¿Por qué McLaren necesita ahora a Fernando Alonso?
¿Cuál de las dos situaciones sería una de las principales noticias de la temporada? ¿El batacazo deportivo de McLaren, o el interés del equipo británico por Fernando Alonso?
Ferrari no es el gran fiasco de la temporada. Si bien los últimos cuatro años han puesto en evidencia su techo – y sus carencias-, en 2013 McLaren ha sufrido la peor temporada desde en décadas. Porque resultaba inconcebible que un equipo de su historia y categoría no logre siquiera un podio en toda la temporada, y que incluso pueda perder el quinto puesto de Constructores frente a Force India, un equipo con su misma motorización.
Pero que McLaren pensara en Fernando Alonso para el futuro resultaba más inconcebible todavía. Pero es cierto. Lo reconocieron sus responsables públicamente en Singapur. Los principales periodistas británicos más especializados, con sus “off the record” con miembros del equipo, también confirmaron que existen negociaciones. McLaren se ha rendido a la evidencia. Como Ferrari, el equipo británico también necesita darse la vuelta como un guante. Puede que más si cabe.
El panorama McLaren no puede ser más demoledor. Al final de la temporada se queda sin Vodafone y está por confirmar que cuente con otro patrocinador de su dimensión. Su visibilidad y exposición ha caído dramáticamente en 2013 por el fracaso del Mp4/28. De ganar casi 25 millones de euros en 2011, el equipo británico ha perdido casi cinco el pasado año, y posiblemente este ejercicio será igual o peor vistos los resultados. En su cincuenta aniversario, ha tenido que mantener un perfil inmerecidamente bajo para su historia. Pero hay más.
La próxima temporada será un equipo ‘cliente’ en motores, a la espera de Honda en 2015. Y no cuenta con ningún piloto de primera línea, alguien capaz de desequilibrar desde el volante con su aportación, lo que son capaces de hacer Hamilton, Alonso y Vettel. Jenson Button ha dejado claro su perfil, cuenta con personalidad extraordinaria para hacer equipo y un sueño para los responsables de la comunicación y marketing. Un piloto que cuando cuenta con un monoplaza que le entre en la mano como un guante, es imbatible. Pero sin la capacidad a una vuelta de los mejores, ni tampoco la habilidad para superar las carencias de un monoplaza como Alonso o Hamilton, o Vettel, a no ser que cuente con una máquina totalmente competitiva.
¿Y Checo Pérez? Todavía no se ha visto en el mexicano la dimensión que necesita un equipo como McLaren. Este año no ha superado a Button ni en puestos de parrilla, ni en mejor clasificación en carrera, ni en puntos. Y si bien es cierto que es su primera temporada en el equipo con todo lo que ello implica, es difícil ver en Pérez hoy el “supercrack” de futuro que McLaren necesita.
En este contexto tan oscuro, no resulta extraño que en McLaren tengan que acudir a aquello de ‘a grandes males, grandes remedios’. Tanto el equipo como Honda necesita una superestrella al volante, pero solo hay tres en la actualidad. Una, les dejó el año pasado. Otra, no les dejará mientras tenga a Adrian Newey a su lado ¿Y la tercera?
Fernando Alonso no ha logrado títulos con Ferrari, pero sí ha logrado confirmar estos años su capacidad para exprimir tanto al material como a su equipo. ¿Exageración? Solo hay que leer las palabras de Christian Horner antes del Gran Premio de Corea. “Siempre le tenemos ahí pegado…” venía a decir. Ocurrió igual el año pasado. Y en McLaren saben que necesitan un perfil semejante. Porque hoy el británico es un equipo en decadencia.
Debe resultar muy duro para McLaren tener que acudir a Alonso. Quizás no se hubieran planteado la posibilidad de ser por la polvareda levantada en la relación de Alonso y Ferrari. Hoy, que el equipo británico se plantee recuperar al español debe ser realmente especial para su orgullo personal, pero también señal de la enorme preocupación que debe imperar en McLaren ante la llegada de Honda.
Desde el punto de vista estratégico, el interés de McLaren supone una enorme baza para el piloto español frente a Ferrari, una as en la manga, un contrapeso de presión si el equipo italiano mantiene el mismo nivel competitivo de los últimos años. En la Scuderia ya saben que a final de 2014 pueden quedarse sin el español.
¿Quién le iba a decir a Kimi Raikkonen que el destino daría semejante giro se encontraría en la posición actual años después de ser despedido de Ferrari en 2010? Dado el contexto que sufre McLaren, y la frustración que debe sentir Alonso tras cuatro años sin título, quién sabe lo que podría ocurrir el próximo año.
Cuando Alonso era pequeño y corría en karts, le preguntaba a su padre cuando ganaba ‘¿Ha llamado ya Ron Dennis?’ De otra forma diferente pero, sí, a Fernando Alonso le han llamado desde McLaren como soñaba cuando era pequeño. Dentro de un año veremos qué ha contestado.
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