El proyecto del Bulevar prevé que el tráfico se reduzca casi a la mitad en la Cruz Roja
La demora en hora punta en el acceso desde General Elorza a la 'Y' bajaría de los nueve minutos actuales a menos de veinte segundos
Una mejora espectacular, al menos sobre el papel. La tercera versión del proyecto del Bulevar de Santullano prevé que el tráfico en la glorieta de la Cruz Roja se reduzca prácticamente a la mitad tras la ejecución de las obras. En concreto, los casi 4.000 vehículos que la atraviesan en hora punta, entre las ocho y las nueve de la mañana, hoy en día; se verían reducidos a tan solo 2.336 una vez completado el desarrollo de la reordenación y se construyan las otras tres glorietas a nivel previstas.
Los datos, explican los redactores del proyecto, son una estimación y una extrapolación de los que ha recabado el Ayuntamiento para la redacción del plan de Movilidad, que contempla una serie de medidas disuasorias del uso del vehículo privado y de potenciación del transporte público, que llevarían a la prohibición del primero en todo el centro de la ciudad y no solo, como hasta ahora, en El Antiguo. Esas medidas, junto con la disposición de estacionamientos disuasorios previstos en el documento de movilidad, permitirían que los más de 22.730 vehículos que atraviesan la glorieta de media cada día, incluyendo festivos, se reduzcan a casi la mitad.
De hecho, la caída prevista del tráfico supondrá una notable mejora del funcionamiento de la rotonda. En la actualidad, por los flujos de tráfico que recibe es una intersección al borde del colapso en horas punta, con un nivel de servicio muy bajo. Los tiempos de demora para los vehículos que proceden de General Elorza y quieren salir hacia la 'Y' a través del futuro Bulevar superan los nueve minutos, que son casi cuatro para los que se dirigen hacia Campo de los Patos. La intensidad del tráfico de General Elorza tiene, además, un efecto muy negativo en el acceso a Oviedo desde el Norte. Los cálculos arrojan tiempos superiores a los 233 segundos para los flujos en direccción a la plaza del General Ordóñez.
Mejora y peatones
La reducción de la intensidad del tráfico prevista cambiaría por completo esta situación, que los redactores del proyecto admiten que puede ser algo mejor que la que arrojan sus cálculos al estar «semaforizada» la rotonda. Únicamente, el acceso a la glorieta desde General Elorza mantendría tiempos de espera próximos a los 20 segundos, mientras que en el resto de accesos la demora se quedaría en el entorno de los 10 u 11 segundos. El tráfico de la glorieta de General Elorza, explican los redactores, impide llegar a la perfección, pero, aún así «se puede considerar que sigue siendo óptimo, más si se compara con el nivel de servicio con que cuenta en la actualidad». Es más, las previsiones podrían mejorarse con una regulación a través de semáforos «teniendo en cuenta los movimientos que se realizan según los datos del plan de Movilidad».
El rediseño del enlace y la redacción prevista del tráfico permitirán además recuperar la movilidad peatonal en el entorno de la intersección. Frente a la situación actual, en la que los pasos de peatones que salvan, respectivamente, la antigua 'Y', General Elorza, Víctor Chávarri y el tramo que va a Adelantado de La Forida, obligan a grandes desvíos respecto al itinerario ideal; tras las obras, los recorridos se minimizarían en longitud, aproximándolos a la glorieta y se favorecería su paso con una adecuada regulación semafórica. Además, en esta glorieta se iniciaría el carril bici que recorre todo el ámbito.
Las otras tres
El proyecto del Bulevar de Santullano, ahora que el lago es lámina de agua y se han recortado actuaciones e instalaciones para dejar el presupuesto dentro de los límites de los pliegos, es, a grandes rasgos, un gran movimiento de tierras, con rellenos que diluyan la barrera que creó la apertura de la autopista 'Y'. Las nivelaciones permitirán que todas las intersecciones se hagan a nivel. Los puentes de Rubín, la avenida de Atenas o el de Ángel Cañedo desaparecerán para dejar paso a tres nuevas glorietas.
Calcular sus niveles de servicio teóricos no es tán sencillo como en la Cruz Roja. No existen. Así que los redactores toman los datos actuales de tráfico de cada enlace y las extrapolaciones del plan de Movilidad, para establecer su funcionamiento. Los 26.586 vehículos que pasan bajo el puente de Rubín se repartirán en el futuro entre cuatro direcciones, por ejemplo; con salidas hacia la avenida de Roma y el HUCA, para la que extrañamente solo se estiman 862 circulaciones diarias, o el camino de Rubín y Ventanielles, que doblaría ese tráfico con 1.753 coches al día.
Cálculos similares se establecen para las otras dos rotondas previstas. Más fáciles en el caso del nudo de Ventanielles-avennida de Atenas, que ya permite todos los sentidos de circulación aunque en un nudo tipo diamante de autovía y suma 26.301 circulaciones diarias. En el caso de Ángel Cañedo-Río Dobra serían 24. 023 los coches diarios que utilizarían la futura gloriera, la primera que se hará, según los planes de Urbanismo. Con esas cifras, el nivel de servicio de las tres glorietas una vez completadas las obras sería óptimo, con demoras para todos los accesos inferiores a los diez segundos.
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