal hasta casi Martínez Vigil. La otra alternativa es iniciar los trabajos en el parque lineal diseñado como complemento de la movilidad sostenible en todo el entorno. Asimismo, está previsto que el puente de Ángel Cañedo se sustituya por una glorieta a nivel. Todo ello antes de llegar al nudo gordiano de la separación de la autopista, de los doce metros actuales junto a San Julián de Los Prados a los cien que se conseguirían atravesando la fábrica de armas. Las dos primeras actuaciones están pendientes de licitación y revisión por parte de Hacienda. Para la última también habrá que ir a Madrid.
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