El Principado ha hecho balance desde la puesta en marcha del Ingreso Mínimo Vital y ha señalado que los ayuntamientos y la Consejería de Derechos Sociales y Bienestar han recibido la autorización de más de 14.700 beneficiarios del salario social para pasar a percibir el ingreso mínimo vital, lo que representa el 66% del total. Es grupo es el que dio luz verde a que el Gobierno central gestione directamente su solicitud de la renta estatal.Los perceptores que no han dado su consentimiento en este período deberán realizar ahora la tramitación a título particular en los canales habilitados por el Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS).
Con todo Asturias ha recordado que «todas las personas que cobran la prestación autonómica social seguirán percibiéndola hasta que se resuelvan sus solicitudes». Antes de la puesta en marcha de la prestación estatal, el Salario Social de Asturias llegaba a más de 22.000 familias. Aunque el IMV tiene en determinados casos una cuantía mayor (varía en función de la situación personal y los hijos o dependientes a cargo), la ayuda asturiana es más extensa ya que cubre también a personas con pensiones no contributivas, las mayores de 65 años que vivan solas o las unidades familiares que lleven conviviendo menos de un año. Todos ellos seguirán cobrando el Salario Social asturiano aunque no puedan percibir el IMV.
A través de un comunicado, la Consejería de Derechos Sociales, ha asegurado que el Gobierno asturiano «trabaja intensamente para enviar antes del 15 de septiembre el fichero con los datos de los expedientes que cumplan los requisitos requeridos por el INSS. Este es el plazo otorgado por el gobierno estatal para que las solicitudes sean aceptadas y se tramiten con efecto retroactivo de 1 de junio. La Administración central dispone de tres meses para resolver los expedientes recibidos».
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