OVIEDO
La única encuesta válida es la que sale de las urnas. Los indecisos, las corrientes de opinión y el perfil de cada candidato provocan que la incertidumbre sea la nota predominante en cualquier elección española desde que el bipartidismo entró en crisis. La cercanía de las citas electorales -dentro de un mes se celebran las europeas, autonómicas y municipales- invita a las cábalas, a la especulación y a la extrapolación de datos de unos comicios a otros, pero esas cifras deben ser analizadas con cautela. Con todo, hay tres lecturas que pueden extraerse de la forma de votar de los ovetenses el 28A: la derecha -PP, Ciudadanos y Vox- sumaría una amplia mayoría en votos que no se traduce exactamente en escaños; los dos bloques ideológicos rozarían la mayoría, con una ligera ventaja para los conservadores; y Nacho Cuesta, candidato de Ciudadanos, sería la llave para formar gobierno.
El primer elemento a tener en cuenta es que a las generales se han presentado dos coaliciones que en las municipales van por separado. Se trata de PP-Foro y Unidas Podemos-IU. Este es un factor clave que condiciona cualquier análisis, ya que resulta imposible conocer exactamente los apoyos con los que cuenta cada uno. Además, la participación también será otro condicionante. En las generales votó el 75,80% de los ovetenses con derecho, cinco puntos más que hace tres años.
Con estos dos matices, la extrapolación de votos dejaría el siguiente reparto. El PSOE sería el partido más votado y pasaría de tercera fuerza a la más votada gracias a los 36.447 apoyos del domingo, que le darían ocho concejales. De esta forma, adelantaría a Somos como el más votado dentro de los actuales socios del tripartito.
Pese al crecimiento de los socialistas, la suma de izquierdas se quedaría por debajo de los 14 concejales que se necesitan para gobernar. Unidas Podemos-IU (19.257 votos) sumaría cuatro concejales, y aquí es imposible saber los apoyos con los que cuenta cada uno. El histórico de IU en la ciudad invita a pensar que la coalición se quedaría, al menos, con uno, aunque está por ver de dónde saldrían esos sufragios. Un razonamiento lógico invita a pensar que esos apoyos los perderían el PSOE y Somos, por lo que la suma de los tres no serviría para revalidar el tripartito.
Sorpaso en la derecha
Los partidos de la derecha sumarían una victoria contundente en votos. Los 27.089 de PP-Foro les darían 6 concejales; los 26.798 de Ciudadanos serían 5 concejales y los 18.897 de Vox 4 concejales. En total, 15 representantes, mayoría clara, pero el baile de cifras entre ellos podría provocar que Ignacio Cuesta, candidato de Ciudadanos, sea la clave para formar gobierno.
PP-Foro obtuvo en las generales 291 votos más que Ciudadanos, y eso, por la ley D´Hont, le daría solo un concejal más. Al dividir los votos de PP-Foro, y aun en el peor escenario posible para los foristas, esta situación cambiaría. En caso de que se consumase ese sorpaso en la derecha, Cuesta aspiraría a ser regidor con el apoyo de PP y Vox. En caso de que PP se mantenga como primer partido conservador, el aspirante de la formación naranja tendría la capacidad de decidir a quién apoya, a populares o socialistas, por lo que también tendría la llave del gobierno.
También es llamativo el apoyo de Vox en la capital. Con los datos de ayer, sumaría cuatro concejales. Además, se quedó a solo 360 apoyos de Unidas Podemos-IU. Al acudir esa coalición por separado en las locales, el partido que lidera Cristina Coto en Oviedo podría incluso sumar 5 concejales e igualar a PP. En cualquier caso, su papel también sería determinante para que gobierne la derecha.