Hay que seguir este camino....

Tasa y pisos turísticos: Asturias y Galicia ponen en común los retos de gestionar el «refugio climático» L.O. ASTURIAS F. Sotomonte Los presidentes Rueda y Barbón defienden coordinarse para establecer políticas coordinadas 26 sep 2023 . Actualizado a las 05:00 h. Comentar · 4 En un clima de diálogo y puesta en común de intereses y retos coincidentes para ambas comunidades, los presidentes de Asturias y Galicia, compartieron este lunes en Vegadeo la necesidad de abordar de forma conjunta la forma en que las comunidades del norte se han convertido en un destino predilecto para el turismo, habiendo superado ya ampliamente las cifras de visitantes previas a la pandemia, y respondiendo a los problemas que puede ocasionar para la gestión de recursos públicos y la masificación. Lo hicieron con dos focos en el punto de mira: la posibilidad de una tasa turística en los municipios y la regulación de las viviendas turísticas. El verano de récord en las dos comunidades ha llenado playas, montañas, restaurantes, hoteles, ciudades y pueblos. Pero ha empezado a despertar la preocupación entre gallegos y asturianos por la masificación que, en otras comunidades, ha afectado al entorno de sus paisajes e incluso a la prestación de servicios públicos (por ejemplo en lo que atañe al abastecimiento de agua) y por otra parte por el auge de las llamados pisos turísticos que en el sector de la hotelería profesional levantan ampollas y son juzgados a menudo como una competencia desleal pero que, en todo caso, puede llegar a suponer un peligro grave para la población general al dispararse los precios de la vivienda hasta hacerla inaccesible. Y hay comunidades en España donde no pueden permitirse pagarse el alquiler, médicos, maestros o policías. ¿Se implantará una tasa turística en Asturias o en Galicia? Cada presidente lo acogió de una forma distinta aunque coincidieron en que sería muy positivo que lo que vaya a adoptarse se haga de forma coordinada entre ambas comunidades que quieren hacer valer su atractivo como «refugio climático». Dudas sobre la tasa El presidente asturiano, Adrián Barbón señaló que ya había tratado la cuestión de la tasa turística con los ayuntamientos tras el encuentro celebrado con los alcaldes días atrás, apuntó que no contaba con estudios formales para hacer una valoración de su impacto, que no había sido una demanda general de los ediles y que, en todo caso, les planteó que estaría dispuesto a valorar que los municipios que la vieran necesaria y la quisieran aplicar lo hicieran de forma «voluntaria». Mucho más reticente se mostró el mandatario gallego, Alfonso Rueda, quien consideró «peligroso» dar el mensaje de que las comunidades no son capaces de gestionar el ritmo de visitantes actual que, a su juicio, está muy lejos de poder considerarse saturación. Así recordó que en Galicia solo la ha pedido el Ayuntamiento de Santiago, que dirige la nacionalista Goretti Sanmartín, y e insistido en que algo que debería abordarse «teniendo mucho cuidado». En todo caso insistió en que «no voy a dejar de tomar una decisión por lo que diga Asturias, pero evidentemente si en Galicia se adopta, los que la propongan en Asturias harán más presión para que su Gobierno la ponga también. Nos gustaría que nos impactase de forma coordinada. Si creemos que somos un destino único, global, lo deberíamos hacer coordinado». Los pisos turísticos Menos dudas hubo sobre la regulación de las vivienda de uso turístico, que ambos presidentes apostaron por abordar a corto plazo advirtiendo de los problemas que puede causar al dispararse los precios en las ciudades. «Hay que ir a una regulación, y en este sentido también comparto que podemos avanzar las dos comunidades en un marco similar. Y no lo digo tanto por la cuestión de la competencia dentro del sector turístico sino por el perjuicio que causa para el coste de la vivienda, que es inasumible para la gente»; remarcó Barbón. El presidente asturiano recordó que años atrás había podido visitar sin problemas la playa de As Catedrais en Galicia pero hoy es necesario hacerlo con restricciones precisamente por esa masificación y, en el caso de Asturias, puso el ejemplo de la restricción del acceso a los lagos de Covadonga para los vehículos privados tras el accidente de un autobús. «Es esto lo que nos obliga a regular, porque además buena parte del atractivo que tenemos como comunidades es la preservación de los espacios naturales y si dejamos barra libre a modelos del chiringuito permanente, de otros turismos, es algo que puede acabar con lo que nosotros hemos heredado, un elemento fundamental para nuestro desarrollo. Tendrá que haber controles, habrá controles de acceso donde haya riesgo de masificación». «Prohibirlos es ponerle puertas al campo (...) Pero la solución no es dejarlo estar hasta que sea ingobernable», indicó Rueda respecto a los pisos turísticos. Añadió que debe ser una «solución global», porque no es viable que «en una comunidad esté acotadísimo y al lado haya barra libre», dijo Rueda. «Lo ha dicho Alfonso muy bien», señaló Barbón, quien afirmó que hay trabajadores del sector turístico que «duermen en tiendas de campaña» por la imposibilidad de encontrar vivienda en los lugares donde residen. También cargaron contra los «negacionistas del turismo», como los calificó el presidente socialista. «A quienes dicen que el turismo no crezca más les digo lo mismo que Alfonso: de eso nada», subrayó Barbón. El titular del Ejecutivo gallego había ironizado con la postura del BNG, al que no citó, y de otros que después del covid se preguntaban «qué hace la Xunta por el turismo y ahora preguntan qué hace para frenar la afluencia turística».