Como mi Güelu en 1900....
Uno de cada diez jóvenes busca su futuro en el extranjero
El paro, la falta de salidas profesionales o los bajos salarios fuerzan a la juventud al exilio económico
Lunes09 de junio de 2014
LUIS FERNÁNDEZ
La población en edad comprendida entre los 16 y los 29 años considerada migrante al extranjero es ya de 17.848 personas, lo que representa un 12% del total de la población juvenil asturiana, frente al 4,31% de España, según datos del INE. Es decir, algo más de uno de cada diez jóvenes optan por labrarse su futuro profesional y laboral fuera de España. El paro, la falta de salidas profesionales, los bajos salarios o simplemente la falta de expectativas, fuerzan a los jóvenes asturianos a buscarse la vida más allá de nuestras fronteras
Estos datos han sido recogidos en un informe elaborado por el Consejo de la Juventud de Asturias sobre la cualificación para trabajar de los jóvenes del Principado. En nuestra región tenemos más emigración juvenil que en el resto de España, en donde la población juvenil migrante es de 323.846, lo que supone un 4,31% del total de entre 16 y 29 años.
Según estos datos, referidos al año 2013, habría 5.727 jóvenes emigrantes de entre 15 a 19 años, 6.206 de edades de 20 a 24 años y 5.915 emigrantes de 25 a 29 años. La mayoría buscan trabajo en Alemania y otros países de Europa, aunque una parte también acuden a Latinoamérica y Estados Unidos, siempre según el sector al que pertenezcan.
Este fenómeno, que es creciente, tiene relación con la situación laboral y económica pues en diciembre de 2013 había 23.110 jóvenes de 16 a 29 años registrados como demandantes de empleo.
La pérdida de población se ve también reflejada en los registros censales, si bien en este caso no se puede saber a ciencia cierta el motivo de la baja. Además, hay que tener en cuenta que muchos de los que se van no se dan de baja del censo. Pero así y todo entre 2012 y 2013 se pasó de 147.421 jóvenes a 140.421, es decir hubo una “población perdida” de 7.318 habitantes.
El presidente del Consejo de la Juventud del Principado de Asturias, Marcelino Sánchez, valora muy negativamente estos datos y cree que desde las administraciones “no se están haciendo políticas de empleo para paliar este éxodo. Hace años se hablaba de despoblación en Asturias por la emigración hacia centros urbanos o a otras comunidades autónomas. Ahora la emigración es a otros países y continentes”.
'MOVILIDAD JUVENIL'
Sánchez critica a la ministra de empleo Fátima Báñez por denominar al fenómeno migratorio como “movilidad juvenil” “cuando en realidad es un exilio obligado”.
Y aunque en Asturias la proporción de emigrantes es mayor, el problema se está dando en todo el Estado, asegura Sánchez, quien pone nombres y apellidos a los causantes del actual éxodo: “Fueron las sucesivas reformas laborales primero con Aznar y luego con Zapatero y ahora con Rajoy las que influyeron mucho en este fenómeno por el número de despidos y la baja calidad de los empleos. Antes nos quejábamos de que los jóvenes eran mileuristas. Ahora muchos no llegan al salario mínimo o simplemente no tienen ingresos y viven de sus familias”.
No obstante también existe otro perfil de jóvenes que no se van al extranjero por problemas laborales o económicos sino a aprender idiomas o simplemente a completar sus estudios. Muchos de ellos tienen ya una edad más avanzada y han decidido regresar a los estudios para ampliar sus conocimientos. Pero, señala el presidente del Consejo, son una mínima parte de los que emigran.
Los recortes presupuestarios a consecuencia de la crisis también afectan a esta parte de la población, dado que, por ejemplo, la falta de inversiones en I+D hace que baje la calidad de la investigación en las universidades y haya que buscar un refuerzo fuera. “Tampoco la política de becas ayuda, porque en muchas ocasiones se pagan con posterioridad a los estudios realizados y muchos jóvenes no pueden adelantar ese dinero”, explica Marcelino Sánchez.
