Asturianínos en apuros....

Nozar tiene un 'agujero' de 415 millones y afronta reclamaciones de Hacienda

El Economista

El grupo Nozar no consigue ver la luz al final del túnel. En concurso de acreedores des- de septiembre de 2009 y con una deuda total de 1.378 millones de euros, su situación es cada día que pasa un poco más complicada.

La empresa acaba de depositar en el Registro Mercantil de Madrid sus últimos datos consolidados, correspondientes al ejercicio cerrado el 31 de diciembre de 2010, y las cifras no invitan, al menos por ahora, al optimismo. Aunque es cierto que las pérdidas se han reducido sustancialmente, desde 329 a 93 millones de euros, la facturación global del grupo ha caído un 140 por ciento, hasta 147,3 millones de euros.

De hecho, tal y como adelantó ya elEconomista, la sociedad matriz pasó de facturar 260 millones en 2009 a tan sólo 1,18 millones en 2010. El grupo, que está presente en otros negocios, como la construcción, la alimentación, las bodegas o el turismo, intenta sobrevivir así como puede. Pero el resultado es que los fondos propios arrojan ya un saldo negativo de 415 millones de euros, un obstáculo que cada vez parece más difícil de saltar. Sobre todo porque, lejos de mejorar, el agujero se hace cada vez más grande y la cifra se ha incrementado en 86 millones desde que entró en concurso. Las cuentas han sido presentadas por los Nozaleda y no cuentan con el aval de los administradores concursales.

No obstante, y aunque con salvedades, sí que han sido firmadas por el auditor, que advierte, eso sí, de "la incertidumbre sobre la recuperabilidad de determinados saldos e inversiones, principalmente en sociedades vinculadas al sector inmobiliarlio".

Para terminar de agravar aún más si cabe la situación, en 2010 la Agencia Tributaria ha levantado nuevas actas fiscales contra la compañía reclamando 20 millones de euros y abriendo un expediente sancionador por otros 2 millones más. La sociedad ha firmado en disconformidad actas por un total de 9 millones, interponiendo los correspondientes recursos y provisionando dicha cantidad, por lo que se entiende que el resto debería haberse pagado ya.

Desde la compañía, en cualquier caso, el silencio es absoluto. Saben que no hay dinero, pero también que Hacienda no perdona. AH Auditores, la firma que ha supervisado las cuentas, se limita a asegurar que "esta situación es indicativa de una incertidumbre en cuanto a la resolución final de este proceso y su incidencia en ls cuentas anuales". El auditor ahonda así en el escepticismo y advierte, por si fuera poco, que, se están llevando a cabo nuevas inspecciones, con lo que "se podrían poner de manifiesto pasivos eventuales de naturaleza fiscal cuyo importe es de difícil cuantificación objetiva".

Estrella... estrellada

Los Nozaleda constituyen así el ejemplo más recurrido y cómodo para explicar qué fue el estallido de la burbuja inmobiliaria en España. Las estrellas bursátiles de 2006 y principios de 2007 explotaron con la llegada de la crisis del mercado inmobiliario y de crédito. Y del cielo a la tierra firme, a estrellarse con una realidad que hoy todavía hace estragos: los excesos del ladrillo. Así, la familia que en 2007 estaban invertidos en las acciones más activas del mercado (Astroc, Colonil o Aisa) vieron como su valor se desplomaba y acababan por volverse en su contra.

No obstante, la familia nunca ha tirado la toalla y mantiene su actividad empresarial y está dispuesta a reconducir sus negocios para darles continuidad... si el Fisco se lo permite. "De momento tienen tesorería para ir afrontando pagos y su intención es rescatar en la medida de lo posible a la empresa una vez superada la crisis", aseguraron fuentes cercanas a la familia el pasado mes de octubre.

Los hermanos Nozaleda Arenas mantienen cuatro grandes actividades en las que pretenden continuar: la inmobiliaria, la hotelera, la vitivinícola y la alimentaria. La inmobiliaria Nozar está pendiente de que culmine la negociación con los acreedores sobre el volumen y plazos de pago de los débitos de manera satisfactoria.

Los Nozaleda presentaron solicitud de proceso concursal para Nozar en 2009, pero la autoridad judicial impuso retrotraer el proceso a 2008 al entender que era entonces, un año antes, cuando la empresa debiera haberse acogido a la suspensión de pagos. Esto dio lugar a una devolución de pagos de entidades financieras. En septiembre de 2008, la compañía fue calificada como la quinta inmobiliaria española más endeudada (tras Colonial, Metrovacesa, Martinsa-Fadesa y Reyal-Urbis)