La letra pequeña del reparto de canales que el Gobierno oficializará el próximo viernes provoca honda inquietud en las televisiones. Al punto de amenazar con abrir un nuevo cisma entre los grandes grupos audiovisuales y el Ejecutivo, a semanas vista de las elecciones generales. Según afirman diferentes fuentes del sector, las cadenas manejan la posibilidad de que el Ministerio de Industria introduzca in extremis una obligación para que Mediaset y Atresmedia, que aglutinan más de un 80% de la publicidad del sector, deban comercializar también -y por obligación- la de las cadenas más pequeñas que así lo soliciten.
Aunque se trata de un planteamiento que aún no ha cuajado, un movimiento de esa índole tendría perdedores y ganadores. Entre los primeros, las editoras de Telecinco y Antena 3, que se verían obligadas a replantear toda su política comercial y dar entrada en la misma a su competencia, por pequeña que esta sea. Entre los segundos, los otros agraciados con una licencia, veáse Secuoya, Real Madrid, Kiss FM y, sobre todo, 13 TV, que ha reconocido abiertamente el hándicap que supone pelear en un mercado copado por dos rivales con una potencia fenomenal.
“La concentración y duopolio del mercado formado por el grupo Mediaset y el grupo Atresmedia impiden el funcionamiento normal del mercado publicitario y la obtención por parte de 13 TV de los ingresos necesarios para estar ya en resultados positivos”, señalaba la firma controlada por la Conferencia Episcopal en sus últimas cuentas. El propio presidente de la Cadena Cope y responsable económico de la Conferencia Episcopal, Fernando Giménez Barriocanal, esgrimía ese mismo argumento durante un desayuno informativo celebrado en Madrid. A nadie se le oculta que Soria haríaun gran favor a estos grupos con una disposición de esa índole.
Advertisement
“No está claro que vayan a implementarse finalmente muchas de las cuestiones que están en estos momentos sobre la mesa, pero reflejan hasta qué punto se está jugando la partida hasta el último minuto -exponen estas fuentes-. Desde luego, Industria se puede encontrar con una lluvia de pleitos si obliga a que las grandes lleven a cabo esa comercialización conjunta". No hay que olvidar que el modelo que propone ahora Soria para los nuevos canales ya estuvo vigente en el pasado y fue prohibido por el regulador.
En manos de la CNMC
Publiespaña, la filial de Mediaset que vende en exclusiva la publicidad de Telecinco y del resto de canales del grupo, dejó de comercializar la publicidad de Intereconomía TV tras la fusión de Telecinco y Cuatro. La cadena se vio obligada a ello para cumplir con una de las condiciones que impuso en su día la antigua Comisión Nacional de la Competencia (CNC) para autorizar la integración de Telecinco con la televisión en abierto del grupo Prisa.
El órgano regulador estableció entre su condiciones que Telecinco rompiese sus acuerdos de gestión conjunta de publicidad de canales de TDT en abierto de terceros y no firmara nuevos acuerdos de este tipo. Por ello, poco tiempo después, Intereconomía se vio obligada sondear nuevas estrategias comerciales. En mayo de 2011 creó junto con Vocento la empresa ROI Media, pensada para gestionar conjuntamente la publicidad del canal de Julio Ariza y del multiplex de NET TV. Pero esta segunda alianza apenas duró dos años.
Por su parte, Atres Advertising, perteneciente al Grupo Antena 3, también tuvo que dejar de comercializar la publicidad de Veo 7, el antiguo canal que producía Unidad Editorial, después de que la CNMC le abriese otro expediente. El acuerdo entre Atres Advertising y Veo 7 se firmó en febrero de 2010 y apenas estuvo un año en vigor. Para el canal de 'El Mundo', la ruptura del acuerdo fue un duro varapalo por el que perdió cerca del 30% de su facturación publicitaria.
No hay comentarios:
Publicar un comentario