ASTURIAS SE CONVIERTE EN UN ASILO
Adrián Redondo es secretario de empleo y juventud de CCOO de Asturias recuerda que su sindicato lleva denunciando este éxodo desde hace una década. “Debería plantearse para la Administración como una cuestión de Estado, porque la pirámide poblacional está invertida y están convirtiendo a Asturias en un asilo”.
La tendencia ha cambiado mucho en los últimos años, explica Redondo, “antes la gente venía a Asturias a trabajar a la industria, a la minería. Ahora es una provincia de salida porque no hay un mercado dinámico, está parado y echa a la gente preparada fuera”. Por este motivo piensa que debe de producirse urgentemente un cambio en la política económica que en Asturias “debe de pasar por apostar por el tejido industrial como eje estratégico que sirva para arraigar a la población”
Para CCOO, la principal razón del éxodo juvenil es que “no hay trabajo” pero además entienden que hay un desfase entre el tipo de trabajos que se ofrecen en Asturias, de baja calidad y mal remunerados y lo que demandan jóvenes muy bien preparados y con mayor aspiración salarial.
Redondo cree que la mayor parte de la emigración sigue dirigiéndose hacia Madrid y Barcelona porque son lugares de gran actividad económica aunque también se ha detectado un gran movimiento hacia países de la Unión Europea.
El informe del mercado laboral español realizado en 2012 por Infojobs y ESAD, decía que dos de cada tres jóvenes españoles menores de 30 años en búsqueda de empleo se deciden por buscar trabajo fuera de España. De estos jóvenes que buscan empleo en el extranjero el 65% intenta encontrar oportunidades en Europa.
El país más interesante para los menores de 30 años es, por razones idiomáticas, Gran Bretaña, una opción para el 49% de ellos. Por detrás, encontramos a Alemania (32%), Irlanda (28%) y a los países nórdicos (27%). En España sólo el 51 % de los españoles y las españolas con edad comprendida entre 25 a 64 años aseguran conocer al menos un segundo idioma media europea que está en 66%. Todos estos datos se desprenden de un estudio comparativo que fue presentado por el Eurostat en Septiembre de 2013. Sólo los ciudadanos de Hungría y Bulgaria están por detrás de los de España en estos conocimientos. Esa es una de las razones del fracaso de la emigración hacia el extranjero, dado que este nivel tan bajo de conocimientos idiomáticos es una gran barrera para lograr éxitos fuera de nuestro país. La diferencia es que en el éxodo juvenil no está ocurriendo porque los jóvenes sí saben idiomas y están mucho mejor preparados que las generaciones anteriores.
EL TESTIMONIO
En los problemas con el idioma incide Concha Caiña. Esta periodista asturiana reside en Londres desde hace 14 años. En la actualidad es directora creativa de la empresa Bespoke Spain, que procura contenidos sobre España a empresas extranjeras. Dice que ha notado en los últimos dos años un incremento de jóvenes españoles y asturianos buscando trabajo y que se ha producido un cambio cualitativo en su perfil, dado que antes venían los veranos a aprender el idioma y ahora ya se quedan todo el invierno a trabajar. Su edad anda por los veintitantos años y la mayoría tienen carrera, aunque cuando llegan a Inglaterra se pasan los dos primeros años trabajando en hostelería para mejorar el idioma y es entonces cuando dan el salto para ingresar en empresas que les ofrecen su perfil profesional..
Y es que el problema, explica Caiña, es que "el nivel de inglés sigue siendo bajo, aunque es mejor que el de los españoles de anteriores generaciones y para encontrar trabajo aquí no cuenta tanto el currículum, tu imagen o tu situación personal sino que hables bien su idioma". Piensa que el segundo idioma sigue siendo la "asignatura pendiente" de España. Lo que sí observa es que hay muchos jóvenes españoles que además de tener una buena preparación "son muy creativos y tienen muy buenas ideas, pero no tienen trabajo". Entre los españoles que se quedan a trabajar en Inglaterra muchos lo hacen en empresas de ingeniería, en clínicas veterinarias y en el sector sanitario (enfermeras sobre todo) e incluso empieza a haber economistas y empresarios en la city en el sector de finanzas.
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