viernes, 13 de marzo de 2020

El Calatrava busca...salidas.

El nuevo proyecto del Calatrava apostará por el «ocio familiar» sin «grandes firmas de moda»

El propietario del Modoo del Calatrava, Dilip Khullar (en el centro de la imagen), ayer, antes de entrar al juzgado con sus abogados. / FOTOS: ALEX PIÑA
El propietario del Modoo del Calatrava, Dilip Khullar (en el centro de la imagen), ayer, antes de entrar al juzgado con sus abogados. / FOTOS: ALEX PIÑA

El dueño del Modoo, Dilip Khullar, asiste al juicio contra Burger King, en el que la propiedad aclara sus planes para los que no ha pedido licencia

ALBERTO ARCEOVIEDO.
Faltan poco más de dos semanas para que se cumpla un año del cierre del centro comercial Modoo en el edificio Calatrava. Un periodo convulso tras los muros del gigante blanco de Buenavista en el que, después de la marcha de los principales motores de negocio y de una resolución judicial que permitió solo al Burger King permanecer abierto, poco o nada se ha anticipado del futuro del complejo más allá de un vago plan de remodelación interior e inversiones que aspira a relanzar los 40.000 metros cuadrados de galería comercial diseñados por Santiago Calatrava.
Sin embargo, ayer, durante de la hamburgesería contra el centro comercial, la propietaria del Modoo, Estabona Management, despejó algunas de las incógnitas sobre el futuro del complejo tras los últimos rumores sobre su posible marcha. La nueva estrategia pasará por aprovechar «la ubicación urbana» del Calatrava y convertirlo «en un espacio para el ocio familiar de referencia con comercios, sin grandes firmas de moda, zonas para el entretenimiento familiar, cines, restauración y espacios de diversión infantil», detalló.


Un rumbo distinto al de origen en el que, además, encajaría un nuevo Burger King dentro del apartado culinario. Eso sí, siempre y cuando la hamburguesería abandone finalmente el edificio para que se acometa el rediseño que prevé el fondo inversor.
Esa fue una de las tesis que sostuvo ayer la defensa de Estabona, propietaria del centro comercial Modoo (RPPSE Espacio Oviedo), durante el juicio planteado por Arnicio Restauración, franquiciado de la conocida marca de comida rápida, celebrado en el Juzgado de Primera Instancia número 5 de Oviedo, y en el que estuvo presente el director de la empresa y actual propietario del malogrado centro, Dilip Khullar.
Durante la comparecencia de los testigos en la vista oral, el perito de la parte demandada, el economista y anterior asesor externo de la gerencia desde la empresa JLL, Augusto Arrochella, aseguró que «sí hay un proyecto para el centro comercial», si bien reconoció que no han pedido aún licencia en el Ayuntamiento, por lo que evitó fechas.

Los errores

Arrochella estableció el cuadro de errores que hicieron fracasar el centro, que perdió paulatinamente operadores hasta que, en el último año, solo estuvo arrendado el 20% de la superficie alquilable. «El Modoo era una versión mini de Parque Principado en la que el cliente se perdía, un anti centro comercial con barreras visuales (los ascensores exteriores) y un circuito interior ininteligible», manifestó. «El Modoo ha sido un error por su propia mezcla ecléctica en cuanto a la oferta comercial en el que el cliente se perdía ya desde el aparcamiento y que competía contra el líder en Asturias», expuso.
En ese sentido, subrayó que «el punto de inflexión crítico» del espacio, que ya era deficitario en cuanto a diseño, llegó cuando se fueron las grandes firmas (El Corte Inglés, Primark y H&M). La idea ahora, dijo, es reconvertirlo en un centro de ocio y familia, porque es lo que absorbería, en sus palabras, la clientela dada la población que lo rodea.
Durante la celebración del juicio, la acusación que ejerce Luis Antuña, propietario de la hamburguesería, no dio su brazo a torcer y solicitó el mantenimiento del contrato -vigente hasta 2036-, el pago de una indemnización que, según el informe pericial, superaría el millón y medio de euros, y la supresión de los gastos de comunidad a los que hace frente el Burger King (más de 4.000 euros al mes). Y es que, según el dueño del local, «pagamos a rajatabla, pero la empresa no está cumpliendo su parte con el mantenimiento, la limpieza, la iluminación ni climatización. Estamos a 14 grados ahí adentro», denunció.
El Burger King, desde el pasado 31 de marzo, ha registrado pérdidas del 60% sobre el volumen total de negocio. Casi 6.000 euros mensuales en negativo, cuando «era un negocio muy rentable» desde la firma del contrato de arrendamiento en 2016.
Por su parte, la aún gerente del Modoo, Paloma Hernández, aseguró desde el cierre solo se puede acceder al interior del Calatrava a través de una puerta está ubicada al lado del cuarto de basuras por Eduardo Herrera 'Herrerita', no desde el parking. «Hay un mínimo personal de seguridad y se mantiene la climatización y extracción», apostilló. Eso sí, argumentó, la propia disposición del complejo hace que «en algunas épocas del año no funcione correctamente».
Asimismo, Hernández también señalo que «siempre se ha hablado de un nuevo proyecto» para relanzar la sección comercial del Calatrava, aunque admitió no tener constancia de su contenido.
En ese punto, durante el turno de conclusiones de la defensa de RPPSE Espacio Oviedo, la empresa, acusada de incumplimiento de contrato, solicitó la resolución del mismo, a determinar el pago de una indemnización a la hamburguesería. No obstante, sus cálculos fueron notablemente inferiores a los de la parte demandante, con una propuesta de pago de 1.600 euros mensuales hasta el próximo 31 de marzo de 2021, entendiendo que sería en ese punto en el que finalizaría el contrato de Arnicio Restauración antes de los tres quinquenios prorrogables contemplados en el contrato. La jueza lo declaró visto para sentencia.
El 14 de febrero de 2019, Estabona Management comunicó a los establecimientos que quedaban abiertos en el Calatrava su intención de cerrar la superficie el 31 de marzo. Así fue, todos, salvo uno, tuvieron que marcharse y la mayoría aceptaron las compensaciones que había previsto el grupo. Otros, no lo vieron del mismo modo. Telepizza, Burger King y hasta el Real Oviedo demandaron a Estabona Managment por el «cierre forzoso» de sus locales.

No hay comentarios: