miércoles, 7 de octubre de 2020
Voto de Calidad!!!!
El Pleno de Oviedo aprueba unas tasas a la baja para el próximo año con el voto de calidad del alcalde
El concejal de Economía señala que Oviedo perderá 4,5 millones de ingresos del Estado y que la situación no permite mayores rebajas fiscales
El Ayuntamiento retomó ayer los plenos presenciales, interrumpidos desde marzo; en la sesión se aprobaron las ordenanzas fiscales para 2021. / ALEX PIÑA
El Ayuntamiento retomó ayer los plenos presenciales, interrumpidos desde marzo; en la sesión se aprobaron las ordenanzas fiscales para 2021. / ALEX PIÑA
GONZALO DÍAZ-RUBÍN
OVIEDO.
Miércoles, 7 octubre 2020, 00:50
Tener mayoría absoluta convierte cualquier asunto espinoso en un remanso de paz. PP y Ciudadanos cumplieron con el acuerdo que les une desde junio del año pasado y despacharon el primer Pleno de la 'nueva normalidad'. No uno cualquiera, «uno de los más importantes del año», como recordaron varios de los concejales, sin sobresaltos. Las ordenanzas fiscales para el próximo año, que contemplan la congelación de los precios públicos y la reducción de tasas como el IBI, con una bajada del 4 por ciento, salieron adelante gracias al voto de calidad del alcalde, ante la ausencia, al estar de baja, de la edil delegada de Educación, Yolanda Vidal (Ciudadanos). El voto en contra de los dos concejales de Vox obligó a repetir brazos en alto y al regidor a deshacer el empate a 13 entre apoyos y noes.
Aún siento unas tasas entre congeladas y la baja, el concejal de Economía, Javier Cuesta, defendió que no se puede ir más allá en las rebajas fiscales «por prudencia» ante un escenario «complejo» y en el que la oficina Presupuestaria estima que se perderán 4,5 millones de euros de ingresos del Estado el año que viene. Esa mayoría absoluta, le permitió pasar por alto las contradicciones señaladas por Somos y PSOE en la propuesta. Cosas como que se rebajen un 25% las tasas a las terrazas «para aumentar su rentabilidad» y ayudar a un sector muy castigado por la pandemia, dijo Cuesta; pero se suba la misma tasa a mercadillos como el de La Ascensión, el de San Mateo o el de Navidad, que sube de 0,25 céntimos por metro cuadrado y día a 1,5, le señaló la socialista Ana Rivas. «Es como con los grandes propietarios, que solo sufren ellos la pandemia», ironizó la edil, acerca de la rebaja del IBI, 20% en dos años, a los grandes valores catastrales.
Un capítulo, el del IBI diferenciado, en el que la portavoz de Vox, Cristina Coto, pidió al alcalde que imite a su homóloga gijonesa y suspenda el gravamen por resolución, porque «no es el IBI de los ricos, sino de los que generan riqueza y empleo» y, en la dirección contraria, Rubén Rosón, exigió «progresividad, que paguen más quienes más tienen» y subir el tipo al 1,3, para «aliviar la carga a las familias». Incluso la socialista Ana Rivas recordó que «no todos los inmuebles (afectados por el tipo diferenciado, alrededor de 120) tienen actividad económica».
El debate no movió las posiciones, salvo Vox que, después de pedir menos impuestos, se opuso a las enmiendas reiteradas en el Pleno por el PSOE y en las que se promovían mayores rebajas fiscales.
La mayoría absoluta permitió también el nombramiento como vocal del consejo Económico Administrativo de José Antonio Iglesias, cuyos méritos son «ejercer diez años como abogado y en asuntos administrativos», por lo que tiene «las competencias técnicas para el puesto», tal y como defendió Cuesta. Para la oposición, sus méritos son que «tiene carné del partido». «Gracias a tu dedazo, a los ovetenses les va a costar 60.000 euros al año un señor cuyo único mérito es acabar la carrera de Derecho», le espetó el edil de Somos, Rubén Rosón. El socialista Ricardo Fernández recordó que «no es un militante de base, es secretario de la dirección del PP de Asturias» y que «sonrroja justificar la capacidad técnica con dos folios y medio». «Vienen a repartirse el botín», censuró. El edil de Economía insistió en la «legalidad» del nombramiento, que, además, viene a solucionar las carencias de personal del organismo, con la presidencia vacante desde 2016 y sin cubrir por el anterior gobierno del tripartito.
Suplemento y decretos
La mayoría de gobierno, con la abstención de Vox, también hizo decaer las cuatro proposiciones de urgencia en un Pleno, el primero presencial desde marzo, que se alargó seis horas, con dos pausas para ventilar de 20 minutos y en el que sobrevolaron las incógnitas acerca del próximo presupuesto municipal. Coto preguntó varias veces por la suspensión de las reglas fiscales, que «dibuja un escenario que no hace solo que estas ordenanzas sean pobres, es que son viejas»; Rosón exigió «debatir ya un plan de reactivación» con cargo a los 50 millones del remanente. Cuesta enfrió las expectativas: «Salió el otro día la ministra y lo dijo. En eso, concuerda con vuestros cuatro años de gobierno, las cosas ya están hechas con solo anunciarlas. Los decretos tienen un trámite y veremos qué queda», señaló, de paso que recordaba que ya no se habla del fondo para los déficits del transporte público, que Oviedo estima en cerca de 9 millones para este año.
Sobre las ayudas suprimidas a la cooperación. La presidenta de Codopa, Ana Andrés, tomó la palabra al finalizar la sesión para apelar a los valores éticos del alcalde y señalar que la concejala delegada Leticia González no dice la verdad sobre las razones por las que se ha suprimido la convocatoria. «Pasamos del 0,7% en cooperación, al 0,0%», censuró Rosón.
Del Páramo, nuevo edil
El Pleno de ayer sirvió también para que Ignacio Fernández del Páramo tomara posesión, de nuevo, como concejal de Somos Oviedo y representante del grupo en el Consejo Rector de la Fundación Municipal de Cultura. Lo hace en sustitución de Anabel Santiago, que renunció a su cargo el pasado mes de agosto por desavenencias con la portavoz del grupo municipal, Ana Taboada. Del Páramo fue concejal de Urbanismo y Medio Ambiente en el anterior mandato.
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