«En Somos Oviedo no tiene que sobrar nadie, no me planteo más dimisiones»
El edil trata de cerrar la crisis abierta en la formación tras la dimisión de Anabel Santiago y sus críticas a Ana Taboada | Ignacio Fernández del Páramo, concejal y coordinador de Somos Oviedo
Ignacio Fernández del Páramo, coordinador de Somos Oviedo y figura designada por el partido para devolver las aguas a su cauce tras la ruptura interna que finalizó con la dimisión de Anabel Santiago, aguarda los últimos trámites burocráticos para recuperar el acta de concejal. Sustituirá a Santiago en el Pleno y tendrá que mediar tanto dentro como fuera de la organización para devolver, en ambas esferas, la confianza en un grupo municipal que debe recomponerse de cara al próximo ciclo electoral.
-¿Cómo fue el proceso en Somos desde que Anabel Santiago plantea sus quejas hasta la dimisión?
-Creo que ya se han dado las respuestas por ambas partes. En ese caso, se me escogió a mí de forma unánime en la organización para intentar dirimir y evitar en este caso la dimisón de Anabel a la que, por otro lado, quiero reconocer públicamente todo el trabajo que ha hecho durante este año largo que ha estado en la organización.
-Al final le fue imposible recomponer la situación y acaba con su dimisión.
-Son decisiones personales. Cada uno tiene que decidir hasta dónde llega. Como organización estamos hablando internamente, es necesaria una reflexión: tenemos que ser honestos y pensar que tenemos una responsabilidad colectiva para con la ciudad. Somos los únicos 3 concejales que vamos a plantar cara a los otros 24 en muchos temas y tenemos que estar a la altura de esa responsabilidad.
-Al hilo de lo que dice ha parecido que les importaba más lo que pasaba dentro de Somos que la labor afuera.
-Como cualquier colectivo que tiene sus dinámicas internas. Somos una organización que pudo tener la Alcaldía y que gobernó. En ese proceso de transformación en el que estamos sumidos, y es una parte de nuestra forma de ser, decidimos que nadie iba a vivir de la política. Fuimos una agrupación de electores antes que un partido y eso dice mucho de nuestra forma de ser.
-¿Qué futuro le espera a Somos?
-Tenemos una gran base social, gran capital humano y la energía y la capacidad de revitalizar la sociedad ovetense. Es lógico que pasemos procesos de los que tenemos que aprender y que no se pueden cerrar de la noche al día, pero me quedo con aprender a trabajar en positivo para oponerse y luchar contra el desastre que esta gente -PP y Ciudadanos- está haciendo en el Ayuntamiento.
-¿Qué papel va a jugar en el grupo? Se ha hablado de la portavocía.
-En ese sentido no me preocupan las dinámicas internas, las resolveremos. Ana, Rubén y yo nos conocemos mucho y desde hace mucho tiempo. Piense que somos tres personas que no van a estar ahí dentro de tres años.
-Se lo pregunto de otra manera, ¿deberían Taboada o Rosón dimitir antes de agotar el mandarto?
-En esta organizción no sobra nadie ni tiene que sobrar nadie, es una cuestión que ni me planteo. Tenemos trabajo por delante para trasladar el conocimiento acumulado estos años a otros compañeros. La información es poder y soy de los que piensa que el poder acaba corrompiendo. Tenemos que saber trasladar esas herramientas aprendidas a los compañeros que les toque hacer la labor en el futuro.
-Vuelve al Ayuntamiento en la oposición y con muchos proyetos que lideró en marcha, modificados o eliminados.
-Este año fuera te permite visibilizar ciertas cosas. Tenemos un gobierno bipartito del que creo que la ciudadanía se está dando cuenta del error de ponerlos ahí. Solo se dedican a poner parches sin visión alguna de la ciudad. No tienen modelo ni idea, van parcheando. Creo que parchear es el verbo que mejor les define. Nosotros les dejamos una bateria de grandes proyectos de ciudad y no son siquiera capaces de dar el paso adelante por el beneficio de la ciudad, no de unos ni de otros, de la ciudad. Viven del corto plazo electoral cuando para planificar hay que mirar a 30, 40 o 50 años. Son sectarios y así perjudican a la ciudanía, cuando los que nos toca estar ahí solo somos eslabones que tienen que asumir lo que dejan los de antes y hacerlas avanzar. Le pongo el ejemplo del campo San Francisco, no era una idea nada radical sino una intervención para diginificar el espacio. A cambio cambian los bancos y ponen un mástil.
-El proyecto de bulevar era complicado.
-Es que era el proyecto más importante al que se enfrentaba Oviedo en toda su historia. Respondía a la pregunta de cómo solucionar esta herida que divide a a la mitad la ciudad. Que era muy grande, tenía que serlo. Que íbamos a tardar diez años, vale. Pero si cada uno pone el ladrillo que le toca al final tendríamos el muro.
-¿Está en contacto con los arquitectos de Bosque y Valle?
-No, no procede.
-Se lo pregunto por la rescisión del contrato.
-No se rescindió, es un cierre en falso que está costando dinero a los ciudadanos, cuando había un proyecto que pretendía solucionar los problemas de los barrios y de un monumento de la humanidad que tiene una autopista al lado. Vale, una calle desde 2006 pero si huele, sabe, respira canta como una autovía, cambiémosla. Es de cajón.
-Regresa con ganas.
-Es todo así y por puro sectarismo. Otro ejempo, dejamos lista la compra por 800.000 euros de una parcela que va desde El Asturcón hasta los monumentos prerrománicos para hacer un parque. Llevará tiempo, no será de unos ni de otros, pero hay que hacerlo. Como peatonalizar el centro, tiene que hacerse como en el resto de ciudades de Europa y no solo esas cuatro calles de ahí. Tienen ese doble discurso de querer ser modernos, pero no lo soy y para eso me busco excusas.
-¿Qué le parece el diseño para la nave de Cañones?
-Es tratarnos de tontos. Cualquier persona con un conocimiento mínimo sabe que La Vega necesita un plan de catalogación, un cambio de planeamiento. Tío, eso no lo vas a hacer, es una maniobra de distracción. Y ya como volumen de proyecto, es como comparar la trilogía de 'El Señor de los anillos' con una tribuna en un periódico. Así, con todo y eso que soy autocrítico, nosotros cometimos muchos errores y hay cosas que por semanas, días o meses no se llegaron a ejecutar, pero no pueden quedar paradas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario