Naranco olvidado y ...precioso*****

«Vivir aquí es vivir en un paraíso pequeñín» Los vecinos de Llubrió reivindican mejores comunicaciones ya que «apenas no hay cobertura en toda la zona» COVADONGA DEL NERO OVIEDO. Lunes, 20 diciembre 2021, 00:27 En dirección a El Escamplero, continuando hacia Loriana, un pequeño cartel advierte de la existencia de Llubrió. Un pequeño pueblo que cuenta con en torno a doce habitantes, «de toda la vida», vecinos y amigos entre ellos. Allí, se dedicaron durante toda su vida a la ganadería y la agricultura y «aunque aún seguimos teniendo animales, la gente ya trabaja fuera del pueblo», en palabras de uno de sus vecinos, Fidel Fernández. En su caso, cuenta con un toro de 1.500 kilos que trata con mimo y que vive junto a una vaca y su ternero en la cuadra contigua a su vivienda. «Vivi aquí es vivir en un paraíso pequeñín», asegura este vecino. Eso sí, como todos tienen sus reivindicaciones. La primera es en lo que respecta a un antiguo parque, ubicado antes de llegar al pueblo. «En 2005, eliminaron los columpios y dejaron, exclusivamente, una canasta en la gravilla», critica Fernández. «Ni se puede jugar al baloncesto ahí ni nada», De hecho, asegura que «se nos dijo que era porque no había niños», pero no es justificación suficiente para él. «Si no hay niños, traed un edificio prefabricado y ponednos un centro social aquí, para que puedan ir los mayores a reunirse tranquilamente», pide al Ayuntamiento. Además, sienten que «esta zona del Naranco está abandonada». «Hablan a menudo de los trabajos en el monte pero aquí no hacen absolutamente nada», critican varios vecinos. Pero, sin duda, la petición más urgente es la de las comunicaciones. El pueblo apenas cuenta con cobertura, provocando que «no podamos comunicarnos». En un momento en el que todos los trámites se realizan de manera 'online', los vecinos reclaman «mejor internet». Además de la falta de cobertura, no hay fibra óptica y la comunicación por cable «va muy lenta». «Necesitamos que nos solucionen este problema; es muy serio». Además, estos vecinos que cuentan con sus, mayores o menores, plantaciones de frutas y verduras, lamentan que no se «tomen medidas para controlar los jabalíes». Estos animales campan a sus anchas y, en muchas ocasiones, «acaban con las fabas y el maíz», en su caso. «Es un problema muy gordo porque al final perdemos todo lo que cultivamos». Eso sí, si de algo están orgullosos y contentos es de la línea de autobús que llega al pueblo. La línea O de TUA, sale desde la plaza América cada dos horas. Este autobús pasa por los estrechos caminos -tanto es así que los vecinos, conocedores de los horarios, esperan para salir con su coche por no cruzarse con él en estas carreteras-en un recorrido que dura en torno a cuarenta y cinco minutos para llegar desde estos paraísos rurales en pleno concejo de Oviedo hasta el centro de la ciudad, donde realizan todos los