lunes, 2 de mayo de 2022

La Educación en U.S.A.

2 de mayo de 2022 Author Headshot Por David Leonhardt Buenos días. ¿Por qué las escuelas estadounidenses progresaron tanto en la década de 1990 y principios de la década de 2000? Las habilidades de lectura y matemáticas de los estudiantes han mejorado desde la década de 1990.Sarah Blesener para The New York Times Más información Los lectores de este boletín saben que tratamos de evitar el sesgo de las malas noticias. Mis colegas y yo cubrimos muchas historias preocupantes aquí, pero también queremos asegurarnos de que estamos cubriendo las alentadoras. El mundo está lleno de ambos, después de todo. Hoy, me voy a centrar en una tendencia positiva y en su mayoría pasada por alto en la educación estadounidense. Durante años, probablemente has estado escuchando que nuestras escuelas están en crisis. Y la educación K-12 en los Estados Unidos ciertamente tiene problemas. Pero también ha estado mejorando durante gran parte de las últimas décadas, de acuerdo con varias métricas cruciales. A partir de finales de la década de 1990, las habilidades matemáticas de los estudiantes de las escuelas primarias y secundarias comenzaron a mejorar. Unos años más tarde, las habilidades de lectura también comenzaron a mejorar. Estos son los resultados promedio de la Evaluación Nacional del Progreso Educativo para estudiantes de cuarto y octavo grado desde 1996: Fuente: NAEP, vía Brookings Institution Y aquí hay medidas de desigualdad racial de la parte matemática de la misma prueba. Como puede ver, las brechas entre los estudiantes blancos y los estudiantes de color disminuyeron en la década de 1990 y principios de la década de 2000: Fuente: NAEP, vía Brookings Institution Las brechas raciales en las habilidades de lectura también se redujeron durante este período. Como dice Thomas Kane, profesor de educación y economía de Harvard, sobre el reciente progreso educativo: "Puede ser el éxito de política social más importante del último medio siglo del que nadie parece ser consciente". Rendición de cuentas y dinero Parece que hay dos causas principales. Primero, muchos estados comenzaron a enfatizar la responsabilidad escolar a partir de la década de 1990. Massachusetts, Carolina del Norte, Texas y otros estados midieron más rigurosamente el aprendizaje de los estudiantes y presionaron a las escuelas con dificultades para que adoptaran enfoques que funcionaban en otros lugares. El movimiento de rendición de cuentas se hizo nacional en la década de 2000, a través de leyes firmadas por George W. Bush y Barack Obama. El momento en que aumenta el puntaje de la prueba es consistente con esta historia, como han señalado los investigadores de la Brookings Institution. Como puede ver en los gráficos anteriores, las mayores ganancias se produjeron poco después de que los estados comenzaron a responsabilizar a las escuelas por el aprendizaje de los estudiantes. En años más recientes, las ganancias se estabilizaron. Este patrón sugiere que las escuelas hicieron algunos cambios importantes en respuesta a las políticas de rendición de cuentas, pero luego lucharon por mantener el ritmo de mejora. Una segunda causa importante del aumento del aprendizaje parece haber sido la financiación escolar: aumentó durante la década de 1990 y principios de la década de 2000. Los estados con aumentos especialmente pronunciados incluyeron Michigan, Nebraska, Nueva York y Vermont, según Kenneth Shores de la Universidad de Delaware y Christopher Candelaria de Vanderbilt. Por lo general, los aumentos de fondos fueron mayores para las escuelas de bajos ingresos que para las escuelas de altos ingresos. Eso puede ayudar a explicar por qué las brechas raciales en las habilidades de lectura y matemáticas disminuyeron. "La exposición a niveles más altos de gasto público de K-12 cuando estás en la escuela tiene un efecto beneficioso bastante grande en los resultados adultos de los niños", dijo Kirabo Jackson, economista de la Universidad Northwestern. "Esos efectos son mucho más pronunciados para los niños de familias de bajos ingresos". Por supuesto, hay advertencias a las tendencias recientes en el progreso educativo. Las brechas raciales, aunque más pequeñas, siguen siendo grandes. Los puntajes de lectura no aumentaron tanto como los puntajes de matemáticas (tal vez porque la lectura está más influenciada por la vida de los estudiantes fuera de la escuela, mientras que las matemáticas se enseñan principalmente en la escuela). Los puntajes de las pruebas de la escuela secundaria no aumentaron tanto como los puntajes de la escuela intermedia o primaria. Y algunas formas de rendición de cuentas fracasaron, lo que llevó a las escuelas a centrarse más en la toma de exámenes que en el aprendizaje real. Mejores vidas Sin embargo, la tendencia general —los niños estadounidenses que aprenden más— fue enormemente positiva. La educación a menudo cambia la vida de las personas. Un estudio en Texas, por ejemplo, encontró que las mejoras en las escuelas que anteriormente tenían dificultades llevaron a los estudiantes allí a tener más probabilidades de graduarse tanto de la escuela secundaria como de la universidad y de ganar más a los 25 años. Una investigación más amplia ofrece un mensaje similar. La brecha salarial entre los graduados universitarios y todos los demás está cerca de un récord. Los estadounidenses más educados tienen más probabilidades de tener relaciones estables y ser felices con sus vidas y menos probabilidades de sufrir de soledad, dolor crónico y abuso de alcohol y drogas. Estas diferencias han existido durante mucho tiempo, pero se han ampliado significativamente en las últimas décadas, como documentaron los economistas Anne Case y Angus Deaton en su libro de 2020 "Muertes de desesperación y el futuro del capitalismo". Es por eso que la mejora en la educación estadounidense durante la década de 1990 y principios de la década de 2000 fue motivo de celebración, como dice Kane. Merecía ser una noticia importante, aunque no lo fuera. A estas alturas, imagino que algunos de ustedes están pensando: ¿Pero qué ha pasado con estas tendencias durante la pandemia? En otro boletín esta semana, trataré de responder a esa pregunta.

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