La revisión del PGO en El Cristo sigue adelante y estará lista para su aprobación en febrero
El Principado desbloquea el trámite ambiental y somete a consultas previas el documento inicial, que prevé 800 pisos
El pasado día 14 la Dirección General de Calidad Ambiental y Cambio Climático elevó a consultas previas el borrador del estudio ambiental estratégico referido a la revisión parcial del Plan General en el área de El Cristo-Buenavista. Lo que puede parecer un mero trámite burocrático significa, en esencia, que el cambio de planeamiento en los terrenos del antiguo Hospital Universitario Central de Asturias y aledaños iniciado durante el pasado mandato, sigue adelante. El próximo 28 de enero, cuando acabe el periodo de exposición, el Ayuntamiento estará en disposición de realizar la aprobación inicial de la revisión parcial del PGO en el ámbito, fase previa a la elaboración del Plan Especial que lo desarrolle.
Que se haya desbloqueado el trámite ambiental -procedimiento requerido en las modificaciones urbanísticas- implica también que se restablece el calendario para completar la modificación. Un cronograma que, en principio, preveía que los documentos urbanísticos, por un lado, y los ambientales, por otro, se fueran aprobando al mismo ritmo. No ha sido así hasta ahora.
El pasado mayo, durante el último Pleno del mandato anterior, el gobierno local dio luz verde al documento de prioridades elaborado por los arquitectos Tur, Delgado y Cortizo. En grandes líneas, aprobó 800 viviendas, 400 de ellas de protección; pasar de 130 a 145.000 metros para equipamientos, y una edificabilidad que se dispara hasta permitir la construcción de 1,4 metros cuadrados por cada metro de suelo. Sobre los 229.000 metros cuadrados del viejo HUCA habrá en un futuro 320.600 metros construidos.
Lo hizo tras una negociación in extremis entre el entonces titular de Urbanismo, Ignacio Fernández del Páramo (Somos Oviedo) y la Consejería de Infraestructuras dirigida por el hoy senador electo Fernando Lastra para asegurar que el 50% de las viviendas previstas contarán con algún grado de protección.
Tras las elecciones municipales y autonómicas, el nuevo gobierno municipal formado por PP y Ciudadanos enfrió los ánimos tratando de meter en su cintura una actuación heredada y que sintió como ajena por estar pilotada desde el Principado, en virtud del convenio suscrito entre ambas administraciones en 2010 y en el que se renuncia al 10% de aprovechamiento municipal.
Hasta hace unas semanas, las dudas en Urbanismo acerca del proyecto fueron patentes. Los inconvenientes de frenarla definitivamente, también. El titular de la concejalía, Nacho Cuesta, deslizó la posibilidad de frenar la revisión parcial, para incluir cualquier cambio de planeamiento en la revisión del PGO que también está en marcha.
Días después, Alfredo Canteli desdijo a su primer teniente de alcalde afirmando que «el plan especial de El Cristo-Buenavista está ahí», confirmando que desde el Consistorio pretenden retomar las conversaciones con el Principado para reactivar la actuación.
Tras la desautorización del alcalde, Cuesta admitió que el desarrollo de lo que pase en el viejo HUCA se ceñirá a un plan especial, «sin ninguna duda» y añadió que tanto Principado como Ayuntamiento «estamos de acuerdo» en la necesidad de agilizar el desarrollo. Y remató el giro, señalando las ventajas obvias de mantener el trámite iniciado por el anterior equipo de gobierno: «La modificación puntual solo ha recibido dos alegaciones, en el caso de incluirla en el PGO podría verse afectado por reclamaciones de todo tipo», admitió acerca de los reparos planteados por el Colegio de Arquitectos o la plataforma SOS Viejo Hospital.
La plaza de toros
Sobre todo porque en esos contactos con el Principado, el equipo de gobierno espera obtener respaldo para la recuperación de la plaza de toros. Según lo conocido hasta la fecha, la reforma del coso de Buenavista está incluida en la actuación futura del HUCA y los planes del anterior equipo de gobierno pasaban por hacer viable su rediseño gracias a los aprovechamientos urbanísticos de toda la operación. Alfredo Canteli tiene la plaza como una de sus prioridades y tras su primer contacto con la consejera de Cultura, Berta Piñán, desveló que «lo más seguro es que se tenga que rebajar el grado de protección de la plaza. Lo que quiero es que el Principado sea sensible». El objetivo del alcalde pasa por crea un espacio cubierto para 5.000 espectadores sin cambiar la fisionomía del coso.
En cuanto al trámite medioambiental en sí, el documento inicial resalta las bondades de la actuación diseñada por los arquitectos vencedores del concurso de ideas. Afirma que la propuesta incide en la eficiencia energética, promueve usos continuados durante todos los días de la semana, contempla la reducción de la huella ecológica o que trata de «satisfacer las necesidades específicas de colectivos vulnerables o la intergeneracionalidad».
En cuanto al transporte, destaca la adopción de «un sistema de movilidad blanda» mejorando la conexión de El Cristo con el resto de la ciudad. Pretende, suavizar la abrupta topografía y revaloriza la accesibilidad metropolitana y territorial. En cuanto al patrimonio, prevé la conservación de los «edificios más valiosos mejorando su eficiencia y adaptándolos a los nuevos usos».
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