jueves, 3 de marzo de 2016

Un gran futbolista....y.


Fiel a sus colores!

 Miguel Pérez Cuesta ´Michu´

Futbolista

"Me llamó Manolo Preciado y me dijo que contaba conmigo, pero mi amor por el Oviedo me impedía ir"

Miguel Pérez Cuesta is back. El talento ovetense vuelve a casa para recuperar la sonrisa que fuera sensación en la Premier. Su maltrecho tobillo derecho frenó en seco la aparición de un jugador distinto. Michu personifica la ascensión a los cielos y la posterior caída a los infiernos del fútbol no profesional. Ahora batalla contra el miedo y contra sí mismo para volver por sus fueros. Del Bosque vislumbró en su día en él la figura del ansiado falso 9 en la mejor selección nacional de la historia. Si las lesiones le respetan, Langreo será sólo un puente aéreo a la élite del fútbol mundial, el lugar que le corresponde. Oviedo reza para que su último samurái vuelva a batallar.

ANDRÉS MENÉNDEZ PUENTE

@ANDRESMPUENTE
LUNES 29 DE FEBRERO DE 2016
Dicen que todas las historias malas siempre tienen una parte buena, vuelve a casa.
Volver a casa, sin duda, es lo mejor de todo lo que me ha sucedido. Llevaba casi diez años sin vivir ya en Asturias y siempre fui un chico muy casero. Es que aquí lo tengo todo, están mi familia y mis amigos. Creo que no hay mejor sitio para recuperarse que en casa, aquí vuelvo a ser feliz.
Todo lo que tengo está aquí. Volver a casa es lo mejor de todo lo que me ha sucedido
Recientemente Valdés afirmó que su lesión le cambió la vida…
Claro que te cambia la vida. Yo tenía una molestia y empiezan a pasar los días y no se va. Evidentemente, lo pasé muy mal porque veía que me levantaba cada día y no había ninguna mejoría. Incluso llegué a decirme, pues ahora tengo que aceptar vivir con este dolor.
¿Se da cuenta que es importante desde el primer momento?
Sí, pero también pensé que con tratamiento y reposo se iba a ir. Fue un proceso largo. También probé con alguna infiltración, pero veía que no había avance ninguno. Tampoco veía progreso cuando pasé por el quirófano hasta que empecé a aceptar la realidad, quizá ese dolor no remitiría nunca.
Para un deportista de élite, ¿es más importante la lesión o la ansiedad por volver?

Cuando estás lesionado estas apartado de todo. Estás prácticamente marginado, tus compañeros viajan y tú vas al gimnasio

El peor momento para un futbolista es siempre cuando estás fuera y estás lesionado, prácticamente marginado. Estás apartado de todo. Mientras tus compañeros ven vídeos de táctica, tú estás en una clínica, cuando ellos terminan, a ti te toca ir al gimnasio. Algunos compañeros son como tu familia y ni los ves. Te pierdes absolutamente todos viajes, concentraciones y los partidos. 
¿Qué se te pasaba por la cabeza entonces?
Pues yo quería volver pronto, me pasaba días y días notando que no avanzaba. Fue una época muy, muy, jodida. Traté de volver pero no podía ser el mismo porque las molestias no remitían. Podía competir pero no era yo, no era Michu. Cuando luchaba por un puesto con mis compañeros estaba en absoluta desventaja. Ellos estaban más rápidos, más fuertes, y yo en cambio venía de estar mucho tiempo parado. Cuando estaba en el Napolés, decidí parar una vez y después en verano volví a parar hasta que ya me di cuenta que bastaba. Me dije basta, no lo voy a hacer más, no notó mejoría.
Traté de volver pero cuando jugaba no era yo, Michu
También Nadal reconocía padecer ansiedad. ¿Tan importante es la fuerza mental?
Bueno, para mí Nadal es el mejor deportista español de la historia. Rafa remontaba juegos con 0-40 por su fortaleza mental. ¿Cuántas veces ha estado abajo y siempre ha vuelto a ganar? Muchas, muchísimas. Su cabeza es única no habrá nadie como él. Para mí la cabeza es una parte fundamental y no lo digo sólo en el deporte sino también en la vida en general. Hay jugadores que han llegado a Primera y no tienen esas condiciones físicas o técnicas para estar en la élite pero sí que tienen mucha fuerza mental.
Se le caen a uno los anillos después de ser llamado por Del Bosque y verse ahora jugando en Tercera
No he cambiado, soy el mismo niño que hace diez años jugaba en el Oviedo
Bueno, podría ser perfectamente normal, pero a mí cuando me llegó esa explosión tan rápida no se me subió nada a la cabeza. No he cambiado, soy el mismo niño que hace diez años jugaba en el Oviedo o que hace siete era suplente en el Celta. Ahora vengo a Langreo y no me considero ni más ni menos que nadie.
¿Qué pensaba cuando leía en prensa que estabas acabado?
Creo que con el tiempo me he intentado abstraer. Antes, cuando estaba al máximo nivel, leía en la prensa esas cosas y me hacían daño. En el fútbol, cuando ganas eres el mejor y cuando las cosas van mal estás acabado. Así que decidí abstraerme para que todas esas cosas que lees no te acaben por influir.
Hubo cosas que se decían que me hicieron daño. Decidí abstraerme
Siempre destacó por ser un jugador muy pasional.
Sí, siempre fui así. Soy un chico muy nervioso, no paro quieto ni un momento, de pequeño tenía a mis abuelos locos (risas). Ahora con treinta años ya nadie me va a cambiar.
Cuando estaba en Vigo jugando en Segunda recibe una oferta del Sporting. Tuvo la oportunidad de volver a Asturias y jugar en Primera. ¿Por qué no fue?
Yo soy del Oviedo y no lo he ocultado nunca. Siempre me moví por sensaciones y está claro que hubo una opción real. Me llamó directamente Manolo Preciado y me dijo que contaba conmigo para jugar en Primera. Pero es que era imposible jugar allí, yo soy del Oviedo. Casi todo lo que soy como jugador de fútbol se lo debo al club.
Entonces, ¿le gustaría volver imagino?
Claro que me gustaría volver. El Real Oviedo es mi club y soy lo que soy en gran parte por ellos. Yo quiero volver al Oviedo, pero no de cualquier forma
¿Si no recupera ese nivel no volvería al club?
No, no. Yo no volvería al club por volver. Me gustaría volver pero para jugar siempre con mi máximo nivel. Si tuviese alguna duda o no pudiese dar ese nivel seguro que no volveré al Oviedo.
Le tocó vivir dos culturas diametralmente opuestas como la española y la inglesa...
En Inglaterra es una cultura totalmente distinta. Allí juegas y puedes ir perdiendo en casa por 0-3 y la afición te sigue apoyando y animando. En España la cultura es totalmente distinta, el fútbol se concibe de una forma muy personal y pasional, no tiene nada que ver. Aquí que un jugador salga si acaba de perder un partido es inconcebible, se monta un lío muy gordo.
¿Cómo valora el momento que está pasando el país?
Bueno, intento leer bastante e informarme, quizá no esté tan conectado como otros, pero es que cuando lees que cada cosa que pasa es más grave que la anterios pues .... creo que ahora habrá un cambio y creo también que es necesario.
¿Cuál sería el final feliz de su historia?
Poder volver a competir al máximo nivel, pero ahora no es el momento de pensar el final, ahora tengo que ayudar al Langreo a poder conseguir el ascenso y en junio ya veremos lo que sucederá.

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