Open de Australia Masculino - Open de Australia 2016, Djokovic-Murray: Marciano y campeón en Melbourne (6-1, 7-5 y 7-6)
Novak Djokovic se impone a Andy Murray por 6-1, 7-5 y 7-6 y se corona campeón del Open de Australia 2016. En un partido en el que el número uno del mundo alcanzó los seis títulos en Melbourne del mítico tenista australiano Roy Emerson y Andy Murray decepcionó en uno de los envites más importantes de su carrera deportiva.
PROTAGONISTAS
Novak Djokovic: Primoroso el tenis del número uno. Como de otro planeta. Su superioridad sobre los mejores tenistas de la ATP es tan insultante que en la final del Open de Australia volvió a parecer un marciano. Lo hizo todo bien para ganar su sexto título en el torneo australiano. Una corona más en las vitrinas de un tenista que tras su undécimo título de Grand Slam empieza a mirar de tú a tú a los 14 de Rafa Nadal y a los 17 de Roger Federer.
Andy Murray: Mal partido y peores sensaciones. El tenista escocés entró en el duelo algo aturdido y tardó un set en sentirse parte del mismo. Es cierto que a día de hoy Novak Djokovic es un rival casi inalcanzable, pero en esta ocasión su tenis rindió muy por debajo de lo esperado. Excesivamente errático y quejicoso su tenis no brilló el día en que lo tenía que hacer. Esta es la quinta final en Melbourne que pierde el jugador británico.
NUDO
Con poco descanso llegó el tenista escocés a esta final -ayer Andy Murray estaba viendo a su hermano disputar la final de dobles bien entrada la noche- y, visto lo visto, lo pagó carísimo. Novak Djokovic, muy intenso desde el primer peloteo, desarboló a su rival en 30 minutos. Dos breaks, diez ganadores y un porcentaje de éxito del 81% con su primer saque dieron al tenista de Belgrado el primer set del partido.
En la segunda manga se abrió la caja de los truenos. Con un Andy Murray intermitente pero mucho más decidido, el envite se fue a un toma daca en el que el tenista británico firmó la friolera de 21 ganadores. Esta agresividad llevó el set a una lucha sin cuartel durante 80 minutos. Pero una vez más, el poder disuasorio que ejerce el número uno del mundo sobre sus rivales fue determinante para firmar un break que acabó por decantar el set a su favor.
El último capítulo del envite volvió a ser una auténtica montaña rusa. Con un Andy Murray encendido y a por todas, Novak Djokovic se mantuvo seguro de su tenis y dominante desde el fondo de la pista. Pese a todo, el jugador británico fue capaz de llevar el set a la muerte súbita. Una colofón brutal para que el tenista de Belgrado cerrara el partido a lo grande. Allí dejó su sello. Y en 63 minutos liquidó la manga y se volvió a coronar en Melbourne .
NUESTRA OPINIÓN: La victoria en este Open de Australia ratifica, si hacía falta, que Novak Djokovic es un tenista estratosférico. Una especie de marciano que parece invencible y que empieza con este nuevo título de Grand Slam a discutir en la historia a Rafa Nadal y Roger Federer. ¿Hasta dónde llegará? ¿Cuántos Grandes ganará? De momento, el Open de Australia 2016 ya es suyo.
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