El gobierno local propone bajar el IBI diferenciado un 3,6% y un recorte del 3,4% en el tipo general
El PSOE plantea 24 enmiendas a las ordenanzas para rebajar el IBI general un 15% y los precios públicos un 25% para ayudar a las familias
Los italianos, cada vez que llenan el depósito de gasolina, siguen pagando un impuesto especial introducido por Mussolini para financiar la guerra de Abisinia. Los impuestos, una vez creados, tienen una resistencia notable. El PP y Ciudadanos se opusieron con rotundidad el mandato pasado a la introducción del tipo diferenciado del IBI para grandes valores catastrales. Aducían que el gravamen destruiría empleo y desincentivaría la inversión en Oviedo, y anunciaron su supresión si llegaban al gobierno. El discurso cambió hacia su progresiva eliminación tras la toma de posesión de Alfredo Canteli, aunque se aprobó una rebaja de más del 15,6% para este año. Para el que viene, según la propuesta del equipo de gobierno para las ordenanzas fiscales de 2021, la reducción del tipo se queda en el 3,6%, casi idéntica a la del tipo general, de un 3,4%, que pagan los otros 115.000 bienes inmuebles sujetos al gravamen de la ciudad.
La rebaja, en realidad, no es tal, dado que la actualización de la ponencia de valores catastrales suma alrededor de un 5% anual al valor a efectos fiscales de los inmuebles de la ciudad hasta 2022. Todos, grandes y pequeños, pagarán un poco más por la 'Contribución' que este año. Aún así, el Grupo Municipal Socialista, en aras «de la equidad», exigió ayer al equipo de gobierno que baje el tipo general al 0,49, un 18,6% para que coincida con la rebaja de la que se han beneficiado los grandes inmuebles en 2020 y la propuesta para 2021.
El portavoz socialista, Wenceslao López, defendió la enmienda de su grupo como una cuestión de «equidad, respetamos la bajada que hacen a los grandes propietarios, pero proponemos igualarla para todos». Tiene pocos visos de ser aceptada, supondrían una reducción de ingresos de más de 8 millones de euros. Más opciones tiene la encaminada a mantener el límite para las desgravaciones por familia numerosa en los 150.000 euros de valor catastral, que PP y Ciudadanos quieren subir para 2021 a 160.000 euros.
Para López, el proyecto fiscal de «las derechas» supondrá que «en 2021 van a pagar más los que menos tienen», ya que «rompe las bases» de los principios de equidad y progresividad, y supondrán una carga para las familias «en tiempos de pandemia». Una razón por la que rechazó la subida del precio del agua y alcantarillado, del 1% y la primera en cinco años. «No se les ocurre otra cosa que subir un bien básico en medio de la pandemia» y «más en un proceso en el que ha quedado claro que se ha pagado de más a Aqualia durante varios años», censuró.
«Pádel, tenis y terrazas»
Los socialistas plantean justo lo contrario, una rebaja generalizada de todos los precios públicos del 25%, lo que supondría una ayuda importante para las familias ovetenses que pagarían menos por los servicios de Educación, Cultura, Deportes, la ayuda a domicilio o las escuelas infantiles. López destacó que «el bipartido únicamente propone rebajar los precios públicos del tenis y el pádel», y denunció que el equipo de gobierno «muestra su sentido patrimonial de lo público, olvidan a las personas, los autónomos y el pequeño comercio y utiliza la fiscalidad para beneficiar a los suyos, a su círculo de poder».
Algo parecido destacan los socialistas en el capítulo de tasas. En la del uso lucrativo del espacio público, el equipo de gobierno solo contempla una rebaja del 25% para las terrazas de hostelería. López defendió que «Oviedo no es solo hostelería» y pidió la misma rebaja para el resto de comercios y pequeños empresarios, «sean del gremio que sean». En algunos caso, la tasa, además, sube. Casi el 50% para los mercados temporales, como el de Navidad.
Licencias
La fiscalidad municipal tiene unos límites muy estrechos. La mayoría de bonificaciones o exenciones vienen fijadas o prohibidas por ley. Los esfuerzos de los ayuntamientos, en especial tras la crisis económica de 2008, por reforzar la actividad empresarial y comercial en sus ciudades tienen siempre el mismo objetivo: las licencias. Agotadas o casi las ventajas en los permisos de actividad, el equipo de gobierno propone para 2021 una rebaja del 25% en la de obras de adecuación de locales para la apertura de nuevos negocios. Para los socialistas la propuesta es insuficiente y sesgada, y apuestan por una rebaja del 50%, pero solo para autónomos y microempresas al entender que la redacción propuesta por PP y Ciudadanos beneficia a quien no lo necesita, como grandes superficies o cadenas. Además, el PSOE pide que la ordenanza de comida a domicilio se desligue de la de ayuda a domicilio, «para crear un servicio con identidad propia, no como un complemento».
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