martes, 14 de septiembre de 2010

La Velocidad, ratio más razonable.

TRAS LAS DECLARACIONES DE TELEFÓNICA

Cambios en las tarifas de Internet: límite de velocidad a las descargas

El nuevo modelo no implicará una subida de precios, sino que pondrá coto a la utilización de la Red

14/09/2010 - 07:55 - JOSÉ M. CAMARERO

Cambios en las tarifas de Internet: límite de velocidad a las descargas.
Nueva facturación de telefonía. Las fuertes inversiones realizadas obligarán a las operadoras a limitar la velocidad de conexión a Internet a partir de una cota, como ocurre en otros países. Los expertos no creen que haya subida de precios para quien más consuma, pero sí unos cupos para evitar saturación.

El uso tan dispar que cada ciudadano realiza de Internet conllevará un cambio en el modelo de tarifas vigente, tanto en ADSL para los hogares como en conexiones a través del móvil. Se acabará la época en la que las descargas se multiplican en un mismo ordenador las 24 horas del día. En principio, el nuevo modelo no implicará una subida de precios, sino que pondrá coto a la libre utilización de Internet.

Así lo estiman los expertos, después de la afirmación realizada por el consejero delegado de Telefónica, Julio Linares: el sistema actual «no es sostenible», porque mientras que el crecimiento y los costes de la Red se multiplican, los ingresos de las operadoras no compensan esos crecimientos.

¿En qué aspectos puede cambiar? Las novedades llegarán más por la vía de las limitaciones de descarga que en los precios. Porque el problema de España es que unos pocos son los que más uso de Internet realizan. De hecho, el 20 por ciento de los usuarios de ADSL realizan un uso intensivo de la Red, frente al 80 por ciento restante, que la utiliza de forma moderada o esporádica. En el caso de la banda ancha móvil, es apenas un 5 por ciento de los usuarios el que «ocupa» la mayor parte de los conexiones, frente al 95 por ciento restante.

Ante estas cifras, «siempre es lógico poner unos límites tanto en voz como en datos», explica Jesús Portal, socio director y responsable de la práctica de Telecomunicaciones de Arthur D. Little. «No preveo que las operadoras vayan a imponer precios variables» en función del uso que se realice, afirma Portal, quien sí apuesta por que «se controle la utilización de banda ancha móvil» y no tanto el de Internet de ADSL, «cuyas tarifas seguirán siendo planas».

¿QUÉ SE ESTÁ HACIENDO EN EUROPA?

Muchos países están siguiendo la senda marcada por Reino Unido, cuyo mercado cuenta con tarifas planas de conexión a Internet, pero con ciertos límites.

Por ejemplo, Austria es el país europeo en el que más competitividad existe: con 11 millones de habitantes, cuentan con cinco grandes operadoras. «Allí se impusieron tarifas planas tan bajas que le costaban dinero al mercado», indica Jesús Portal.

En Reino Unido, Islandia y Hungría ya se ha impuesto un modelo con el que se limita el uso, pero no los precios. Por ejemplo, por 20 euros al mes, la operadora inglesa Call Talk ofrece conexión a cualquier hora, con un límite de unos 40 gigas al mes. A partir de esa cota, la velocidad a la que se puede conectar el usuario cae considerablemente.

En el caso islandés, por aproximadamente 32 euros se puede realizar uso de Internet durante todo un mes, pero con un límite de descargas que llega a los 50 gigas.

«Ahora podemos descargar un giga en pocos minutos, pero hace unos años esta velocidad era impensable», explica Javier Sanz, responsable de Adslzone.

USOS INTENSIVOS

Parece que el límite de 50 gigas es el que se impone en la mayoría de los operadores para evitar la saturación de la red. ¿A cuánto asciende esa cota? «Se trata de un uso medio, no es tanta capacidad de conexión como parece», explica Javier Sanz. «Por ejemplo, sólo con conectarte al portal de Youtube y ver algún video de unos minutos, estás haciendo un uso intensivo de la Red», afirma este experto.

Para hacerse una idea de si el uso que usted realiza de Internet es intensivo o no, puede tener en cuenta estos parámetros: la descarga de un video diario durante todo un mes, supondrá un uso de 2,5 gigas; al navegar por la Red durante dos horas al día, puede llegar casi al giga de consumo; si envía 10 correos electrónicos diariamente, apenas tendrá un uso intensivo de Internet; y si se descarga 10 canciones al día, gastará otro giga de su consumo habitual de Internet.

Es decir, que para alcanzar los 50 gigas que imponen en otros países como límite máximo al mes, hay que realizar un uso realmente intensivo de Internet, con continuas descargas de documentos, visualización habitual de videos, etc.

«La gente que más descargas realiza habitualmente es la que en realidad sube el precio de Internet», explica Javier Sanz, de Adslzone. «Lo lógico sería que se baje el precio al 90 por ciento de población, que es la que menos consume, y que al resto se les mantengan las actuales tarifas», indica.

¿QUÉ QUIEREN LAS OPERADORAS?
Por ahora, tanto Telefónica como Vodafone se han mostrado dispuestas a replantear el actual sistema de tarifas. El consejero delegado de Vodafone, Francisco Román, ha afirmado que «es imposible estimular una demanda infinita con una capacidad finita».
En el caso de Orange, en principio, se ha distanciado de sus dos grandes competidores. El consejero delegado Orange España, Jean-Marc Vignolles, ha afirmado que su compañía no tiene intención de modificar «a corto plazo» su estructura de tarifas actual, tanto para conexión a Internet fijo (ADSL) como para móvil, ya que no ha detectado ningún problema de congestión de tráfico en sus redes
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Sin embargo, no es un «no» rotundo, porque desde Orange admiten que el tráfico de la Red se multiplicará por ocho hasta el año 2015.
Será el propio mercado el que determine cuál es el importe y las restricciones de cada tarifa. «Todos los operadores pueden poner los precios que quieran en el mercado minorista», ha recordado Reinaldo Rodríguez, presidente de la Comisión del Mercado de Telecomunicaciones (CMT). «Lo único que les impide ponerlas a unos es que otros no lo hagan y pierdan clientes», afirma el máximo responsable del regulador de «telecos».

Para anticiparse a lo que pueda ocurrir en el mercado español, algunos expertos analizan qué es lo que están haciendo las operadoras en otros países.

FILIALES EN EL EXTRANJERO

En el caso de Telefónica, por ejemplo, la filial de la operadora en Reino Unido, O2, ya incluye en sus políticas de uso que cortará Internet a sus clientes que más se descarguen. En las condiciones de acceso de tarifas como O2 Home Broadband Fair, se impone un límite de 20 gigas de datos, a partir del cual se emite un aviso. Si éste se ignora, se procede a la interrupción.

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