La edición española de la revista Forbes, que elabora el conocido ránking de millonarios, ha elaborado una comparativa de la atracción sobre los grandes patrimonios que tienen cada una de las distintas comunidades autónomas, y en su balance sólo Asturias (además de Madrid) aparece en términos positivos como territorio elegido por empresarios nacidos fuera del Principado pero que han elegido este lugar para hacer sus negocios. La comparativa de Forbes pone un ladrillo más en un modelo muy centralizado de la economía española, en la que el grueso de las inversiones se concentra cada vez más en la conurbación de la capital del Estado en detrimento del resto de comunidades y apunta que la denominada «España vacía» también tiene el mismo hueco a la hora de atraer a los multimillonarios.
El caso asturiano es singular dentro de la ya de por sí particular lista de la revista que sólo incluye a los 100 patrimonios individuales más altos, de esta manera quedan fuera de su balance territorial comunidades como Extremadura o Castilla-La Mancha pero también La Rioja y Navarra que está a la cabeza en renta media del país. Respecto al Principado, Forbes afirma: «en Asturias se produce un hecho curioso: dos de sus ricos de origen familiar en la zona (Víctor Madera y Carlota Galán) obtienen su riqueza de empresas localizadas en Madrid. Pero, en sentido inverso, Daniel Maté (1.600 millones) está considerado de origen vasco pero su riqueza se generó en Asturias».
Maté, que aparece en la última lista de Forbes como la decimotercera mayor fortuna de España, con un capital cercano a los 1.600 millones de euros, tiene inversiones inmobiliarias espectaculares, como la de la sede histórica de Telfónica en Barcelona, pero el grueso de ellas se concentra en Asturias, con el 3% de Glencore, y en consecuencia, un relevante papel directivo en Asturiana de Zinc.
En este sentido, Forbes destaca que con esa valoración Cataluña aparece como una comunidad em números rojos ya que «los ricos catalanes que han elegido Madrid u otra autonomía para sus negocios más representativos totalizan 17.500 millones, unos 2.000 millones menos».
Con todo, la concentración de patrimonio se acentúa en el caso de Madrid, también por la diferente manera en la que se crean las grandes fortunas en el presente. No ya en grandes industrias con una tradición de arraigo en un algún lugar sino por los dividendos de las cotizaciones de las empresas en las que participan en bolsa. Y lo cierto es que, las comunidades en sí no pueden hacer nada ni para favorecer ni tampoco para perjudicar la llegada de estos grandes patrimonios. Así lo destacó, al hilo de este estudio, el responsable de banca privada de Citi para España y Portugal, Eliseo Cervera, natural de Oviedo, en declaraciones al diario económico Cinco Días. «Es prácticamente imposible que una región tenga los mecanismos suficientes para poder crear una oferta competitiva lo suficientemente atractiva», destacó Cervera quien abundó en que la concentración de los grandes patrimonios se explica porque «hoy, estos perfiles necesitan de centros urbanos e industriales, de zonas que cuenten con todos los servicios necesarios para poder gestionar sus patrimonios».
Los que mecen la cuna
En el apartado concreto dedicado a Asturias, titulado por Forbes «Los que mecen la cuna de la riqueza», la revista destaca que los Masaveu siguen siendo, en términos patrimoniales, la familia «más poderosa de Asturias, aunque su fortuna se ha reducido este año en un 13% debido a los vaivenes de la bolsa».
Destaca que, si bien, el orgen de la fortuna familiar de los Masaveu está en el cemento, y que aún mantienen la fabrica de Tudela Veguin; con los años «han diversificado en banca (Liberbank, Santander, Bankinter), energía (EDP) y bodegas, entre otras actividades».También resalta la revista que buena parte de la riqueza familiar «proviene de la Fundación Cristina Masaveu y sus participaciones empresariales (770 millones) por lo que no puede atriburse a ningún miembro concreto. En el podio Forbes de tres grandes fortunas asturianas, detrás de los Masaveu, sitúan a Fernando Alonso (con 180 millones de euros) y a los Cosmen, en concreto a Felipe Cosmen (con 150 millones de euros).
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